Vacío, todo vacío. Ya nada queda, ya nada nos queda, ya nada me queda. Excepto ella. Lo he perdido todo, menos a ella. Es la única razón por la cual sigo en este mundo, que por cierto, no es nada lindo. Es otra de las tantas razones por las que me gustaría no seguir existiendo, pero a la vez, hay una razón que me impide hacer semejante cosa... ella.
No puedo dejarla sola, no podría hacer algo así a alguien tan especial, no puedo dejar ir a la única cosa que tengo a mi lado. Abandonarla a estas instancias, sería muy cobarde de mi parte.
Ella es fuerte, es valiente, puede cuidarse por sí misma a pesar de su juventud, pero no es excusa, no pienso hacerlo a no ser que ella no esté conmigo, y por supuesto, haré todo lo que esté al alcance de mi mano para que eso no pase.
A pesar de lo jodido que esté el mundo, ella siempre luce una espléndida sonrisa cada vez que la veo, cada rato que pasamos juntos lo disfruto mucho, y trato de no pensar que cada rato que paso con ella puede ser el último, pero es imposible no hacerlo. El mundo es un caos, es una amenaza constante, y el peligro acecha en cada esquina.
Ella también lo ha perdido todo, sólo me tiene a mí, y yo sólo la tengo a ella, pero a pesar de todo, seguimos aquí, y lo más importante, seguimos juntos.
Soy Ethan Dempsey, y esta es mi historia.
Editado: 13.05.2018