NARRA HAYDEE...
En este momento las diferencias entre Scott y yo desaparecieron, lo importante ahora es salvar a quienes queremos.
Bajamos escaleras, pero el fuego esta en nuestro camino y al parecer no hay manera de evadirlo.
-Retrocedamos- dice Scott y yo se lo niego.
-No, aun podemos pasar entre el fuego- le digo mientras me acerco al fuego, es demasiado ardiente así que retrocedo, Scott sonríe al ver que tiene la razón pero no por mucho, salto y atravieso las llamas, llego hasta el otro extremo sin ninguna quemadura.
-Vamos, salten. Estarán a salvo- les grito y de inmediato Ethan salta hacia mi, después Jaqueline y al final Scott llega con una cara de pocos amigos.
Logramos salir del hospital y nos encontramos retirados antes de que el hospital explotara, me recargo en Ethan y el solo me abraza por la cintura.
-¿Ves? Un beso los unió como novios, tal como te lo dije Jacky- menciona Scott y enseguida Jaqueline se voltea a otro lado. Me acerco a Scott y le doy una bofetada, ¿como se atreve?.
-Lo dije una vez y lo diré una vez mas, eres un niño ambicioso y mimado que no sabe lo que tiene. Te salve la vida, deberías estar agradecido, imbécil; y en vez de estarlo te pones a hacer problemas donde no hay.- le digo a Scott, me enerva que se comporte de esa manera.
-¿Acaso te molesta que te recuerde ese beso?- me dice Scott presionando mi muñeca.
-¿Acaso te molesta que te recuerde quien engaño a quien?- le digo y solo aprieta mas mi muñeca, duele pero aparento que no.
-Te recuerdo que tan débil estas- me dice y me dobla la muñeca, intento aguantar el dolor- Mirate, querida. Pronto estarás rogándome que te salve- me dice a la vez que me tira al suelo, joder, cada vez duele mas. Ethan lo empuja de tal manera que Scott termina en el suelo, Ethan me ayuda a levantarme y solo me aprisiona mas a sus brazos.
-No vuelvas a tocar a mi chica, ¡¿oíste?!- le dice Ethan a Scott, esta enojado y es notorio.
-Te permití que hablaras con nosotros y mira lo que sucede, veniste a pedir ayuda y la lastimas..- no termina de hablar Ethan ya que una limosina interrumpe nuestra pelea.
-Cállense y entren- nos dice mi madre y solo accedemos, tan pronto entramos, esta acelera y mi madre solo me observa.
-¿Porque tu muñeca esta así de morada?- dice mi madre aterrorizada y solo veo mi muñeca, que rápido se puso de color mi muñeca. No respondo y solo me acurruco en los brazos de Ethan, el me corresponde y me abraza hasta quedarme dormida.
NARRA ETHAN..
Solo pasaron unos minutos y Haydee se quedo profundamente dormida, ella ha estado muy cansada. A veces me da miedo que duerma con esa tranquilidad y rapidez.
-Llamaron la atención, ¿acaso querían que los rodearan los medios de comunicación?- dice la madre de Haydee y yo solo miro a Haydee para saber como esta.
-Díganme, ¿porque la muñeca de Haydee esta así de morada?, responde Scott- dice la madre de Haydee y Scott solo desvía su mirada.
-Ella esta mas débil de lo que pensé, solo apreté su muñeca y de inmediato tomo ese color- dice Scott decaído y por primera vez tiene razón, Haydee esta mas débil y su piel lo hace notorio.
-Haydee esta mas débil, la enfermedad le esta ganando. Se esta volviendo una chica frágil y según los doctores puede que también vaya perdiendo la memoria- dice la madre de Haydee con una mirada nostálgica y yo no miro a nadie mas que a Haydee, el solo pensar que algún día puede olvidarme me duele pero no tanto como el pensamiento de que algún día la pierda.
-¿Ya no se puede hacer algo al respecto?, ¿ella...seguirá viva?- lo digo sin pensar, pero no me arrepiento de haberlo dicho ya que estas dudas me comen vivo.
-No lo se, Ethan. No hay esperanzas.- dice la madre de Haydee y de pronto hay un silencio tan incomodo que ni yo aguanto, demasiados pensamientos me rodean, quiero salvarla pero no se como.
Llegamos hasta la mansión, me bajo de la limosina cargando a Haydee y me adentro a la mansión. Subo escaleras hasta llegar a la habitación de Haydee; la dejo en su cama y tan pronto me di la vuelta me detuvo una mano.
-No te vayas, por favor- me dice Haydee, esta tan débil que ni su agarre es lo suficientemente fuerte.
-Esta bien, me quedare contigo, cielo- le digo mientras me recuesto a su lado, la observo, su mirada demuestra un cansancio de su enfermedad, me siento tan mal pero no debo demostrarlo.
-Amor, ¿te puedo hacer una pregunta?- me dice Haydee y sin pensarlo le digo que si, mientras peino su cabello.
-¿Por que me dices cielo?- me dice, es una pregunta que no es tan difícil de responder.
-Porque el cielo es tan hermoso como misterioso, es como tu. Eres hermosa, una diosa que lo demuestra día a día, pero también eres misteriosa, guardas demasiados secretos que apuesto que los que conozco no son ni el tercio de todo. A veces te miro y veo una galaxia tan maravillosa a través de tus ojos- le digo mientras le sonrió y ella solo me mira con asombro.
-¿Enserio?- dice y veo como sus ojos se iluminan, esta Haydee demuestra a una niña que busca el amor y cariño de alguien, se que Haydee no es como lo ha demostrado por años, ella solo ha creado un muro que la proteja del todo el daño.
-¿Acaso crees que mentiría?- le digo mientras me siento en la cama, ella se recuesta en mis piernas. -Haydee, mi vida y cielo, aunque peleamos y si alguna vez dejamos de vernos, sabrás que tu eres mi cielo, mi ángel, mi alma, mi diosa, mi calma, mi canción favorita, mi luz en la oscuridad, mi vida y anhelo, eres mi sueño hecho realidad. Tu eres mi paz y calma, eres quien hace que mis días sean los mejores, con solo una mirada tuya me tienes loco.- le digo a Haydee y sus ojos brillan mas, estoy tan enamorado como ella.
-Que empalagoso, Ethan- me dice y yo solo la veo como en segundos se ruboriza por lo que le dije, se da cuenta de que la miro y ella se cubre con sus manos.