En la casa del Beta Eduardo, se alarmó al ver llegar al Omega Sergio, le cuestionó;
—¿Cheyito que pasó con x?—
—”Tranquilo, todo salió bien, ella no recuerda ninguna de las partes donde fue entregada como Lana, ni siquiera al Alfa de África.
Todo se borró como lo programamos, estamos fuera de sospecha. "—
—”Al fin buenas noticias, tenemos que comunicarnos con el conde Drácula.
Cheyito mejor no podía salir todo.”—
—”Así es Eduardo, mañana visitamos al conde Drácula, le damos las buenas noticias.”—
Cuando terminaron de poner todas sus ideas en claro, se despiden, el Omega Sergio se retiró para su casa.
Al día siguiente, muy temprano el Omega Lubin con Rosalía y Alma se reunen con el Beta Juan que llegó con Sofía y Antonia.
Las dos avionetas ya las tenían listas, tenían órdenes de llevarlos a la isla, donde los esperaba el Alfa Adrik.
Cuando guardaron todo el equipaje, tomaron sus lugares dentro de la avioneta, el piloto prende motores, en quince minutos estaba sobrevolando, todo lo ven pequeño.
En la clínica el Alfa Antonio, intentó comunicarse con Margarita, de distintas formas, mientras tanto Erik se había quedado dormido.
En la Isla Lana estaba haciendo una tarea, estaba instalada en el escritorio de su esposo, estaba concentrada haciendo su deber, mientras tanto el Alfa Adrik había salido en busca de sus invitados.
Cuando la primera avioneta aterrizó, él se quedó mirando, la primera que se bajó fue Alma, fue con él.
Al llegar se abrazan y el le da muchos besos en su carita y le dice con ternura:
—”Mi nana Alma, te extraño mucho más, me haces falta.”—
—”Mi niño te extrañe mucho, pero ya no."—
—¿Cómo así?—
—”Mi niño antes no te veía, te extrañe, ahora si te estoy viendo y ya no te extraño. “—
—”Mi Nana Alma, no cambia, siempre haciéndome sentir bien, te amo mucho."—
Recibió al Omega Lubin y su esposa, se dirigió a Rosalía recordó una anécdota que vivió con ella :
—”Te recuerdo, ése día me había lastimado la pierna, yo tenía 8 años, fui en busca de mi nana Alma.
Recuerdo que se puso muy nerviosa, cuando se dió cuenta que me había hecho una herida profunda en el muslo.
Ella empezó a llamar:
—”Doctora Rosalía ven a ayudarme, mi niño se cortó la pierna.”—
Recuerdo que te vi salir con un botiquín de primeros auxilios, Lubin no supe de dónde salió, me llevó dentro de la casa.
Mientras me recuperaba de la herida, siempre estabas con mi nana Alma.
Bienvenida a nuestra manada, gracias por aceptar trabajar en la clínica.”—
—”Alfa Adrik, le debo dar informe de la manada."—
—”Nada de información por el momento, esperemos que llegue el Beta Juan.”—
Vieron llegar la otra avioneta, en donde llegaron el Beta Juan con Sofía y Antonia.
Cuando estuvieron todos reunidos, fueron a la casa, de camino iban hablando de anécdotas, riendo de todo lo que recordaban.
En la oficina del Alfa Adrik, Lana seguía cumpliendo con sus deberes , miraba con agrado como le está quedando todo.
Su loba le alertó de una presencia, cuando levantó la mirada, encontró delante de ella con una mujer, la confundió con su madre, las lágrimas empezaron a salir sin control.
En medió de su confusión dice, llorando con mucha tristeza:
—”Mami me viniste a buscar, ¿por qué no vino antes?—
Se pone en pie, perdiendo el conocimiento, el Alfa Adrik fue rápido, hizo un movimiento, estuvo a su lado impidió que cayera al piso, tomándola en sus brazos.
La llevó a la habitación seguido por sus invitados, Rosalía se preocupó al verla en ése estado de nerviosismo, el Alfa Adrik no se separa de su lado.
Cuando volvió en sí, tenía a Rosalía en frente de ella, se quedó mirando sin comprender que vino hacer su madre, no soportó más y volvió a perder el conocimiento.
Cuando Lana volvió en sí, encontró con Rosalía que la estaba mirando, antes de permitir que siga equivocada, le habló con ternura, mientras le acariciaba su cabello:
—”Lana soy tu tía Rosalía, tú madre y yo éramos gemelas, no lloré que me duele mucho verte sufrir."—
Lana se niega a creer que no sea ella su madre, la cuestionó:
—¿Me estás mintiendo?—
—”No, es la verdad soy tu tía, tú madre y yo éramos gemelas, te prometo que cuando estés tranquila te voy a contar todo, es bueno que sepas toda la verdad.
Le prometí a mí gemela que me encargaría de hacerle saber toda la verdad, pienso cumplir a su debido tiempo.”—
Lana lloraba sin poder controlar las lágrimas, dijo:
—’Pensé que mami, había venido por mi, No sabía que tenía una tía.”—
Ella trató de consolarla, le acaricia el cabello y le dice:
—”Hay muchas cosas que debo ir diciendo con calma, no te quiero confundir más de lo que ya estás.
Mi corazón ten paciencia, te aseguro que el Alfa Antonio no es tú verdadero padre, pero tú verdadero padre tampoco está enterado de tú existencia.
Es una historia que no te la puedo decir, tenemos que hablar por partes, para que la puedas entender."—
Lana con tristeza le preguntó:
—¿Por qué tiene que ser tan complicada?—
—”Lana no es complicada la historia, son los muchos secretos que tiene la historia guardados.
No te la puedo soltar de un sólo él relato, sería como dejarte con una bomba nuclear, entre las manos, sabiendo que te va a explotar en la cara .
Por eso te pido que tengas paciencia, te iré contando por qué pasó toda la historia."—
El Alfa Adrik no se pudo controlar, no le gusta verla llorar, la tomó en sus brazos y le dice:
—”Mi ciela, ya no lloré así, no te quiero perder, no se que hare sin ti, por favor cálmate, ¿ me quieres dejar sólo?—
Todos guardan silencio, la única voz que se oye es la del Alfa Adrik, le acaricia el cabello, su lobo se deja sentir para mostrar solidaridad con la loba de Lana.
Poco a poco se fue calmando, hasta que sus lágrimas dejaron de salir, cuando se dió cuenta que estaba su esposo allí.