Mi odisea en un mundo virtual

Capitulo 15 : Un peligro latente

En una especie de mazmorra abandonada se veía a un grupo de cuatro aventureros los cuales estaban asesinando a diversos slimes los cuales una vez eran derrotados soltaban frascos con un líquido misterioso dentro.

 

--Esto no funciona, ¡estos líquidos no nos harán tener grandes ganancias!—se quejó una chica con pinta de asesina lanzando un frasco al suelo destruyéndolo.

 

--Cálmate Sarina, quizás no tengamos grandes ganancias, pero al menos nos libraremos de nuestras deudas—ordeno un hombre viejo que parecía un caballero.

 

--Lo se capitán Rud, pero no puedo evitar pensar que estamos perdiendo el tiempo cuando podríamos ir por presas más grandes—dice Sarina pateando una roca.

 

Con algo de curiosidad esta piedra reboto a una pared empujando un bloque oculto, en ese momento varios mecanismos empezaron a activarse haciendo temblar el lugar entero causando el pánico de los aventureros.

 

--¡¿Ahora que hiciste Sarina?!, ¡no quiero morir sin haber tenido descendencia!—se quejó un chico con arco.

 

--¿Tienes que hablar de eso justo ahora Jaco?—pregunto Sarina tratando de no caerse.

 

--Sunset tiene un mal presentimiento—habla una maga refiriéndose a sí misma tratando de no caerse.

 

Para la sorpresa de los cuatro aventureros un muro que parecía completamente firme se abrió dejando ver un pasadizo que se ilumino con antorchas, esto lleno de emoción a todos los aventureros menos a Sunset quien tenía una cara de preocupación.

 

--Sunset cree que deberíamos irnos—dijo Sunset con algo de miedo.

 

--¿estas bromeando Sunset?, ¡encontramos un pasadizo oculto!, de seguro habrá muchos tesoros ocultos aquí—celebro Jaco.

 

--¿Usted que dice capitán?—pregunto Sarina.

 

--Creo que podríamos echar un vistazo, si este pasadizo estaba oculto era por que ocultaba algo, sería bueno averiguar que—afirmo Rud caminando por el pasadizo.

 

En completo silencio los cuatro aventureros caminaron por el lugar, la pobre de Sunset no paraba de mirar a todos lados temerosa de lo que pudiera pasar, al final llegaron a una gran puerta que empujaron revelando en su interior una gran cueva.

 

--¿Una cueva?, ¿acaso la mazmorra colisiono con una cueva?—se cuestionó Jaco.

 

--Déjame intentar algo—dice Rud tomando una piedra y lanzándola al interior del lugar.

 

Esta piedra una vez toco el suelo provoco que las antorchas del lugar se encendieran revelando en el lugar varias docenas de cascaras de huevo casi del mismo tamaño de una persona regados por el suelo, al ver que no había peligro los cuatro aventureros entraron a examinar el lugar.

 

--Parece que si era parte de la mazmorra después de todo—dijo Jaco caminando hacia una pared que tenía una gran runa dibujada--¿Qué es esto?

 

--Capitán… ¡Capitán!, ¡venga urgentemente!—grito Sarina que estaba arrodillada ante una cascara de huevo.

 

--¿Qué pasa Sarina?, ¿te lastimaste?—cuestiono Rud preocupado.

 

--No es eso, estas cascaras de huevo brillan, a simple vista parecen huevos de hierro, pero en realidad están ¡hechos de platino puro!—exclamo Sarina con alegría.

 

Esta afirmación hizo que sus otros dos compañeros se acercaran a las demás cascaras de huevos pudiendo notar que efectivamente estaban hechas de platino.

 

--Con todo el platino que existe aquí, ¡podremos jubilarnos tempranamente!—afirmo Sarina.

 

--Sarina tiene razón, esto es platino puro—afirmo Jaco sosteniendo una cascara de huevo en sus manos.

 

--En buena hora recibimos nuestra recompensa por años de esfuerzo, ¡tomen todo lo que puedan!, ¡viviremos como reyes a partir de ahora!—ordeno Rud.

 

Los cuatro empezaron a guardar en sus inventarios, en sacos y bolsas todas las cascaras de huevo de platino que podían, la pobre Sunset estaba caminando por el lugar recolectando cascaras de huevo cuando pudo ver un pequeño templo en el que estaba colocado un huevo entero de platino.

 

--Capitán Rud, ¡Sunset encontró algo!—grito Sunset llamando la atención de sus compañeros.

 

Sus otros tres compañeros se acercaron admirando el gran huevo de platino que tenían delante suyo.

 

--Este huevo de platino esta entero, lo que significa que hay algo dentro—murmuro Jaco.

 

--¿Qué deberíamos hacer con el capitán?—pregunto Sarina.

 

--¿No es obvio?, lo llevaremos con nosotros, por el tamaño debe haber kilos de platino y si hay algo dentro podremos venderlo bastante caro—Rud toca el huevo guardándolo en su inventario—ahora si salgamos de aquí, no queremos dejar pistas de este lugar.

 

--Sunset cree que esto es una mala idea—hablo Sunset en voz baja siguiendo a sus compañeros.

 

Los cuatro aventureros salieron del lugar sin darse cuenta de un ligero sonido de mecanismos moviéndose por debajo del suelo, luego de una hora un líquido rojizo cayo por toda la runa de la pared causando que brillara, segundos después un portal comenzó a abrirse dejando ver un gran ojo amarillento.

 

--Debo recuperar lo robado—exclamo una voz intimidante.

 

Tiempo después en la aldea lejana se podía ver a Rainer, Darius y Liria comiendo en un restaurante, Darius comía unas tostadas francesas, Rainer un tamal de pollo y Liria dos chuletas de jabalí, los tres parecían completamente tranquilos ese día.

 

--Agradezco que nos saque a comer maestro—agradeció Rainer.

 

--No tienes por qué agradecer, Liria y tú siempre cocinan las tres comidas del día, por eso quiero sacarlas a comer de vez en cuando para que descansen—aclaro Darius.

 

--Aun así tomemos esto como una especie de celebración para Rainer, lleva dos meses en el entrenamiento y ya solo le queda la prueba de construir el depósito, estoy muy orgullosa de ti Rainer—hablo Liria con alegría.




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