Moonlight Dance (pausada)

13- Serbal

Le teníamos que contar todo lo que sabíamos a Stefano, tarde o temprano se iba a enterar, mejor ahora que estábamos a tiempo.

Aun estábamos todos asombrados sobre lo que había pasado, Stefano no dejaba de ver a mi mamá y a Valeria. No podía creer que ellas hicieran magia y que hayan reparado todo en solo segundos.

Esperamos que todos nos calmáramos, especialmente yo, antes de decirle todo lo que sabíamos y lo que iba a pasar el viernes.

-O sea que son brujas. Gwen es también una ninfa. Y ustedes hace bastante que saben que soy hombre lobo, pero no dijeron nada.- Stefano estaba aturdido.

-Sí, lo sabemos porque vimos tu aura.- Respondió Brenda.

-El punto acá es que el viernes pasan varias cosas, y tenemos que idear un plan para que nada se salga de control.- Intervino Derek.

-O evitar que alguien muera.- Dije en voz baja, pero todos me habían escuchado. Las marcas de mi mano se extendieron un poco más arriba de mi codo.

El viernes había una Súper Luna, en palabras simples así se le dice. Era una luna llena de energía, normalmente se utiliza para hacer rituales y cosas por el estilo. Esa luna íbamos a usar para unirnos a nuestro aquelarre. A nosotras, las brujas, nos da más poder y más fuerza, pero a los hombres lobos, como a Derek y a Stefano, los altera; también los hace más fuertes, pero también les nubla un poco el juicio y pueden perder el control.

El problema no era en sí que pasarían con nuestros poderes, sino que ese mismo día todos debíamos estar en el campo de Lacrosse, era el primer partido de la temporada escolar. Nadie podía faltar.

Empezaban los torneos de inter escolares en los que siempre participábamos, y en su mayoría, ganábamos la final.

No podíamos faltar, ninguno.

Stefano era Co-capitán de su equipo, faltar podía perjudicar su puesto en los partidos, e incluso en el equipo.

Yo era la capitana de las animadoras y Gwen la Co-capitana, faltar significaría lo mismo; poner en juego nuestro puesto en el equipo de animadoras.

Todos acá buscábamos una beca universitaria por deporte, eso quiere decir que nos cubre el ochenta y cinco de los estudios universitarios, era mucho. Más si todos aspirábamos a grandes universidades.

Faltar no era una opción.

-¿A qué hora termina el partido? Capaz hay tiempo de hacer todo sin que nada malo pase.- Dijo Derek. Habíamos tratado de que nuestros padres entiendan la importancia de no faltar, cuando mencionamos las universidades entendieron.

-Inicia a las siete de la tarde y termina casi a las diez de la noche. Recordemos que la Súper Luna hace efecto todo el día, incluso cuando no está.- Respondió Nora. Eso incluso sonaba pero.

-Y si le damos una mariposa a Stefano y a Derek.- Nadie entendía lo que dijo Gwen.- A ver las mariposas, supuestamente, controlan nuestra energía. ¿Y si le damos más fuerza a las mariposas y le damos una a ellos, para controlarnos solo por ese día? Podría retenernos solo por esa noche, luego cada uno se va. Nosotras nos vamos a donde tengamos que ir para el ritual, y ellos se van a donde se tengan que ir para esconderse de la luna.- No era mala la idea.- Así nadie sale herido, ni nada sale mal.

-No es mala idea. Hacer esas mariposas solo tarda un par de minutos, y no es muy difícil adaptarlas para controlar a un hombre lobo.- Dijo Valeria.

-La piedra de luna, eso podemos darles.- Dijo mamá.

-¿Qué es eso?- Pregunto Stefano.

-Es una piedra que las brujas crearon hace años para que nosotros los hombres lobos no nos transformemos en todas las lunas llenas, con los años aprendimos a hacerlo sin las piedras.- Respondió Derek.- Además de que era una forma de que las brujas controlen a los hombres lobos.- Dijo bromeando.

-En casa de brujas, blasfemias nos son aceptadas.- Amenazo mamá. Yo solo me reí.

El plan era simple y sencillo. Nuestras mamás iban a darle más fuerza a nuestras mariposas y a crear dos más para Stefano y Derek, como ellos iban a ir al partido no había mucho de qué preocuparse.

Luego del partido Stefano y Derek se irían a refugiar de la luna. Con las chicas nos iríamos al bosque, haríamos el ritual y todo resuelto. Pero todos sabíamos que igual podía fallar, que haríamos en ese momento, no sé.

 

Sentía dolor en mi cuerpo, como si me hubieran atropellado. Las cicatrices dolían demasiado.

Prepare todo para irme a la escuela, y para que no me vieran los brazos y me hicieran preguntas me puse la camisa de mangas largas y el sweter, hacia frio asique me serviría.

-El desayuno está servido, y te recomiendo que lo ingieras si quieres tener fuerza para el reto del día. Y ese té te ayudara con tu dolor de cabeza.- Dijo luego de darme un beso en la frente.

-Perdón por lo de ayer. Por todo.- Dije apenada, no dormí muy bien por pensar en todo.

-Las brujas cuando pasamos por esta transición nos volvemos inestables de forma emocional, solemos decir todo lo que pensamos. A veces de forma brusca. Pero no estoy enojada ni nada por el estilo.- Acaricio mi mano en forma de paz, para que sienta que no estaba enojada conmigo ni nada por el estilo.



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En el texto hay: fantasia, juvenil, romance

Editado: 07.08.2020

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