47

Alam se ha pasado estos tres meses buscando a los mejores medicos y todos le han dado los mismos resultados.

Hemos viajado mucho y lo hemos hecho en familia, así que me puedo dar por satisfecha.

Él sigue negándose a perderme de nuevo y esta vez de manera permanente.

Me apena que no esté disfrutando de su tiempo a mi lado y siga empecinado en solucionar lo inevitable.

La última idea que está gestando pasa por pedirle ayuda a una bruja. Dice que está seguro de que ella puede conseguir que yo no me vaya al otro mundo.

Si tan solo comprendiese que yo ya lo he aceptado, que estoy resignada y he disfrutado mi tiempo junto a ellos durante los últimos meses.

Incluso he podido pasar tiempo con Ruby, la veo muy recuperada y solo deseo que pronto encuentre a su compañero.

Hoy viene la bruja a casa, y bueno esta será la última vez que le deje intentar algo. Si me quedan unos días o quizás una semana los quiero pasar aquí de la mejor forma posible.

Tranquila, con la gente que amo y en paz.

Estoy recostada en el sofá viendo dibujos animados junto a Chloe. Mientras ella observa los muñequitos moverse en la pantalla yo he terminado la última carta.

A Chloe le he escrito una carta, a mi madre otra y por supuesto también a Alam.

Mi madre y Alam pueden abrirla después de mi muerte. En cambio Chloe tendrá que esperar hasta cumplir los dieciocho años.

Mi tranquilidad se acaba cuando Alam llega a casa junto a una señora vestida de negro y un semblante serio.

Se acerca hasta mí y coge mis manos. Cierra los ojos y después de unos segundos los abre, me regala una sonrisa y suelta mis manos.

Se escucha como habla con Alam y le explica que ella no puede hacer nada por mí pero que si está dispuesto a sacrificar lo que más ama o lo que más le importa quizás las sombras puedan ayudarle.

Me levanto del sofá y niego con la cabeza. No sé de qué trata eso pero la palabra sombras no me gusta demasiado.

Si ya tiene que perderme a mí no quiero que pierda a nadie más.

Él parece ignorarme y accede a pactar con las sombras.

Llamo a mi madre y le pido que venga para quedarse con Chloe. No quiero que esté aquí si esas sombras deciden que el pago será ella.

Por ahí si que no voy a pasar.

Una vez que mi madre se ha llevado a mi niña fuera de la casa, la bruja saca un viejo libro e invoca a las sombras.

He pasado por muchas cosas aterradoras en mi vida pero ver como unas sombras negras descendían por la pared y se hacían corpóreas es lo más aterrador que mis ojos han podido llegar a ver.

Sus voces no parecían de este mundo, se ha acercado varias veces hasta mi posición, consiguiendo que mis vellos se pongan de punta.

Y para qué? para decirle a Alam que no me pueden curar, lo máximo que le pueden dar es que después de mi muerte me reencarne en una niña recien nacida y cuando cumpla de nuevo los dieciocho años comience a recordar mi vida pasada.

Le pido o más bien le suplico que no acepte, el destino es así y al menos hemos llegado a conocernos y hemos conseguido lo mejor tener a lo mejor de nuestras vidas que no es otra que nuestra pequeña Chloé.

Cómo suponía no me escucha y acepta. A cambio esos seres translúcidos le dicen que esta vez no le van a pedir la vida de nadie a cambio del trato, pero sí lo despojaran de algo muy importante en su vida.

No sé si esa parte la he entendido bien, no le han dicho que es lo que le van a quitar, quizás lo dejen sin nada, sumido en la pobreza y entonces como podrá criar a nuestra pequeña?

Tampoco sé como lo llevarán a cabo. Pero poco puedo hacer ya, él ha aceptado y asumido las consecuencias de sus actos.

.............

Me siento muy cansada, hace dos días que me encuentro en cama, mamá hace una semana que está aquí y no va a volver al pueblo hasta... hasta que mi vida llegue a su fin.

Aunque estoy preparada para ello no puedo sentir otra cosa que no sea miedo.

Mi madre acaba de conectarme algo, para aliviar el dolor, se que cuando el dolor sea más fuerte y mi final este cerca ella me subirá la dosis y entonces me dormiré.

Siento que eso no va a tardar en llegar, les he pedido a todos los que amo que vengan ya que necesito despedirme y viajar tranquila al otro lado.

Poco a poco me despido de todos. Hay lágrimas y lamentos en cada una de sus palabras. A cada uno le dedico una sonrisa y un buen deseo.

Creo que ya ha llegado el momento, solo necesito hacer una cosa más, quiero que mi madre coloque a Chloe a mi lado. Necesito tener a mi pequeña cerca para que llene de paz y felicidad mis últimos momentos.

Acarició su rostro y le pido que crezca sana y feliz, mi madre no puede dejar de llorar.

Siento que tenga que pasar por esto, pero mi destino estaba escrito desde mi nacimiento y no creo que hubiese nada ni nadie que lo hubiese podido cambiar.

Espero a Alam todo lo que puedo pero este no llega, el dolor es demasiado fuerte para mí y necesito que pare. Por lo que le digo a mi madre que ya ha llegado la hora.

No estoy enfadada con él, sabía que estoy podría pasar por eso le escribí la carta .

El no ha aceptado mi muerte, así que supongo que no necesita verme así en mi final.

Acerco a mi pecho a Chloe y cierro los ojos, noto un beso sobre mi frente y en la lejanía escucho unas las palabras.

"A veces, el amor también implica aprender a soltar. Te dejo ir, pero jamás olvidaré lo que

significaste

en mi vida.

Que el camino se levante a tu encuentro, que el viento esté siempre a tu espalda. Que el sol brille cálido sobre tu rostro y la lluvia caiga suave sobre tus campos. Y hasta que nos volvamos a encontrar, que tú dios te sostenga en el hueco de su mano".

Una lágrima se escapa de mis ojos, la oscuridad y la calma me envuelven. Y mi último pensamiento se lo dedicó a él.

" Hasta que nos volvamos a encontrar"