Capítulo 11

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Yuri después de que Renzo abandonó el casino se quedó muy intranquilo, con lo que el muchacho le platicó..

Mandó a ponerle seguridad tanto a Renzo, como a su hermana sin que ellos se percataran..

Decidió no hablar con su padre, hasta no averiguar algo y evitar preocuparlo..

Recordó también los ramos de flores que recibió meses atrás, y eso lo empezó a angustiar..

Se colocó de pie y buscó un cigarro, haciendo memoria de algunos de los hombres que conocía, con las características que Renzo le dio, aunque era muy poca información, su mente empezó a maquilar y a tratar de encontrar algo...

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Los siguientes tres días Renzo no visitó a la rubia, evitando que viera su rostro maltratado, siguiendo las instrucciones de su hermano..

Ella no le tomó mucha importancia, porque estaba en contacto todo el tiempo con ella, aparte porque sabía que estaba muy dedicado al trabajo en la joyería..

La Rusa se dedicó a ensayar duramente, porque estaba a la vuelta de la esquina la competencia, y era algo que la llenaba de ilusión..

Visitó junto a su madre a la modista, que le haría el hermoso traje que escogió para la competencia..

Se decidió por un color azul rey con bordados en color plata, igual que el tutu que tenía diamantes por toda la orilla...

Se lo midió para los nuevos ajustes, quedando de regresar por el la próxima semana, días antes de la competencia..

Todo caminaba con normalidad y en total calma, también se estaba acercando el fin de cursos, y la entrega de trabajos y todos los pendientes la tenían corta de tiempo y ocupada, quería que todo fuera perfecto para ir a la universidad...

Para ese entonces ya tendría esa corona, que su padre le regalaría si quedaba campeona...

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Yuri Petrov todavía no encontraba nada, y las escoltas que envió para cuidar a Renzo y a su hermana, no habían detectado nada extraño...

Decidió guardar silencio y seguir buscando. Le llegó la información de las cámaras de circuito cerrado, que se encontraban alrededor del lugar en el que Renzo fue detenido y golpeado..

Pero desafortunadamente eran de baja calidad, y solo se alcanzaban a ver las siluetas oscuras y las dos camionetas, que estaban atravesadas y no dejaban distinguir las placas...

Dio la orden de no bajar la guardia y que los siguieran cuidando, ya que no quería arriesgarse...

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—¿Qué haces papá?. —preguntó Yuri ingresando a la terraza, donde a su padre le gustaba compartir una copa, o simplemente pasar una tarde relajada...

—¡Ven acércate!.. ¿Dime qué te parece?. —añadió, entregándole un estuche en color negro de terciopelo..

—¡Wow!.. Qué te puedo decir, está hermosa. Mi hermana se volverá loca. —respondió, tomando la hermosa corona que su padre le mandó hacer, especialmente para ella...

—De eso se trata, ya quiero ver la cara de felicidad de mi Reina Rusa. —dijo Alek Petrov orgulloso...

—Me imagino que te costó una fortuna.. 

—El precio es lo de menos, es una pieza única en el mundo. —agregó, observando el rostro sorprendido de su hijo, ya que la corona era de oro blanco, llena de diamantes cristalinos, que brillaban con intensidad...

—Esperemos que mi hermana quede campeona.. 

—Por supuesto que quedará campeona, estoy seguro que así será...

Yuri sonrió a sus palabras, viendo la felicidad de su padre lleno de orgullo, que sentía hacia su hija, esa niña que desde los 5 años soñó con ser una bailarina, y que estaba a punto de lograrlo...

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Una semana después

—No puedo creer, que hayas decidido escaparte del colegio, para venir a verme. —mencionó Renzo tomándola de la cintura, y le dio un suave beso en los labios..

La rusa se colgó de su cuello emocionada y recargó su cabeza en su pecho, mientras que sentía los brazos fuertes de Renzo que la abrazaban..

—Tal parece que no me extrañaste, tenemos muchos días de no vernos, la competencia está a la vuelta de la esquina y ni siquiera, fuiste a ver mis entrenamientos. —reclamó con voz dulce, ya que en esos días no la había visto, porque Renzo estaba esperando que su rostro estuviera libre de golpes...