Capítulo 42

Federico: así que ya son unos caballeros comprometidos. Necesito felicitarlos y también debo de hacer una advertencia y es que si no están seguros de hacerlas feliz deben de olvidarse de su compromiso.

Daniel: mi prometida se casará conmigo. Además, estoy seguro de que la puedo hacer feliz y sabes que me molesta que alguien más interfiera en mis planes.

Federico: solo quería asegurarme de que la hicieran felices. Nada más que ahora falta saber lo que dirá Matías sobre lo que acabo de decir.

Matías: siempre había sabido que algún día me iba a casar. Solamente que no debes de cuestionarnos, porque ya tomamos nuestra decisión y mi futura esposa se veía demasiado feliz cuando le di su anillo de compromiso.

Federico: entonces nuevamente les deseo muchas felices. Ahora si debemos de terminar con nuestra conversación para que podamos empezar a comer.

Ellos empiezan a comer y cada uno se veía demasiado distraídos. Federico estaba seguro de que estaban pensando en sus prometidas y él tenía el privilegio de tenerla a su lado, ellos tiempo después terminan de comer y cuando lo hacen se levantan de sus asientos para poder continuar con su día

Julia: me imagino que no te vas a separar de mí. Pero mi nana nos acompañara y sobre todo mi madre y mucho menos mi hermano tiene tiempo de cuidarnos.

Federico: tu hermano esta feliz con su boda y tu madre se está encargando de organizarla. Aunque prefiero que tu nana siempre nos acompañe.

Julia: mi nana me quiere y por eso hace esto. Ella sabe que tu eres mi felicidad y esta de acuerdo con que nos casemos, porque la opinión de ella también es muy importante para mí.

Federico: eso lo entiendo y como conozco los lugares de la casa a donde quieres que vayamos. Solamente que me imagino que iremos a la biblioteca y eso quiere decir que te voy a poder observar mientras lees un libro.

Julia: precisamente vamos a ir a ese lugar. Además, las personas normales solo van a leer y como tú siempre quieres acompañarme a todos los lugares en donde estoy te daré el gusto de hacerlo.

Federico: para mí siempre lo será. Debemos de irnos, ya que el tiempo pasa y quiero observarte toda la tarde, pero también en la noche.

Julia: jamás te vas a conformar con el tiempo que estemos juntos mientras estemos comprometido y te recuerdo que falta menos tiempo para que sea tu esposa.

Federico: me comprometí contigo. Porque quería que fueras mía y yo siempre tengo todo lo que quiero y sobre todo tu nunca ibas hacer la excepción.

Julia: será mejor que nos vayamos a la biblioteca, por favor. Sabes que no puedes hablar de esa manera en mi casa y lo sigues haciendo.

Federico: no puedo evitar decirte lo que pienso. Necesito ser yo mismo contigo para que me ames como soy, nada más que tengo algunos defectos.

Julia: me acabo de dar cuenta cuales son esos defectos. Eso no debe de importarme, ya que tampoco soy perfecta y tampoco tengo la necesidad de serlo.