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~ ELETTRA ~

Nunca hubiera imaginado qué tendría que soltar la noticia de esa forma, pero ahora que mi vientre estaba mucho más abultado en algún momento se comenzarán a dar cuenta, pero la reacción de Santino había sido algo que no me esperaba.

—¿Has perdido la cabeza? ¿Cómo se te ocurre hacernos esto? —El mayor me gritó con fuerza, no sabía cómo hacer para que él dejara de gritarme—. Lo único que le has dado a esta familia, son problemas, una mancha mediática y gastos innecesarios… ¡Eres una vergüenza! 

—Y tú eres un idiota que terminó siendo lo siempre criticaste de nuestro padre… ¡No puedo creer que después de tantos años te hayas convertido en esto! —Me levanté con fuerza, no sabía qué más podía decirle sabiendo que mi hermano había pasado, por tanto—. Al menos mis escándalos no han sido por adulterio… 

—Elettra —Nuestra madre finalmente intervino, pero no parecía estar contenta—, basta los dos, parecen un par de niños… Ninguno de los dos pueden hablarse de esa manera, son hermanos…

—¿El hermano mío? No parece, solo está criticando, cree que tiene la vida perfecta y esperaba que todos le laman los huevos —Solté con fuerza tanto que me hizo sentir un dolor en mi vientre—, si esperas que me sienta miserable con mi decisión, entonces estar equivocado… 

—¡No lo tendrás! —Santino creía tener el poder de siempre hacerme sufrir lo que él dijera. 

—¿Me obligaras? —Crucé mis brazos, ya estaba cansada de sus amenazas—. Estás equivocado si crees que voy a dejar que decidas por mi… Tú no eres perfecto, estás lejos de serlo… 

—Ya no quiero que sigas manchando nuestro nombre —Sentenció el hombre con fuerza, dejándome sin aliento—, ¿dónde está el padre? ¿Quién es? 

—Ya basta Santino, se acabó… Tu hermana es una adulta, ya sabe lo que hace, no está para que le sigas recriminando cosas que ya no tiene sentido… Elettra tendrá el bebé y es una decisión que ella tomó. —Por fin mi madre había hablado, volví a sentarme pensando que iba a desmayarme—. ¿Qué es lo que te pasa? ¿Por qué ahora estás de esta forma? Peleaste tanto con tu padre gracias a este mismo comportamiento… Pero ahora eres igual a él. 

—Madre no se trata de eso, se trata de que Elettra quiere hacer lo que se le da la gana siempre, no tiene control… —Santino no me había vuelto a mirar, obviamente que me dolía lo que mi hermano estaba diciendo sobre mí, pero de qué me servía pelear para explicar lo que había pasado si él solamente iba a mirar el lado negativo—. No piensa en nuestra familia…

—De la misma forma en la que tú pensaste en nosotros cuando casi nos llevas a la bancarrota —Aunque eso era algo que no solíamos hablar, ya que había sido un momento oscuro para todos. Pero había salido de mi boca sin aviso, pero tampoco me había arrepentido de aquello, era cierto. Él había sido el culpable de todo eso, había decidido que lo mejor era enfocarse en su familia antes de prestarle atención a la enferma que les daba de comer. 

—Eso fue diferente, yo estaba enfermo, no embarazado —Santino finalmente volvió a mirarme, veía como su rostro se había puesto rojo del enojo, pero ahora no me importaba lo que él pensaba—. Te voy a dejar sin dinero a ver si así logras comportarte… 

—No puedes, he trabajado duro por el dinero que tengo, tú no tienes derecho alguno a quitarme lo que tengo —Volví a levantarme para encararlo, estaba hasta de no hacer las cosas que quería por el qué dirán—. Soy tu familia quieras o no, no es el fin del mundo, es tu sobrino, y lo vas a querer, así como yo quiero a tus hijos… 

—Elettra —Santino suavizó su semblante un poco, llevo sus manos hasta mis brazos—, no quiero que la prensa te vuelva a querer comer viva, gastamos mucho dinero en demandas, fue un tiempo horrible para todos, hasta a Bruno acosaron en su escuela, ahora tenemos a más niños en la familia que no sabrán gestionar todo esto —Entendía que su preocupación era por sus hijos, pero ahora no había mucho que hacer. 

—Estaba pensando dar una entrevista, conceder una exclusiva para que nadie más pueda hablar… —Aunque eso sería hablar de mi vida privada, ayudaría a que los rumores cesaran un poco, al menos por un tiempo, tenía que darles de mi boca para que los portales de chismes, pero eso ayudaría a que tengan algo para hablar que no sean mentiras—. Solo quería hablar con la familia primero, antes de que fuera más tarde. 

—Bueno, ya ahora lo sabremos, hablamos con el publicista para que hagan eso lo más pronto posible —Aunque ya no parecía estar enojado, yo me sentía mal, él no había aceptado que actuó mal, por eso antes de que se fuera nuestra madre lo detuvo y lo miró de mala manera—. Lo siento Elettra, actué bajo el enojo y es algo que debo cambiar… No tengo justificación.

Tampoco podía aceptar sus disculpas, así como así, esperaría un tiempo para que las cosas estuvieran tranquilas nuevamente, no era algo que pasaría de la noche a la mañana. Asentí para que se quedara tranquilo y poder irme a trabajar en lo que hablamos. Aunque no sería una tarea fácil, cuando estuvimos buscando qué revista podría ser la indicada, llegaron un par de ofertas, aunque no me hacía falta el dinero, si ellos querían información tendrían que pagar para eso.