Lincoln Loud.
Faltaba poco para que la hora de descanso terminará.
Todo en mi vida era perfecto. Tenía a mi familia y la chica que me gustaba había aceptado mis sentimientos.
Ahora ya no eramos solo amigos, eso me llenaba de alegría.
Pero no todo era color de rosa, había algo que no estaba bien.
Mi hermana lucy no dejaba de evitarme. Se que la he lastimado. Estoy seguro que yo soy la causa de su tristeza y todos sus males, aún sabiendo eso no puedo deducir de qué manera o forma la he lastimado.
Solo se que fui yo, Lucy no me habla, mi hermana no me mira, ni siquiera se toma la molestia de dirigirse a mi cuando es necesario.
Es como si ya no existiera, es como si yo, su hermano. Lincoln Loud hubiera desaparecido de este mundo.
Mi mirada se poso sobre mi asiento, mis ojos nadaron sobre los libros como si de alguna forma fueran a encontrar la respuesta a mis preguntas.
No era tonto sabía que unos simples libros no me darían la respuesta.
¿Pero que más podía hacer?
Estaba confundido, perdido, tratando de que todo estuviera bien.
Las cosas estaba mal con mi hermana, desde lo más profundo de mi corazón le amaba.
amaba a mi hermana lucy, todos lo sabían ella lo sabía.
Aún así eso no había evitado que me se hubiera convertido en la víctima, de llamarlo de alguna forma su rechazo y desprecio.
De repente todo mi cuerpo tembló. Mire a mi lado y encontré aquello que me había hecho temblar.
Se trataba de Ronnie Anne.
Ella había colocado su mano en mi hombro de manera afectuosa.
No dijo nada, pero su semblante decía que estaba preocupada por mi.
Ella no era tonta, últimamente pasábamos mucho tiempo juntos, y en esos encuentros ella había podido notar que estaba preocupado por algo.
Estaba preocupado por mi hermana Lucy.