19- Solo Recuerda

Los sueños se empezaron a volver cada vez más extraños. A medida que pasaba el tiempo los sueños se hacían más largos, con más cosas.

Hace dos noches soñé con un día de campo en esa misma casa. Había una niña de unos cuatro años con un vestido blanco y una corona de flores. Había muchas personas a su alrededor, como si fuera su familia; pero nadie tenía rostro.

-El cielo era celeste y el sol era muy brillante, pero de repente se puso todo nublado y frio.- Le contaba a Derek, Bella y Stef.- Cuando veo atrás mío aprecio alguien, tampoco tenía rostro. Salía del Impala. Y gritaba “¿Hicieron una fiesta y no me invitaron?”, pero no parecía molesto, sino lo dijo de forma burlona. Por la forma en la que todos reaccionaron a su llegada nadie lo quería ahí. Luego todo se volvió negro, no había nadie a mí alrededor, solo la niña que estaba cerca del lado, seguía jugando como si viviera en su propio mundo, como si no escuchara nada. En la casa había un par de personas, discutiendo. En ningún momento pude entrar a la casa como en otros sueños, asique me quede cerca de la niña, cuando veo que se para y corre hacia el bosque.-

-¿Alguien la siguió o fue sola?- Me interrumpió Bella.

-No lo recuerdo mucho, solo la seguía yo, pero no veía a nadie.- No recordaba si alguien más la seguía, mire detrás mío para ver si alguien venia pero no había nadie, nadie que yo no pueda ver.- La seguí y luego vi que se acercaba al señor que bajo del auto, parecía conocerlo porque le dijo tío. Ella lo abraza y le pregunta porque no fue a la fiesta, que lo extrañaba. Luego en un abrir y cerrar de ojos ellos desaparecen, no estaba por ningún lado hasta que la niña grita con todas sus fuerzas dejándome sorda.

>> Corrí por donde creí que venía el grito y ahí vi que alguien más corría al lado mío. Ella estaba sangrando, todo su vestido blanco estaba lleno de sangre, pero no sabía de donde provenía; hasta que me toco en el costado de la cadera, y la sangre también salía de mi costado. Empecé a sentir el mismo dolor que ella sentía, los seguí y uno de los chicos que corrió hacia ella grito “La mordieron. Alguien la mordió”, cuando me veo tenía una mordida en el costado que me dolía.-

-¿Algo más pasó? ¿Todo el tiempo estaban sin rostro o en algún momento aparecieron sus rostros?- Pregunto Derek.

-Me desperté, después de que dijeran que mordieron a la niña me desperté gritando.- Mamá no estaba en casa, ese día había salido con mi tía, solo estaba con Stef. El los llamó.- En ningún momento tuvieron rostro, pero no era difícil deducir sus emociones, o expresiones.

-¿Cuándo te levantaste tuviste alguna marca o nada?- pregunto Bella

-Nada, pero si sentí que me dolía.-

Nunca supimos que significaba o que era. Pero los sueños no eran normales. Lobos, bosques, niñas, mordeduras, gente sin rostro, esas cosas no eran normales. Llegue a la conclusión de que era algo más y cada vez que lo soñaba trataba de buscar la mayor información posible. Derek y Stefano hicieron un tablero con todo lo que les fui diciendo, con cada dato.

A Bella se le ocurrió la idea de ir a buscar la casa, ver si existía o la casa era solo una metáfora que representaba algo. No era una mala idea, pero nadie sabía dónde quedaba esa casa; además de que no tenía tiempo para ir de acá para allá en busca de casas que ni se si existían.

El recital de ballet se acercaba y cada día la instructora estaba más rara, como si algo malo le pasara. Siempre me acercaba a preguntarle si estaba bien, pero evitaba decirme la verdad, y me daba cuenta.

Todo se volvió más raro cuando ella dejo de venir, según lo que nos dijo la maestra suplente, ella estaba enferma, que se iba a ausentar hasta sentirse mejor, pero no sabíamos cuándo volvería, y que igual trataría de estar para el recital.

Hicimos mil pasadas de la rutina entera, de principio a fin. Termine exhausta, no podía creer cuan cansada estaba, jamás me había cansado tanto una rutina entera. Eso se debe a que no estoy durmiendo bien, o eso quiero creer; cada vez que tengo sueños raros no puedo volver a dormir bien como antes, me cuesta y cada ruido que escucho me despierta.

Stefano tampoco ha dormido nada, dice que cada vez que tengo un sueño extraño grito con muchas fuerzas. Una vez fue tan fuerte que le sangraron los oídos. Me preocupaba que mi grito lastimara tanto a mis seres queridos, desde ese día Derek y Bella también viven con nosotros.

En la escuela estábamos en receso de invierno. Que solo era no ir a clases, porque aun así teníamos que seguir estudiando algunas cosas que nos dejaron los maestros.

Aún faltaban dos semanas para el recital, pero decidí seguir la idea de ir a buscar la casa que aprecia en mis sueños. Nunca le dije nada a mamá, quería hacer todo esto sin decirle, pero muy en mis adentros sabía que estaba mal no decirle nada a mamá.

El plan era demasiado simple, pero a la vez un poco complicado. Como yo era la única que podía saber dónde estaba, pero no lo podía recordar. Decidimos hacer una especie de hipnosis para ver si de esa forma podía llegar a encontrarla.

Iríamos todos para cubrir cualquier inconveniente. Si algo nos pasaba tendríamos un par de humanos, una manada de hombres lobos y un trio de brujas novatas, nada podía salir mal. Creo.

Mamá iba a estar con la mamá de Brenda y Gwen resolviendo cosas del juicio de mi custodia y cosas de abogadas que no entendía mucho, asique sería un buen plan, pero hicimos la cuartada de que estaríamos estudiando en la casa de Austin, como nadie se habla con su padre, ellas no lo llamarían para comprobarlo.