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"¿Lu?"

El doctor me mira confundido aunque no es el único. Todos los presentes miran la escena frente a sus ojos, la señorita Sarita está en un estado alterado abrazándome fuertemente como si no quisiera que me fuera.

"Lo siento mucho mi niño, perdóname"

¿Qué le pasa?

"Ugh"

Ella me abraza todavía más fuerte dejándome sin la opción de respirar.

Ayuda.

El doctor es el primero en reaccionar y rápidamente se acerca a la señora Sarita.

"¡Querida sueltalo, no puede respirar!"

El intenta desesperadamente liberarme de su agarre pero ella se aferra más a mí y al mismo tiempo aumenta su alteración.

"¡NOO! ¡NO QUIERO!

La expresión en la cara del doctor es amarga, es su esposa por lo que intenta separarnos sin ser demasiado brusco con ella a pesar de su insistencia. Sin embargo sin éxito.

Mirando desesperadamente a los lados viendo como todos miran el espectáculo extraño el doctor mira hacia la directora llamando si atención.

"Nos llevaremos a este niño, así que porfavor haga los arreglos necesarios."

"Eh...ah, lo siento señor pero, es necesario hacer una cierta cantidad de papeleo para poder adoptar a un niño,por lo tanto no puedo-"

"Le daré un incentivo, así que porfavor hágalo rápido."

El doctor interrumpe las palabras de la directora.

Al principio sorprendida pero seguido de una pequeña sonrisa, la directora asiente al doctor.

"Sin embargo no será barato...señor."

Una mirada de infelicidad recorre al doctor sin embargo desiste de decir otra palabra y acepta a regañadientes debido a la situación actual.

"Entonces puede llevarse al niño a su hogar y darle una nueva vida."

Con una sonrisa elegante la directora dice, pero-

"¿¡?!"

¿Adopción? ¡No no no no no!
Si me llevan con ellos le quitaré la oportunidad a Fran de ser feliz con la señorita Sarita.

Cuando miro hacia Fran veo que su expresión es desgarradora, una mezcla se sorpresa, tristeza y...traición.

¡No!

Cuando intento liberarme desesperadamente del agarre de la señorita Sarita el doctor comienza a hablar.

"...Amor, vamos a llevarnos a Lu a casa otra vez."

"¿De...verdad?¿Mi niño va a regresar a su casa?"

"....Si..."

La mirada llorosa de la señorita Sarita mientras pregunta se ilumina y afloja el agarre para tomar mi mano y mirarme de frente.

Sus ojos rojos por las lágrimas me miran fijamente haciendo que tenga un extraño sentimiento.

Yo no soy ese Lu que buscan...mi nombre es Roulees.

Viendo su cara no puedo decir e insistir en qué no me adopten a mí y en su lugar a Fran,pero...

Oh no...

Intento hablar.

"Yo...no quiero irme solo...mi amigo...Fran-

"¿Que cosa?"

Cuando ella pregunta miro hacia Fran que está en la multitud que comienza a alejarse. El me mira fijamente.

"¿Podrían adoptarlo...a el también?"

Cuando señalo hacia Fran y la mirada de la Señorita Sarita se dirige a el, por primera vez hace otra expresión, una similar a la del doctor.

De su boca salen palabras que no quisiera escuchar.

"Lo siento...no podemos adoptarlo a el."

No..

Ellos solo vienen a adoptar un niño, y ese niño soy yo y no Fran.

"Porfavor..."

Apesar de mi insistencia ella no cambia su expresión y me da un abrazo.

No...

"Lo siento mucho Lu.."

Aprieto los dientes.

Yo no soy ese tal Lu...e incluso si lo fuera desearía que adoptarán a Fran también...

No puedo hacer nada, estoy en un lugar desconocido y si hiciera algo mal no se que tan severo será el castigo, solo me queda...aceptarlo.

Mientras miro hacia el suelo nuevamente toman mi mano.

"Vamos Lu, regresemos a casa."

"Espera...por favor."

Si no puedo hacer que adopten a Fran lo menos que puedo hacer es aceptar su enojo por haberlo traicionado, un golpe o los que sean son aceptables.

Camino hacia Fran quien me mira fijamente sin embargo no quiero mirarlo a los ojos, no merezco hacerlo.

Cuando miro sus pies firmemente plantados en el suelo frente a mi abro la boca.

"Fran yo...lo siento mucho, por mi culpa no podrás cumplir tu sueño...lamento ser un traidor."

"Rou...¿Que es un traidor?"

"Ah.."

Es verdad, por alguna razón los niños de este orfanato no conocen algunas palabras, supongo porque todos están en un estado de plebeyo.

"Es alguien que no destruye la confianza de los demás en el."

O al menos eso es lo que pienso.

Mientras miro al suelo escucho una pequeña risa.

¿Fran?

"No te preocupes por mí...Rou, siento un gran dolor en mi pecho-"

Aprieto más los puños.

"-Pero estoy feliz por ti, podrás ser feliz en una familia cálida."

¿Que?

Cuando miro a Fran noto su sonrisa.

No...

Esa sonrisa es muy dolorosa para mí, siempre has intentando alegrarme el día desde que llegué aquí a pesar de en ocasiones haber intentado alejarte de mi, y sin embargo tú aún así me seguiste hablando...fuiste el único.

Así que porfavor...

"No sonrías... así."

Siento las lágrimas formarse en mis ojos y la presión en mi pecho es similar a cuando mis hermanos me abandonaron a mí suerte con mi padre furioso que me golpeaba en esa fría habitación.

El dolor de una tristeza profunda.

Además.

"Estás enfermo..."

Desde el momento en que empezaste con tus síntomas no has ido a un médico y aún así sigues sonriendo de esa forma soportando muchas cosas incluído el dolor de la enfermedad.

Cuando las lágrimas salen de mis ojos siento los brazos de Fran envolviendome.

"Gracias por preocuparte por mi."

Fran también comienza a lloriquear mientras me da un abrazo.

"Por favor ven a visitarme..."

"Claro que sí."