Capítulo 18

El silencio reino en la carpa después de la llegada de la mujer, Rebeca se soltó de Umar rápidamente nerviosa, gesto que no pasó desapercibido para 

─ ¿Qué haces aquí? ─Pregunto la bruja al ver a Umar─ Shu shu. Tienes trabajo acumulado─ Lo corrió como si fuera un inmundo animal, pero Umar no salió . Rebeca no sabía cómo reaccionar realmente, ya no estaba asustada, pero si nerviosa─ ¡Eres realmente una humana! 

─ ¿Y… usted no lo es? ─Pregunto con duda. La mujer se rio y negó como si fuera lo más normal del mundo. Umar que estaba detrás de Coti suspiro y se cubrió la cara con una mano mientras negaba 

─YO, soy una bruja, corazón─Le explico guiñándole el ojo─ Y estoy aquí para tratarte. Veras, hoy en la noche, tendrás nauseas, probablemente vómitos y mucha fiebre─ Rebeca, quien internamente ya se había calmado, pudo sentir por dentro como estaba a nada de volver a gritar, Umar en cambio sintió como si le acabaran de amarrar cadenas en el cuello─ Ah, soy Coti 

─Rebeca. Me llamo Rebeca─ Se presento, nerviosa. La mujer volvió a tomarla de las manos sonriendo emocionada 

─ ¡Tu debes ser la novia de mi hermano! ─Exclamo emocionada. Rebeca y Umar por un momento sintieron como el alma les abandonaba el cuerpo 

─Coti─ Hablo entre dientes Umar, con la intención de que cerrara la boca, pero fue ignorado olímpicamente. Coti siguió hablando puras barbaridades de que si se iban a casar o si ella estaba embarazada, pero Umar se interpuso en sus preguntas cuando el nombre de Josephine salió a flote─Es suficiente, lárgate─ Hablo enojado 

Coti se dio cuenta que había tocado un punto sensible al ver a Umar tan enojado, así que cerro la boca de inmediato 

─Lo siento. Bueno, ¿Rebeca, ¿verdad?  Soy Coti, la bruja en jefe del ejército. Voy a cuidar de ti de ahora en adelante ¿Esta bien? ─Rebeca asintió 

─Es un gusto conocerte─ Dijo únicamente. Hablaron un poco más, para conocerse, Umar se quedo en una esquina escuchando todo para asegurarse que su hermana jurada no dijera una estupidez nuevamente. Tras un rato más, Rebeca explico con sus propias palabras a Coti como había llegado ahí, así que ella asintió comprendiendo lo que la chiquilla decía 

─Bien, entiendo. Lo que mas urge ahora es tratar la fiebre que te va a dar mas tarde. Como es tu primer viaje entre mundos usando las esferas. Para eso estoy aquí─ Rebeca asintió. Hablaron un poco mas de otras cosas, sus familias, a que se dedicaba el ejercito hasta que Rebeca comenzó a mostrar síntomas de fiebre. Intento hablar con ella un poco más, pero rápidamente se durmió 

Umar entonces se acerco para levantarla y llevarla a lo que era la cama. Coti en cambio saco de su bolso un montón de hojas que comenzó a molestar con una piedra dentro de un cuenco y luego las echo al fuego, creando de esta manera una especie de incienso 

─ ¿Puedo dejarte encargada a Rebeca? ─Le pregunto Umar viéndola dormir 

─Por supuesto─ La sonrisa que Coti le dio lo calmo un montón, entonces él salió para volver a la carpa de los oficiales y seguir hablando 

Coti no tenía ningún apellido, era una huérfana que creció en las calles y más adelante conoció a Umar y Orum, quienes eran primos. Crecieron juntos y los tres se hicieron hermanos jurados junto a Josephine. Fue cuando estallo la revolución, liderada por Orum ante los excesivos impuestos y tiranía del gobierno del país 

Ella se había especializado en las cosas mágicas, como hechizos y pociones, los demás lideraron el camino militar. Pero pronto comenzó a notar el distanciamiento de Josephine con todos, especialmente con Umar a pesar de que ellos estaban… es una especie de relación, si tan solo hubiera visto las señales a tiempo, habría podido evitar la masacre de 3 batallones. 

AL principio, Josephine había desaparecido, Umar y Orum le dijeron que habían visto a Simón, el gobernador hermano del presidente de la república, cortarle la cabeza. Después habían estado inquietos por 3 meses, hasta que en una trampa, Umar desapareció por otros dos meses. Orum había dicho que o había encontrado pero que no podía traerlo de regreso porque estaba débil 

Finalmente regresaron esa mañana con una mujer extrañamente parecida a Josephine, solo para enterarse que Josephine jamás había muerto, es más, los había traicionado para casarse con Simón. Estaba, al igual que todos los demás, enfadada. Una masacre se desato por su culpa. 

Reviso periódicamente a Rebeca mientras le ponía un paño húmedo en la frente y le daba hierbas medicinales en agua, hasta que la fiebre comenzó a pasar después de unas cuantas horas. Para su sorpresa cuando salió, se encontró con un montón de personas curiosas por Rebeca. Querían verla y de ser posible hablar con ella, asi que tuvo que ahuyentarlas antes de que Umar volviera. Eran cerca de las 9 de la noche para este punto 

Ayar se acerco y se ofreció para cuidarla, así que Coti pudo irse tranquilamente dejando a Ayar cuidando a Rebeca. Para cuando Umar regreso, solo se encontró a las dos dormidas y se rio, así que mando a Orum a dejar a Ayar a su carpa y él se quedó cuidándola hasta que amaneció 

─Te juro, que voy a regresarte a tu casa─ Prometió en voz baja acariciando la mano de Rebeca 

─ 

Buenas buenas ¿Como estan? ¿Qué les ha parecido?

¿Ustedes que les gstaría? ¿Que Rebeca vuelva a casa? ¿O que se quede con Umar?

Dejen sus opiniones, los leo, pueden pasar a leer cualquiera de mis otros libros

Los quiere

-Elizabeth