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~ ELETTRA ~

Había llegado el día de hacer la celebración de revelación, como quería, teníamos a poco invitados, a los familiares y amigos más cercanos, los Kirkman habían viajado, Henry y sus hermanos junto a sus esposas, además de los padres de estos. Estaba contenta con tenerles en casa, siempre me había gustado ese tipo de celebraciones, no necesitábamos a nadie más.

—Ya todo está listo —Marc había estado ayudando algunas cosas mientras que terminaba de hacer unas cosas del trabajo, sería de las últimas cosas grandes que tendría que hacer para la empresa, ya que me tomaría una licencia hasta que naciera el bebé y luego la de maternidad, comenzaba a ser mucho más complicado para mi caminar y moverme, ya que el bebé estaba enorme, haciendo que el peso se me hiciera complicado de mantenerme de pie, así que tendría que dejar de asistir a la oficina y ahora solo tendría tareas menores—, me ducharé y tenemos que bajar, pronto llegaran los invitados…

Marc no tenía ni idea de lo que yo había planeado para él, había llegado su moto y su hija, solo que Goldie estaba en un hotel desde anoche, me habría encantado que ya nos estuviera acompañando, pero quería que fuera una sorpresa para Marc en medio de la celebración, ya estaba lista solo para bajar, nos habíamos quedado en casa de mi madre, ya que era el lugar más grande donde podríamos alojar a todos los invitados, además de que mi madre había estado triste gracias a que todos sus hijos habían decidido irse de la casa.

—¿Cómo me veo? —Marc había salido con una camisa azul, una de las condiciones de la invitación era que tenían que vestirse de azul o rosa así votaban por lo que querían que fuera el bebé, la única que sabía era mi madre, así que ella había organizado todo para ese día. Me levanté del escritorio para acercarme a él, se había vuelto a quitar la barba y se veía tan bien.

—Como siempre, muy guapo… —Yo, en cambio, había decidido vestirme de rosa, siempre había querido una niña, pero tampoco era algo que me preocupara, su sexo era algo que pasaría desapercibido, yo solo pedía que estuviera bien—. Ya creo que llegaron los Kirkman, tenemos que bajar…

Santino y Nicolás no estuvieron del todo contentos con que invitara a los Kirkman, pero ya era un poco tarde como para seguir con esa tonta enemistad, nuestras familias siempre habían sido unidas y nos apoyaron durante los momentos oscuros, así que yo quería seguirles teniendo cerca. La fiesta comenzó cuando todos los invitaron llegaron, como siempre Sofía era el alma de la fiesta, ella había organizado un par de juegos, Marc participaba en los que podía, mientras que yo me había sentado a un lado para verlos, no quería decirle a nadie que me sentía mal, para no arruinar la fiesta, pero cuando Marc me veía, se notaba preocupado por mí y no quería dejarme ni un segundo.

Aún faltaban 3 semanas para el nacimiento, pero la doctora había dicho que teníamos que cuidarnos siempre y que si sentía algo diferente teníamos que correr a la clínica, por el momento todo había sido normal, pero había días donde sentía el vientre demasiado tenso. Y hoy era uno de esos días, tal vez era el estrés que había tenido en el trabajo o que se acercaba la fecha del nacimiento del pequeño.

—Bien, es hora de anunciar el sexo del pequeño —Nos levantamos para ir al centro donde habíamos puesto una mesa, aun no sabía cómo íbamos a anunciarlo, hasta para nosotros era una sorpresa también—. Pero, primero Elettra tiene unas palabras primero… —Tomé el micrófono, quería darle las sorpresas a Marc de una vez, sabía lo feliz que se pondría por lo que le tenía.

—Gracias por asistir esta tarde, la verdad es que tenía muchas ganas de que todos estuvieran acá, aunque acá faltó alguien… Goldie es la hija de Marc y no pudo acompañarnos por exámenes en la universidad, pero creo que estará pronto con su madre y su hermano… —Marc había estado un poco triste esos días por no poder ver a su hija ese día tan especial, pero tampoco quería arruinar la sorpresa que tenía para él—. Pero me gustaría darle un pequeño regalo a Marc —Lo miré con una sonrisa—, amore mio, yo sé que no solo extrañas tu vida en Berna, así que he decidido hacer algo que podría gustarte… Pero para verlo tendremos que ir a la parte frontal de la casa…

El hombre no entendía aun que tenía para él, la única persona que sabía sobre eso era mi madre, quien había estado guardando la moto en casa, pero lo que nadie más se esperaba es que Goldie iba a aparecer manejando la moto. Cuando estuvimos fuera, fue la señal para que Goldie apareciera subida en esa bestia, aunque no era la misma que tenía él en Berna, podría modificarla lo que quisiera ya que era suya.

—¿Pensaste que no vendría? —dijo la pequeña rubia cuando se quitó el casco, Marc corrió a los brazos de su hija para abrazarla con fuerza.

—¿Cuándo llegaste? Pensé que no podría venir —Me acerqué a ellos, Goldie también me abrazó con fuerza.

—Elettra me consiguió un vuelo en cuanto terminé mi examen, además de que pude adelantarlos para ayer —Los invitados volvieron a entrar a la casa—. ¿Te gustó la moto? —El finalmente la vio, como que no había entendido de que era un regalo para él.