Capítulo 7

EDGAR

Como ya he dicho antes, no soy muy sociable.

No se de donde me salió el valor para decirle eso a Nico.

Bueno he de confesar que en realidad quería proponerle un rato a solas, pero como amigos ¿comprendes? No es como que yo tenga un crush en Nico, eso sería extraño, no me gustan los chicos, y menos si lo conozco desde hace tan poco.

Bueno, la cosa es que cuando se lo propuse al instante caí en cuenta que sonaba raro así que dije que también podrían venir sus amigos.

Y ahora me metí en una situación social.

¡Yo solo!

No no no.

Yo no iba a ir con unos desconocidos, ya me imaginaba a Nico presentándome y ellos tipo “¿Este raro qué pitos toca?”

*Significa que qué onda con alguien o que hace*

—Liv—agarre a mi hermana por la muñeca, ella me miró extrañada—necesito que me acompañes a un lugar luego.

Ella enarcó una ceja.

—¿Qué putas Edgar?—dijo—¿que sucede? Parece como si me estuvieras pidiendo que te acompañará a enfrentar a tus prestamistas matones o algo así.

—Después del concierto—suspire— acompáñame a ir con Nico y sus amigos.

Ella sonrió divertida.

—¿Y adonde van a ir?

Ahí sí que me agarró desprevenido, ¿a donde íbamos a ir?, puesto que la fiesta no acababa con el concierto supongo que teníamos que ir a algún lugar de esta finiquita.

¿Pero dónde?

Olivia parecía entender mi conflicto mental y me puso una mano en el hombro luego empezó a negar con la cabeza a modo de desaprobación.

—Yo resuelvo—dijo—tú solo espérame aquí, volveré antes de que termine el concierto.

Luego de un rato Olivia volvió, me explicó que si caminábamos un poco y íbamos a la zona más alejada del terreno de la finca, íbamos a encontrar una zona de camping, que consistía en una cabaña y un área para hacer fogatas, me dijo que Ale ya había mandado a unos señores a que prendieran una fogata, también comentó que su amiga iba a tener una noche especial con su crush.

No necesitaba saber esa información.

El concierto terminó, Nico me mandó un mensaje indicando que iban a ponerse una ropa algo más cómoda y que nos veríamos en la zona en la que habíamos estado conversando antes.

¿Por qué estaba nervioso?

Quizá era por conocer gente nueva, la verdad nunca me han importado mucho las personas en general, me caían mal los que hablaban mal de mi hermana y sus amigos o la gente falsa, no me gustaban las personas creídas o egocéntricas, tampoco me importaba caerle bien a los demás, pero por esta vez, quería causar una buena impresión, Nico era el primer amigo que hacía por mi cuenta, y aunque llevábamos apenas una semana conociéndonos sentía que habíamos formado una amistad muy linda. Quería que Nico siguiera siendo parte de mi vida aunque sea mandándonos mensajes mundanos o dándonos like en las historias de Instagram. Y por eso quería caerles bien a sus amigos.

Suspiré, Olivia también parecía entusiasmada.

—Se ven que son súper divertidos—comentó—ya los stalkee a todos y se ven súper pura vida.

*buena gente*

Asentí.

Después de un rato nos encontramos en aquel lugar donde habíamos acordado, estaban, Nico, Nora, Luna y Santiago.

—Leo tenía algo que hacer—explicó Nora

—Bueno—dijo Nico poniéndose de puntillas como dando saltitos, eso me causó gracia y ternura—Ellos son Edgar y Olivia—nos presentó—Y ellos son Nora, Luna y Santi.

—Mucho gusto—murmure—.

—Así que tú eres el que hizo que nuestro vocalista estuviera toda la semana por las nubes—dijo Nora con una sonrisa y pasó un brazo por los hombro de Nico, este la miró y le hizo un gesto para que hiciera silencio, esta movió la mano como espantando una mosca—un gusto

Luna sonrió tímida, lo cual me pareció curioso, en el escenario se veía todo menos tímida.

—Un gustazo señorita—dijo Santiago dirigiéndose a mi hermana—Me encanta ese vestido, te queda espectacular.

Okey, admito que si sentí tantita rabia pero se me quitó apenas escuché a Liv sobrar una carcajada.

—Tranquilo ángel—murmuró—a mi me gusta tu cabello, muy pinkie pie.

Este se llevó una mano al pecho actuando ofendido y luego río.

—¿A dónde vamos?—preguntó Nico.

—Yo guió—dijo Olivia y empezó a caminar para que el resto la siguiéramos.

Al llegar había unos señores alimentando la famosa fogata.

Nos dieron unas cuantas instrucciones como donde estaba la leña y demás, nos dieron las llaves de la cabaña donde comentaron podríamos agarrar mantas más malvaviscos, galletas y chocolate y bebidas—de los que ya nos habían dejado— además que adentro había juegos de mesa y otras cosas.

Nos sentamos alrededor de la fogata, yo me senté al lado de Nico, al lado de Nico se sentó Nora, al lado de ella Luna, luego Santi y por último mi hermana al lado de Santi y yo.

—¿Y cómo fue que empezaron todo esto de la banda?—preguntó Olivia.

Nora de inmediato sonrió.

—Pues Nico y Luna se metieron a clases de canto, y yo ya sabía tocar el bajo—explicó—conocí a Santi y más tarde Leo se hizo el guitarrista, todo fue idea mía en realidad

Olivia asintió.

—Edgar escribe—comentó y yo me puse rojo a más no poder.

—Cállate—le dije entre dientes.

—¿En serio? Hace tiempo que quiero hacer algo nuevo a parte de los covers—dijo Nora entusiasmada.

—¿Qué tipo de cosas escribes?—dijo Santi con curiosidad

—¿Nos muestras?—añadió Nora.

Y me sentí acorralado.

No solía gustarme mostrar lo que escribía, al menos que le tuviera mucha confianza a alguien, como a Olivia, y aún así había cosas que ni siquiera a ella le mostraba.

Que alguien viera lo que yo escribía me hacía sentir desnudo, como mostrar una parte de mi alma.

—Chicos, cortenla—intervino Nico—Apenas lo conocen y ya quieren que les muestre su arte, así no funciona—sonrió y—¿cuánto tiempo pasó para que pudiéramos siquiera escuchar a Luna tararear?

Nora bufó.

—Un montón, quizá dos años, no nos dejaba escuchar su preciosa voz.