El qué dirán.

Son casi las 11:15 pm, hace frío y ella está tardando mucho, la verdad no se porque le escribí. Me siento una tonta, estoy sentada en una escalera a la salida del hotel escribiendo. No quiero volver a entrar, pero no se si llamarla fue la mejor opción. Me siento confundida, voy a ir a tomar un trago con una chica que no conozco demasiado, pero me demostró que quizás me entiende mucho mejor de lo que lo hace Renata. Es mi amiga ¿Cómo me puede decir todo eso? Y encima pensar que está bien, pareciera que es una broma. 
No quiero pensar más y la cabeza no me para, ¿si lo dejo? ¿Qué va a pensar mi familia, mis amigos, la sociedad? ¿Acaso soy una mala persona? ¿Quizás no la peleé lo suficiente? ¿ Él me amara? ¿ Por qué nunca alcanza todo lo que hago?
Mis pensamientos cesan cuando la veo bajar del taxi, ella se acerca y se sienta a mi lado.
Morenita:_ ¿Qué te anda pasando flaca? ¿O tengo que suponer que tu llamada fue solo porque querías verme?
Ambar:_ No se como decirlo, pero necesitaba hablar con vos. Discutí con Renata.
Morenita:_ ¿Porque discutieron?
Ambar:_ Por lo que hablamos hoy, le dije que ya no quería seguir así y ella se enfadó. Supuestamente porque la gente iba a pensar mal de mí. Ademas agrego que me lo estaba diciendo porque era mi amiga, que estupida.
Morenita:_ Respira y cálmate. Quizás es el mejor consejo que te puede dar desde su punto de vista. Todos vemos la vida de maneras distintas, hay personas a las que le importa la estabilidad, la aceptación social o el dinero. Pero también gente a la que le interesan los pensamientos, los sentimientos, el amor, la amistad y la libertad. Ella es el primer tipo y yo soy el segundo, sin embargo vos estas en el medio, muy indecisa.

Me quedé pensando por un rato largo, hasta que le dije lo siguiente:
Ambar:_ ¿Sabes qué? tenes razón, por estar en el medio estoy así de destrozada, queriendo quedar bien con todos y al mismo tiempo trato de disfrutar mi vida.
Morenita:_ Ahora te voy a hacer una pregunta ¿Vos querés estar bien o querés estar mal?
Ambar:_ Es obvio que quiero estar bien. Es horrible sentirse así. 
Morenita:_ Mira, tenes que elegir, o estas bien con la sociedad o estas bien con tu corazón. 
Ambar:_ Es muy difícil.
Morenita:_ Pensanlo, es tu decisión. Pero sería una pena que se mal gastara esa personalidad intrigante encerrandola en una cajita por miedo. Mientras lo pensas vamos a tomar algo, conozco un lugar magnífico, se llama Konna Bar, es tranquilo y además tiene cerveza artesanal. ¿Te gusta la cerveza no?
Ambar:_ Sí, me encanta.
Llegamos al bar, parece un lugar bastante calmo. Y creo que es posible que llegue a distraerme.
Morenita:_ ¿Te gusta? Por lo menos acá podemos hablar sin tener los labios secos.
Ambar:_ Sí es lindo.
Morenita:_ ¿Y lo pensaste?
Ambar:_ Creo que sí, le voy a pedir un tiempo, estoy pensando en escribirle ahora. Además también planeo decirle a Renata que no se preocupe más por mi, ni por mi vida. Quizás no sepa lo que quiero en este preciso momento pero sí se lo que no quiero.
Morenita:_ Me parece perfecto.

Pedimos la primer cerveza y todavia no me sentia preparada para escribirle. Cuando ya íbamos por la quinta tome el telefono.

Ambar:_ Hola Thiago disculpa que te moleste, pero estuve pensando sobre lo que pasa entre nosotros. No sé que sentís vos pero yo quisiera tomarme un tiempo a solas. Aclaro que no tiene nada que ver con el viaje, sino que es porque yo ya no me siento bien a tu lado.

Celular de Thiago: Quedate tranquila, el ahora está durmiendo sobre mí pecho y estoy segura de que se lo va a tomar muy bien, ya que ahora él está conmigo. Un besito que disfrutes el viaje.

Estaba confundida y me sentía una estupida, yo sintiéndome culpable por querer tomarme un tiempo y resulto que soy re cornuda. 

Morenita:_ ¿Qué te puso?
Ambar:_ Creo que contesto una mina, me siento muy mal.
Morenita:_ Sos demasiada mujer para tan poca cosa. Se que decirte que no te sientas mal es inservible pero tenes que entender que ya está, te sacaste un peso gigante de encima. 
Ambar:_ Tenes razón.
Morenita:_ Tengo una idea ¿vamos al boliche?