Hola, soy Alisson. Sé que es una presentación muy mala, pero es que no se me da muy bien esto, ni si quiera sé cómo empezar. Bueno, tengo 19 años, vivo en Boca Ratón (Florida) y mi madre falleció hace dos veranos. Sé que escuchar lo último no es agradable pero así es ahora mismo.
Me encuentro en mi habitación llorando como siempre, por culpa de mi hermano. Tengo las rodillas pegadas al pecho y mi cabeza entre ellas. Mis manos están temblando sin control y apenas puedo respirar bien.
Todo esto pasó por culpa de mi hermano Alex, él estaba teniendo uno de sus ataques de ira, pero esta vez fue peor.
Cuando vi que todo se calmó, y mi hermano no estrellaba la vajilla contra las paredes, salí a verlo. Estaba tumbado en el suelo llorando, golpeándose y maldiciendo en voz baja por lo que había hecho.
-Hey, tranquilo estoy aquí --dije abrazándolo.--
-¿Porque siempre la tengo que liar? --dice con la voz entrecortada.--
-No es tu culpa. ¿Por qué no pides ayuda?. Yo no cuento porque ya lo sé y no te puedo ayudar como tu lo necesitas ya no sé qué hacer Alex. Lo que quiero decir es que sería buena idea ir a otro médico, ¿a un psicólogo?.
-Sería buena idea, pero no quiero que pase lo mismo que la otra vez --dice secándose las lágrimas.--
*FLASHBACK*
-¡NO! ¡Déjame, no te acerques más! --dice a punto de tirarse --
-A ver Alex tranquilo, ¿mírame si? Todo estará bien no te preocupes, yo te ayudaré y tu hermana te apoya muchísimo en esto no lo tires todo por la borda. --dijo el psicólogo tratando de calmarlo.--
-Alex por favor --digo sollozando--
*FIN DEL FLASHBACK*
Subí a ver a mi hermano para ver cómo estaba ya que tampoco me gusta dejarlo mucho tiempo solo, porque una vez intentó suicidarse.
-Yo..... lo siento.
-No te preocupes todo irá bien. --digo abrazándolo--
Cuando mi padre volvió ya habíamos recogido todo, y mi hermano y yo nos pusimos a ver una serie.
Todo fue medianamente bien, lo convencí para que fuera a un psicólogo y otros médicos nuevos para que le ayudaran con terapia. Todo fue genial la verdad, yo veía que en los ojos de mi hermano había algo de esperanza al saber que había cura para lo que tenía.
Después de unos meses mi hermano terminó las clases y pasamos un verano inolvidable, pero como siempre extrañando a nuestra madre.
Y este es un trocito de la caótica vida de Alisson Benson Cooper.