Mine || 4#

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~ NARRATIVO ~

 

Aunque las semanas pasaran, sentía que las cosas que no tenían mejoría, yo quería dar lo mejor de mi para mi familia, Diora era una bebé que no entendía nada de las cosas que estaban pasando a su alrededor, pero se veía bastante feliz, aunque sus padres parecían no estar pasando por lo mismo. Marc se sentía frustrado ya que estaba pasando la mayor parte de su día en casa con su hija, aquello no era algo que le molestaba, sino que ya no parecían una pareja, su prometida llegaba a casa cansada, no le daba la suficiente importancia ni a su hija. Cosa que evidentemente le estaba doliendo al hombre, solo que Elettra tampoco lo estaba notando, no era alguien que viera esas cosas al menos que se lo dijeran.

 

—Tengo todo listo para la boda —Loretta había aparecido en la oficina de su hija para hablarle de la boda que era en un par de semanas, ya todo estaba listo y aunque el trabajo estaba bastante pesado, eso no quitaba el hecho de que no tuviera un poco de tiempo para la boda. Pero Elettra estaba pensando en cancelar todo el asunto o al menos atrasarlo para poder hablarlo Marc, saber lo que estaba pasando. Tampoco podían casarse cuando los últimos meses de su relación estaban tan malos—. Todo va a estar perfecto…

 

—Mamma, creo que vamos a tener que retrasar la fecha de la boda, no estamos teniendo un buen momento con Marc, así que quiero arreglar las cosas primero con Marc, antes de que las cosas terminen peor —Elettra tenía la mirada fija en la pantalla de su pc, no sabía que lo que haría, pero necesitaba hacerlo de una vez antes de que todo se fuera a la mujer—. En realidad, necesito que me hagas un favor, consígueme una reunión con el dueño del viñedo donde haríamos la boda, necesito hablar con él, pero ahora yo no puedo…

 

—Elettra, ¿qué es lo que pasa? No me cuentas nada de lo que está pensado en tu vida —La mujer estaba enojada por no tener control de nada, aunque se había alegrado saber que podría ayudar con la organización de la boda, ahora sentía que no conocía a su hija.

 

—Mamma, no tiene que saber todo lo que está pasando en mi vida, si quieres ayudarme, entonces hazlo con lo que te pido, sino yo lo resolveré, pero siempre han querido controlar las cosas que hago, estoy harta de que no pueda hacer las cosas que quiera —Soltó Elettra, siempre se había sentido como un pájaro en una jaula, su familia había estado siempre detrás de todas las cosas que estaba haciendo—. Lo siento, pero siento que no puedo hacer nada sin que todo el mundo se tenga que enterar… Santino y Nicolás apenas te dicen las cosas que harán, pero conmigo todos tienen que saber las cosas que hago, me cansé…

 

Elettra, había estado bajo demasiado estrés esos días, eso la había llevado a estar lejos de su familia, quienes deberían ser lo más importante, no entendía como había logrado levantarle la voz a su madre, la amaba y no quería hacerla sentir mal, pero era momento de que estuviera un poco más de control de su vida, no solo de una pequeña parte, sino completa, no le importaba no tener lujos si podía tener un poco de tranquilidad.

 

—Tengo que ir a casa —Ella se levantó tomando sus cosas, a Loretta no le había dado tiempo para hablar, así que cuando vio que su hija estaba por irse, tuvo miedo de estar perdiendo nuevamente a su hija, no quería echarle la culpa a Marc, así como jamás le había echado la culpa a sus nueras, Sofía y Alessa eran buenas personas, pero era cierto que Santino y Nicolás habían puesto un límite con sus relaciones y su familia. Así que su madre no podía opinar, en cambio con la vida de Elettra todos querían decirle que tenía que hacer. Sobre todo, sus hermanos—. Luego hablaremos mamma, tengo cosas que hacer…

 

—Hija, no quiero que hagas algo de lo que luego te arrepientas —dijo la mujer tomando una de las manos de su hija, era la pequeña de todos y era la única mujer, así que no quería que ella fuera a cometer errores de los que podría tener consecuencias graves.

 

—Mi familia también es importante, yo debo hacerme responsable de ella —Justo en ese momento se había dado cuenta de las cosas que había estado haciendo mal, su trabajo era importante, sí, pero Marc tenía algo en Berna que dejó por ella, era momento de que Elettra abandonara un poco de lo que tenía para también hacerle feliz a su prometido—. Amo a Marc y le estoy perdiendo solo por querer vivir como siempre he vivido, tengo el suficiente dinero como para vivir bien algunos años más, pero estoy desperdiciando los primeros meses de mi hija, no es justo para ella.

 

Luego de eso la mujer fue directo hasta la oficina de su hermano, no le importó para nada que estuviera ocupado, no era la primera vez que me interrumpía. Santino estaba en medio de una llamada importante, mientras que Sofía estaba sentada a un lado. Su hermano la vio y le pidió un par de minutos, tampoco podía estar enojado cuando podía ser algo del trabajo.

 

—Bien, dime que necesitas Elettra… —Santino ni siquiera se atrevió a mirarla, ya que luego de terminar con la llamada regresó la mirada hasta la pantalla de su computador, no quería darle mucha importancia a lo que tuviera que decirle su hermana.

 




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