Mi Primer Y Único Amor, Un Amor Prohibido.

Capítulo 43

Mi primer y unico amor un amor prohibido 💕 

Capítulo 43 

—Mamá: ¡A mi hija la respetas!— le gritó—,  más zorra tu hija que anda en boca de todo el mundo, al menos de Diana nunca se ha escuchado ningún mal comentario.


—Gladis: Tu hija es un pt asolapada, con esa cara de mosca muerta se las da de santa.


—Diana: ¡Me respetas!—le grité—,¿quién demonios te crees para insultarme? sin ninguna razón.


—Gladis: No me hagas reír— soltó una carcajada—,ante mi se cayó tu teatro, Santiago se va enterar del tipo de mujerzuela que eres.


—Mamá: ¡Mira Gladis a mi hija la respetas! No te permito que le hables así.


—Gladis: Esta perra te tiene engañada—me señaló, parecía que sus ojos se saldrían—, pero se acabó, tu hijita la que tu crees una santa, se acostó con Anderson, como lo escuchas, no es virgen—mi mamá solo me miró, yo trataba de calmarme—,se besó con Juan, no contenta con eso, jugando con dos hermanos al tiempo, se quedó con el que cayó en sus enredos, con Santiago, si ella se quiere volver una puta que lo haga pero porqué tiene que atrasar a Juliana, a mi niña.


Estaba tratando de calmarme, pero cuando escuche el nombre Juliana fue como recibir un golpe directo en el rostro, no pude controlar mi enojo me fui encima de Gladis como una fiera la empuje, pero mi madre me sostenía de los brazos, esa mujer se puso pálida se alejó un poco de mí, le grité, mi mamá trataba de detenerme pero yo tenia mas fuerza que ella.


—Diana: ¡DE QUÉ HABLAS!— la muy cobarde se alejó un poco.


—Gladis: Juliana ya me contó todo, que tu la incitabas a escaparse con Camilo, acostarse con Mauro, que usted maldita degenerada le enseñabas películas para adultos para abrirle los ojos, además que te revolcaste con tu primo Anderson y con tu ex novio Luis, también te metiste a la cama de Santiago, por eso lo encoño, puta descarada, ¿Por qué tenías que arrastrar a mi niña a todo esto? 

—Diana: Mire vieja hp—abrió sus ojos como platos, a estas alturas ya había perdido toda mi paciencia—,de niña no tiene nada, esa es más zorra que cualquiera, la que anda revolcándose  con medio mundo es su hija, que quiere lavarse las manos conmigo es otra cosa, cuando quiera vamos a un ginecólogo que nos diga quien es la puta— le grité, me temblaba todo de la ira que tenía, Gladis se quedó callada bajó la mirada. 


—Mamá: Aquí  la única ciega eres tú, que crees que Juliana es una niña y tiene más mundo que todas nosotras juntas, yo conozco a mi hija, a mi nunca me ha llegado un mal rumor de ella, en cambio Juliana toda la vereda sabe que es una puta, anda en boca de todos,  cuando quieras las llevamos al ginecólogo que nos diga quien está mintiendo.

Esa señora empezó a gritar como una maldita loca, me decía puta, zorra, que yo quería arrastrar a su hija a la perdición, pero que estaba muy equivocada, que yo la obligué hacer cosas que ella no quería, que le decía que se escapara, que tomara licor, que tuviera relaciones, no me quedé callada le respondí de una manera muy grosera, le dije que más puta era Juliana que se acostó con el novio de Ana, que esperó a que estuviera borracho para revolcarse como los animales en el rastrojo, le grité de las veces que se emborrachó y nosotras la cuidamos para que no se aprovecharan  de ella, que yo tenía la conciencia tranquila, ella empezó a titubear no sabía que decir, le dije que Juliana tenía a quien salir puta, que más que el ejemplo de la tía Luz, que era una puta, que se revolcó con varios tipos, por eso sus hijas eran de diferentes papás,   sabía que para Gladis eso seria como una bofetada porque Luz es la hermana favorita, se me acercó con ganas de pegarme le detuve la mano con fuerza, le dije que no se atreviera a ponerme un dedo encima, que a partir de hoy estaba muerta para mi, la empujé quise irme a mi habitación, tenía tanta rabia que yo sabía que no la podría controlar,  cuando me gritó eso fue el detonante que hizo estañar todo. 

—Gladis: Maldita perra hp, te vamos a separar de Santiago, él no merece una mujer como tú, ya Juliana me contó que te metiste en medio de ellos dos, todo por la envidia que le tienes a mi niña. 

Sentí la maldita sangre correr por mis venas, la miré con odio y le grité.

—Diana: ¡Que me lo sostenga el la cara la perra de tu hija! La mato lo juro, ¡mato esa perra! 

Pasé por su lado la empuje, salí corriendo a casa de Juliana, escuché los gritos de ambas, mi madre llorando me gritaba que me calmara, Gladis gritaba, mi niña, en ese momento no entendí razones estaba furiosa, llegué a casa de Juliana y le grité “ sal maldita hija de puta, dame la cara, repite todo lo que dijiste de mi” Juliana estaba en el patio abrió sus ojos al verme y se puso pálida, sin darle tiempo de nada le di una bofetada, ella trató de devolvérmela, la agarré del cabello empecé a tirar de el con todas mis fuerzas, ella solo gritaba y lloraba, yo estaba furiosa le grité todo lo que tenía guardado, le dije que era una mentirosa, que ella misma se encargaría de descubrirse, en ese momento llegó mi madre y Gladis a los gritos, que la soltara que la iba a matar, la tiré al suelo la arrastre, ella solo lloraba mi madre y Gladis me tomaron de los brazos pero cuando estoy enojada la fuerza me sale muy natural, las empujé no fueron capaz conmigo, la tomé otra vez del cabello, cuando Juliana empezó a decirme que ella me separaría de Santiago, que él no estaría conmigo, sacó la mano me pegó en el rostro, pero  se la devolví el doble, rasguñándole parte del rostro, la tomé del cabello empecé arrastrarla por el camino ya imaginan sus gritos, mi madre llorando me suplicaba que la soltara y Gladis trataba de que la soltara, pero yo tenía que sacarme todas las que tenía, le arranqué dos mechones de cabello la solté, ella quedó tendida en el suelo, me miraba con miedo al igual que lo hacía Gladis, con la voz entre cortada por la rabia que tenía. 


—Diana: Te vuelves a meter conmigo y te juro que la próxima vez te arrancó todo el cabello y te saco los ojos.


—Mamá: Nana cálmate no vale la pena—me tomó de la mano—,entre cielo y tierra no hay nada oculto tarde o temprano todo se sabe.


Respiré profundo, limpie mis lágrimas, soy de las que llora cuando estoy enojada, me gire cuando Gladis dijo.

—Gladis: Pobre Santiago se metió con una loca, allá arriba hay un Dios que lo ve todo, tu pagarás lo malo que hiciste, la envidia que le tienes a Juliana, Santiago tarde o temprano se dará cuenta que Juliana es mejor que tu, una mujer que se deja tocar el cuerpo de cualquiera no vale la pena.

Me giré y las fulmine con la mirada, Juliana se levantó corrió a esconderse tras de su mamá, empecé a caminar hacia ellas mi madre trataba de jalarme, pero no pudo, literal empuje a Gladis está vez la tomé del brazo girándolo hacia su espalda ejerciendo una gran fuerza, empezó a gritar una tras otra lágrima rodaban por su mejilla, siempre he tenido las uñas muy largas y cortan mucho, llevé una de mis manos a su rostro.

—Diana: Empieza hablar mentirosa, o te rompo el brazo— le hice presión y soltó un chillido—,habla o te arranco la piel de la cara con mis uñas, sabes que soy capaz— le grité —¡ QUE HABLES, MALDITA MENTIROSA!  


—Juliana: ¡Me romperás el brazo! ¡Diana por favor suéltame!—me suplicaba.


—Mamá: Diana cálmate hija, con estos gritos hasta tu papá y tu tío debieron escuchar, no deben tardar en bajar. 


—Gladis: Suéltala, eres una bestia, mejor, ojala y bajen, para que sepa León la clase de hija que tiene.


—Diana: Por fin estamos de acuerdo en algo —miré a Juliana, que seguía llorando—,que bajen para que mi tío Jesús sepa la joya de hija que tiene, y sabes niñita estúpida tu tienes más que perder que yo—Sonreí con sarcasmo—,yo conozco todos tus secretos, en cambio tú  de mi no sabes nada— Juliana abrió los ojos como platos, al igual que Gladis.


—Juliana: ¡Mi papá no! Tú no serias capaz Diana.


—Diana: Yo no soy como tú, una basura, tarde o temprano todo se descubre y terminaran por saber quien es la mala si tú o yo.


—Juliana: ¡Ya no más!  Me duele el brazo ¡yo lo inventé todo! 

Eso era lo que yo quería escuchar, la empujé calló de rodillas al suelo, me incliné tomé un puñado de tierra se lo metí en la boca, como es tan creída imaginaba sus gritos y sus lágrimas. 

—Diana: Eso es lo que te sale de la boca, pura basura, me entero  que volviste a inventar algo de mi y te juro que a la próxima te meto mierda de marrano en la boca, te arranco todo el cabello y te saco los ojos, no te metas conmigo, yo si tengo la consciencia tranquila, sé la mujer que soy y lo que valgo, no como tú, que tienes el alma negra y podrida. 


No dije nada más, me regresé a mi casa, Juliana se quedó llorando y Gladis no podía decir nada más, si lo hacia mi tío se enteraría de todo, tenía tanta rabia que pensaba decirle toda la verdad, si no lo hice fue porque sabía que para él sería un golpe muy duro y él para mi era como un padre, llegué a mi casa tire todo lo que se me atravesaba,  descargaba golpes en la pared con todas las fuerzas, me sangraban los dedos pero yo no sentía nada solo una profunda rabia, mi mamá trataba  de calmarme y le habló a la única persona que podía calmar mis peores demonios. 


Narra Santiago 💕 


No saben la impotencia  tan grande que sentí al escuchar la manera en la que Gladis trató a mi chatica, escuché todos los insultos y los gritos, porqué Diana no colgó, también escuché lo furiosa que estaba Diana, es la misma rabia que sentía yo, al escuchar todo lo que le decían, la manera en la que Juliana la culpó de todo, en momentos así es donde más me molesta esta maldita distancia, mi madre me observaba al ver la expresión de mi rostro, preocupada me preguntó que pasaba le puse el celular para que escuchara, hasta mi madre se molestó por la manera en la que Gladis estaba insultando a Nery y a Diana, también escuchó cuando Gladis dijo que haría todo por separarnos, hasta mi madre se molestó  por ese comentario, que porque tenía ella que intervenir en nuestra relación, que no lo hacen ellos que son mis padres, me sentía frustrado al escuchar todo y no poder hacer nada, ni siquiera defenderla,  todo por esta maldita distancia, escuchaba los gritos cada vez más lejos hasta que no escuche nada más, no sabía que estaba pasando, no tuve más remedio que colgar, quedarme con esta maldita incertidumbre, esperé unos minutos le volví a marcar pero nadie me respondió , a la media hora sonó mi celular me pareció extraño era Nery sentí un frío que me congeló imagine que algo le había pasado a Diana, no quería que le repitiera lo de la vez pasada cuando se desmayo, le respondí escuche su voz preocupada, me dijo que Diana estaba furiosa, que hablará con ella, que yo era la única persona que podía calmarla, la conozco, sé lo molesta que debe estar, escuché que Nery le habló ella seguía llorando, cuándo está enojada lo hace. 



Narra Diana 💕…… 


Mi madre me entregó mi celular Santi me estaba marcando, respondí aunque aún no podía hablar. 

—Santi: Mi vida, tienes que calmarte, no sabes como quisiera estar ahí contigo en este momento y poder abrazarte, no veo la hora que pasen estos dos días rápido y poder estar contigo.


—Diana: Escuchaste todo lo que me dijo, todo por culpa de Juliana que inventó todo, ahora Gladis se encargara de regar el rumor a toda la familia, a todo el mundo, la conozco, harán todo por dañar mi reputación—respiré profundo y solté un pequeño gruñido de impotencia.


—Santi: Mi vida, tú tienes la conciencia tranquila, sabes la mujer que eres y lo que vales, ella sola caerá con sus mentiras, déjala tarde o temprano quedar descubierta delante de todo el mundosabemos lo irresponsable que es, ella misma se dejar descubrir.

Hablamos mucho, como siempre el podía regresarme la tranquilidad, él es elúnico que puede apagar mis demonios, mi polo a tierra, cuando llegó la hora de llevar el almuerzo yo me adelante, Juliana lo más seguro está escondida como la rata que es, llegué primero con el almuerzo, a los minutos subió pero Gladis, le dio miedo mandar a la mocosa esa, subió ella para vigilar que yo no le contara nada a mi tío, mi padre salió almorzar se sentó mucho más arriba de donde estaba mi tío, me senté a su lado, mi papá solo me observaba.

—Papá: ¿Qué pasó Diana?  Ahora escuchamos unos gritos, ¿estabas llorando? 


—Diana: Gladis se agarró con mi madre y luego me insulto a mi, dijo que se encargaría que esta compañía se acabara.


—Papá: ¿Por qué?— me miró confundido.


—Diana: Juliana inventó un montón de cosas sobre mi— le conté todo lo que pasó, incluso todo lo qué Juliana hizo,la cara de sorpresa de mi padre.


—Papá: No le hagas caso, tú sabes quien eres, no entiendo porqué Gladis dice que te va separar de Santiago, esa si es boba, no lo hicimos nosotros que somos sus padres, no le digas nada a tu tío, será peor,  déjala que ella misma tarde o temprano se descubrirá sola.

Me dijo que él sabe quien es quien, que incluso ha visto a Juliana salir de un hotel con Camilo, que las ignorará que yo sabía que nada de eso que ellas dijeron era verdad, que las dejara, que no me desgastara en cosas que no valen la pena, que si yo tenía la conciencia tranquila con eso bastaba, la única qué estaba mal era Juliana y Gladis por taparle todo a ella, lo que mal empieza mal termina.  


 




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