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CAPITULO 2

"No es casualidad cuando la vida insiste en cruzarte con alguien. Tal vez hay algo por decir, por aprender, sentir o por vivir"

Sebastián

El miércoles llegó demasiado pronto, estaba más nervioso de lo normal. Mi corazón se sentía muy acelerado y las palmas de las manos me sudaban

- ¡Ya ridículo! Haz hecho esto por más de diez veces--Abigail se burlaba de mi estado--¿por qué estás tan inquieto?

-No lo sé, probablemente no sea por los ensayos-- la mire- no te lo había dicho, pero ayer por la noche Hanna aceptó salir conmigo-- a Hanna la conocí el diciembre pasado, de hecho, me la presentó mi amigo Ricardo. Desde el inicio me gustó, es una chica muy bonita y desde hace casi un mes le había pedido salir, pero por una u otra razón no podíamos quedar. Hasta que, ayer en la noche me pidió que la acompañará por un café y obvio no dude en decirle que si

-Vaya, por fin dejaras de llorar por los rincones--sonreí. Ella siempre disfrutaba haciéndome burla, le encantaba meterse conmigo. La verdad no me ofende que lo haga porque sé que lo hace de broma, además ella siempre está conmigo, nos queremos demasiado, me aconseja y me apoya en todo

Es una de las pocas personas que me conocen de verdad, la mayoría de la gente piensa que soy un cabronazo, que nada me importa y que nada me lastima. Esa es la fachada que muestro. Nunca me ha gustado que me vean débil porque se pueden aprovechar de ello. Aunque tampoco me comporto como un hijo de puta, simplemente en muchas ocasiones no demuestro mis verdaderas emociones

Con Biga no me siento así, de hecho, siempre me impulsa a ser yo, a hacer lo que me gusta y seguir mis sueños. Me ayuda a cerrar oídos a los comentarios que, en vez de sumar, resten

Su personalidad es muy rara, porque puede verse la chica más ruda e insensible del mundo, pero cuando la conoces bien, puedes darte cuenta que ella daría todo por las personas que más quiere. No solo es linda, si no, también es muy divertida, amigable, inteligente y muy fuerte. Siempre defiende todo lo que cree correcto, pero sin ofender a los demás, trata de ser respetuosa, pero cuando se enoja suele poner a las personas en su lugar de una manera muy fría

Su filosofía de vida es la que más me gusta "cada quien con su cola puede hacer lo que quiera", (a veces suele decir malas palabras, pero en la actualidad ¿quién no lo hace?) o su típico "que le den a lo que la gente piense".

Al inicio llegué a pensar que me gustaba, pero después me di cuenta que lo que yo sentía por ella era admiración, claro que la quiero muchísimo pero siempre será cariño de hermanos.

-No lloraba. Solo me preguntaba ¿por qué no aceptaba salir conmigo? O sea, soy guapo- no es que sea un egocéntrico, pero en una ocasión escuche a dos chicas hablar de lo que eran las características masculinas para considerar a un chico atractivo y sinceramente creo que si tengo una que otra.

Soy alto, mi cabello es castaño, mis ojos son grandes y de color verde, al sonreír se me forman pequeños hoyuelos en las mejillas y mi cuerpo lo mantengo en forma haciendo deporte

- ¿Crees que soy buena persona? Quizá no lo soy y por ello no aceptaba mis invitaciones--me miro entrecerrados los ojos

-Sebastián no, no hablaremos de ello porque ya te lo he dicho miles de veces--ella siempre me regaña cuando me auto lastimó con esas preguntas y aunque siempre logra hacerme sentir bien, a veces el pasado influye más de lo que debería en mi presente-- si no fueras buena persona no tendrías el privilegio de hablarme—comento con burla, tratando de restarle importancia al asunto y también haciéndome reír

-Tiene mucha razón gran "Diosa del Olimpo" - le dije sonriendo sarcásticamente. Ella me devolvió la sonrisa

- ¡Ya idiota!, vete de aquí o volverás a llegar tarde--empezó a empujarme ligeramente fuera de su casa--y no pienso pasar otra semana pasando insomnio estando aquí sola- aunque no lo dijera abiertamente a ella le encantan nuestras reuniones

- ¡Ok mamá! - me burlé- no vendré en la noche porque iré con Hanna, pero nos vemos mañana. Deséame suerte--volteé a mirarla. Se acerco a mí, me tomó de los hombros, me miró directo a los ojos y me dijo firme

-No lo arruines. Pero aún más importante, no permitas que te arruinen--me sonrió y despeinó mi cabello- suerte matador

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Llegué con quince minutos de anticipación, algo que pude notar Omar agradeció

Me acerque a Vanessa que ya había llegado, solo esperábamos a Alexander para comenzar

-Hola Vane- ella y yo habíamos tenido la oportunidad de trabajar juntos antes y nos llevábamos bien, suponía que no tendría ningún problema y sería más fácil grabar juntos--¿Cómo estás?

-Hola Sebi- nos dimos un beso en la mejilla- estoy nerviosa ¿y tú?

- Estoy tranquilo--y como si la vida no estuviera de acuerdo conmigo, a mi izquierda, Omar se acercaba a nosotros con las dinámicas de hoy en sus manos y junto a él venía mi compañero- olvídalo, ahora me estoy cagando de nervios--reímos por mi comentario

-Hola chicos--saludo Alex. Nosotros le sonreímos y contestamos su saludo

- ¿Están listos? - Omar nos mira a los tres. Ellos sonríen en aprobación y yo solo puedo limpiarme el sudor de las manos en los muslos- Tranquilo Sebastián, lo harás increíble. Confía en ti-

-Lo sé, ya sé me pasará--

-Tranquilo, todo saldrá bien—dijo Alexander, regalándome una sonrisa. Miré sus ojos y sonreí, él tenía razón. Todo sería genial