Musa

Brock ansiolitiko

Como esta cámara vieja no va a verme negativo
Si la luz que me revela no me refleja contigo, ¿Como no van a ir de luto?
Los segundos que me ofreces cuando
En tan solo un minuto me matas 60 veces.

Estoy cansado de tanto Materialismo
de ver realidades fingiendo ser Espejismos
de encontrar canciones para siempre oír lo mismo
un verso llorar la muerte del Romanticismo.

lo fácil fue venderte que el Amor movía montañas
pero quise ponerte el Everest en las pestañas.

muchos podrán mostrarte como un ángel se enamora
pero pocos demostrarte que el diablo también llora.

me enamore de prisa de aquello que olvide lento
ame a primera vista, pero solo paso el tiempo.

Odiarlo todo y pretender que alguien te quiera
es como tocar madera en paredes de cemento.

la persona es el instante no sus fotos
que lo importante esta delante de nosotros
mira esa Flor de Loto, Grita: Fragilidad !
pero nació en mitad de un Terremoto.

Llamadme loco pero sueño con lo basico
ser feliz con poco porque serlo ya es lo maximo.

Para vivir como un gato, he de morir como un perro
Pa’ reír en compañía, he de llorar soledad
Hay que tener mucho brillo para ver mi cielo negro
Y hay que tener pocas luces para amar mi oscuridad.

Dejé de verte para no verme invisible
Rompí tu foto pa’ no ser fotosensible
El amor nos hace esclavos, pero amar nos hace libres
Pero si no ves las rejas, ver el cielo es imposible.

Vi que no sabías subir y yo supe ser el viento.
Vi que no sabías bajar y yo supe ser calzada.
Vi que no sabías mentir y yo supe ser invento.
Vi que no sabías jurar y yo supe ser palabra.
Vi que no sabías seguir y yo supe ser intento.
Vi que no sabías parar y yo supe ser frenada.
Vi que no sabías de ti y yo supe ser el tiempo.
Vi que no sabías amar y ya no supe ser nada.

Te he dicho "te odio" la cara, y "te quiero" en cualquier idioma
Yo fui de jurarte tarde, lo sé por qué te lo juro
Lo que no me digas tú, ya me lo dirá la herida
Lo que no te diga yo, ya te lo dirá la vida
Que yo estaré cuando me necesites
Cuando ganes, cuando falles, cuando calles, cuando grites
Que si sientes lo que yo, no hace falta que te explique
Qué son estos hilos rojos que nos atan los meñiques.

Si amar es tóxico, llámame Chernóbil
Pero allá fuera, el odio es más radioactivo
Hubo silencio y ninguno miró el móvil
Y pensé: "que bonita manera de hacernos ruido".

Siempre que consigo algo, siento una gran decepción
Porque todo lo soñado, queda más perfecto en la imaginación
Hago las cosas con tiempo, para ser exactos, el último día
Ser un fallo, fue el acierto más grande que fui
incluso ser perfecto es un defecto, en sí.

El pobre envidia al rico por su cuenta en el cajero
y el rico envidia al pobre por ser rico sin dinero.

Maldigo a ese reloj que me envejece
El tiempo es una puesta de sol que se desvanece.
Por eso pongo focos a estos ojos que me escuecen
y escribo para locos porque pocos me merecen.

Tanta gente para estar solo al final...
la moral es la tangente que divide el bien y el mal.
El dinero sólo compra la parte superficial
porque ningún sentimiento tiene estado material.

El ignorante se ocupa de adorar la luz divina,
pero el sabio se preocupa de entender por qué ilumina.

¿Por qué gastar el tiempo tratando de ver la hora?
si lo realmente cierto es lo que está ocurriendo ahora.

Trabajé de botones en hilos de vilo y de insomnio,
y dos cuerdos tejieron recuerdos desde un manicomio.
¿Cómo vas a llorar a caballo? —me dijo el demonio.
Si el amor duele más a galope de algún unicornio.

Que en mis labios no suenan canciones,
tan solo pedazos...
Se agotaron las pilas del radio de tus antebrazos...
Regalé mis vaqueros a un indio que andaba descalzo,
y le dije: "Si ves a cupido, le das tú el flechazo."

Tu frontera llamada entrecejo no deja que entre,
y el visado en tus cejas no sirve en tus dos continentes.
Ojalá que la Tierra volviera a nacer nuevamente,
y al formar la Pangea, tú y yo, fueramos uno siempre (siempre.)

Yo estoy en la calle lamento,
en el valle de los besos sedientos,
y tú como bruja dibujas burbujas y empujas,
que cruja mi aguja del tiempo.

Y es que mi cama sin ti es un bordillo,
un ovillo sin lana, una dama sin brillo,
un martillo en la cara, una daga,
un cuchillo, un pasillo, con balas, buscando un gatillo.

Y que venga la muerte a pasar inventario,
con el calendario de tus despedidas.
De tanto escribirte, en la vida los labios,
saqué un diccionario de besos suicidas.
Quise ofrecerte un camino de rosas,
pegando baldosas de espinas y heridas.
Nunca dejé de sentir mariposas,
aunque cada prosa fuera insecticida.



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En el texto hay: poemas, literatura, amor

Editado: 07.08.2020

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