Nefilim almas en guerra

Capítulo 15 Parte 3

Sestra

Tengo las manos atadas a la espalda, estoy cubierta con algo en mi cabeza y también ciento los tobillos atados, el bamboleo de los pasos de Carin,vquien es que me lleva sobre su hombro.

¿Oor dónde estaremos? ¿Sestra ya se habrá dado cuenta de mi desaparición? ¡DIOS! No quiero ni pensar si ella cree que la he dejado. Se volverá loca y les dará caza a todos hasta matarlos si es que no están ya buscándome.

– Hay que descansar. El herido necesita su curación. Kiara hizo muy bien su trabajo – la voz de Erol se escucha ami lado.

– Wl sol le ayudará – anuncia Soledad preocupada, ¿Porque esta preocupada?, debería estar molesta como yo al ser obligada a esto.

– Para las heridas externas quizá, pero lo interno tardara en sanar… El veneno es muy potente en su estado natural. Demos gracias que él es un Angel de sangre pura y su cuerpo está combatiendo el veneno – Carin no parece muy convencido, él sabe de antemano que los golpes de nosotras son con un daño específico.

– Y el antídoto que le dio a Yanis – ella suena esperanzada.

– Primero tiene que sanar las heridas internas, asegurarnos que los huesos queden en su lugar – Carin insiste.

– ¿Crees que ya se haya dado cuenta?

– Lo mas seguro es que si Sol. Yanis se hizo vario moretones. Ya vieron.

Ciento como levanta mi tobillo y eso hace quede un respingo y me sacuda un poco, estoy recuperando mis fuerzas a pesar de que la cadena no cede contra mi pecho, no es inevitable que mi cuerpo siga luchando contra ella.

– Vaya. la princesa ya despertó. Es hora de que haga su lavor – tira de mis cadenas con fuerza y caigo de espaldas desde la altura del cuerpo de Carin, el golpe me saca el aire. Me descubre la cabeza y parpadeó al ver la luz del amanecer. Estamos rodeado de árboles y montañas bañadas en un color verde y café. En cuanto enfoco la vista en Carin, Soledad y Erol, veo que sus rostros reflejan la preocupación, yo me limito a verlos con con todo el odio posible.

– Bueno pues estamos oficialmente muertos. Si se dio cuenta que en méxico no hay nada, ya habrá vuelto. Y estará más furiosa cuando vea en llamas la prisión.

Ellos lograron engañar a Sestra no a mi ¿Cómo tengo tanto idiota rodeandone? La culpa es de ella, mi maldita manipuladora hermana. Sospecho que esto tiene el nombre de Axel. Me concentro en Soledad y para mi sorpresa no le veo ninguna cadena.

– Lo siento – dice ella – No podemos volver, aunque te sacaremos de aquí, Ella nos matara sin permitirnos una explicación – en efecto nunca los perdonarnos, Carin se acerca y me quita la mordaza, se que tiene razón, no la culpo a ella, sin embargo estoy cabreada.

– No te preocupes yo los matare sin ayuda de Sestra y no seré tan piadosa como ella.

– ,Ahí lo tienes – dijo Erol aún más preocupado, yo puedo ser mas letal que Sestra, lo he demostrado y justo ahora me siento herida – Se los dije me alegra tomar esta decisión y para serte sincero prefiero que ella me mate.

– Ella no va a matar a nadie – asegura Carin. Cómo si de verdad nos conociera.

Reparo en las posturas de Erol y Soledad, están transportando a Israel en una camilla amarilla, aun con el mismo aspecto.

– Tu tarea preciosa. Curalo.

“Ja” quieren que le haga de enfermera.

– NO – Ami nadie me dice que hacer, lo desafío, ¿De verdad estoy dispuesta a dejarlo morir?, aun sigo molesta con el por ser tan estúpido, el solo se puso en esta situación, Carin furioso se toca el puente de la nariz y me propina una bofetada, mi cara queda ladeada.

– ¡Carin, ya basta! – Soledad se interpone en su camino, sacudo la cabeza porque el cabello se me ha venido a la cara.

– ¡Ella le hizo esto! ¿Cómo puede seguir comportándose de esta manera? ¡DIOS! – me carcajeo, de verdad. De verdad me importa muy poco. No siento nada. Carin aprieta los puños viendo mi diversión.

– Cuando ella me encuentre y seguro lo ara. Te arrancara la cabeza, pero yo te aseguro que personalmente te arrancare el corazon – me carcajeo de nuevo y lo haré. En cuanto esté libre lo haré, estoy tan furiosa por su traición que ya no me importa quienes son.

– Tu no eres ella. Tu no eres como ella amiga – Soledad se acerca lo suficiente, rompo la cuerda que ata mis manos tras mi espalda y ella está confiada en que no le haré daño, pues se equivoca, me abalanzó con mis manos aferrando su cuello, Carin y Erol son rápidos pero no la suelto.

– ¡Dejala! ¡Dejala! – me obligan a soltarla entre los dos, mientras me someten, Sol retrocede e intenta inhalar aire.

– ¿Estas bien?– pregunta Erol inclinándose sobre Soledad.

– Si. Estoy. Bien – dice ella sin apartar la vista de mi. Triste, dolida. Ella está triste. Y entonces noto el reconocimiento y le niego, será peor si abre la boca, reprimes su miedo y evita mirarme. “Buena chica”

Carin se acerca y me lanza alos brazos de Erol, que se ha enfurecido por mi ataque.

– Si vielves hacer algo tan estúpido como matar a auno de nosotros. Te matare. Seguramente tu y tu hermana serán historia.

Y para dejar claro que lo dice enserio corta mi hombro con mi daga, estoy indefensa y se que ahora no tengo posibilidades contra ellos, si quiero seguir con vida tengo que hacer todo lo que me digan o echaran a perder nuestros planes.

– Curalo – dice dándome un ligero empujón hacia Israel, siempre cargo con unos tubos de antídoto del veneno, están dentro de mis ropas todo el tiempo, junto a mi busto – s

Si intentas huir. Te matare. Si intentas engañarme, te mataré y si Israel muere Axel te matara.

Me empuja al lado de Israel en su camilla, puedo caminar, tiento mi armadura para ver si tengo alguno de los dardos, aunque no soy estúpida, sé que no están.

– ¿Creíste que no te desarmaríamos?, conozco esa armadura mejor que tu, deja de perder el tiempo en alguna salida no la hay.

Me hinco junto a Israel y paso mi mano por su cuerpo para evaluar los daños, me resulta algo extraño estarle tocando, el daño es justo lo que hacemo.




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