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Me levanto por el pitido de mi alarma, rápidamente me pongo de pie, a pesar de que me da mucha flojera levantarme un lunes por la mañana, salir de mi cómoda y tibia cama, sé que debo ir a la escuela, y cumplir con mis obligaciones.

Voy directo al baño donde me desvisto para darme una ducha de agua tibia, lavo mis dientes y me visto. Me pongo un abrigo blanco de tela muy fina por dentro del jean el cual es azul oscuro, me pongo una chaqueta negra, abrigadora y unas botas planas en el mismo color.

Me miro en el espejo para confirmar que todo esté bien, cepillo mi largo cabello blanco grisáceo y lo acomodó de forma que baje por ambos lados de mi rostro y por detrás de mi espalda, arreglo mi flequillo y suspiro al ver mi reflejo en el espejo, bajo a la cocina encontrándome con mi creadora sirviéndose café, mi madre es una mujer alta de cabello rubio con ojos color azules intensos, es de tez blanca, labios carnosos y una apariencia juvenil muy parecida a mí.

—Buen día— la saludo.

—Buen día— responde. —Anoche cuando llegué ya estabas dormida y no quise despertarte pero cuéntame ¿Cómo te fue?— me sirvo un poco de café igual.

—Lo mismo de siempre, mi padre ausente, Kayli llamando su atención, derrochando su dinero y siendo una perra conmigo como siempre, aparte de que duerme con su chofer— al decir eso mi madre se atraganta con el café y me mira perpleja.

— ¿Qué? 

—Solo se necesita un 5% de inteligencia para notarlo. El hombre es joven, atractivo y estaba saliendo de la habitación de Kylie con la camisa mal puesta y labial en el cuello de su blanca camisa.

— ¿Le dijiste eso a tu padre?

—No, no me importa lo que pase entre ellos siempre y cuando no tenga que ver conmigo— mi madre me mira mal por lo que me encojo de hombros. —Si le digo no va a creerme y puede hasta acusarme de mentirosa— me tomo todo el café de un trago. —Adiós mamá nos vemos— beso su mejilla y salgo de ahí.

Dejo mis cosas en el asiento del copiloto y me pongo en marcha no sin antes encender la calefacción, hace frío. Miro a la casa de al lado pensando en lo ocurrido esta madrugada, aparentemente no hay nadie pero eso no evita que me ruborice.

¿Cómo pude ser tan descuidada? Yo más que nadie estoy consciente de lo peligroso y arriesgado que puede ser algo como lo ocurrido anoche, y más si le sumamos el riesgo de la situación en la que estaba. 

Me dirijo a mi respectivo salón, justo llego tocan el timbre por lo que me apresuro a tomar asiento antes de que el salón se llene, el profesor entra con los alumnos que faltaban, miro mi alrededor, parece que Inés no está en esta clase. Respiro un poco aliviada por ello.

La clase inicia y toda nuestra atención va a el profesor, el inicia con la charla de siempre donde se presenta, habla sobre su asignatura, reglas, entre otras cosas, unos leves toquidos en la puerta interrumpe la clase y roba toda nuestra atención, la puerta se abre, yo sigo con lo mío (dibujar en la esquina de mi libreta).

—Lo siento, no dormir para poder llegar, revise su correo, si avice— el profesor suspira dejando que Annie pase, ella entra con una sonrisa torcida y se sienta a mi lado.

Annie me hace señas para que mire mi teléfono y eso hago; la chica me ha enviado el enlace de una aplicación la cual descargo al instante, a mi parecer y desde mi punto de vista funciona como WhatsApp solo que utiliza mi nombre como nombre de aplicación, no pasa casi nada para que el chat de la chica aparezca:

Annie: Es mejor hablar por aquí, no queda registro de nada, una vez veas el mensaje, desaparece.

No vas a creer con quienes me tope estas vacaciones. 

Yo: ¿Con quienes?

Annie: A los profesores, al parecer tenían un viaje juntos o algo así, el caso es que no todos los profesores son feos o están tan mal.

Arrugó el rostro en una mueca de asco, viendo a Annie mi mente va a Inés haciéndome sentir un poco culpable por permitir que entre Axel y yo pasara algo, pero siendo justos Inés siempre fue mi mejor amiga, la adoro con todo mi corazón, es una chica realmente increíble, me apoya y me ayuda en todo lo que puede, pero lo que hizo estuvo muy mal, jugo no solo con mis sentimientos, sino, también con los de Axel, ahí si me fallo de la peor forma posible. 

Ella sabía que yo gustaba de Axel, solíamos hablar de lo mucho que me gusta, de como conocía cada cosa que el chico hacía y buscaba un modo de estar cerca o solo verlo desde lejos, ella sabía que dure años enamorada de él y aun así empezó una relación con él, al enterarme de eso estaba devastada hasta me fui unos días con mi padre, no me sentía lista para dejar ir ese amor y verlo con mi mejor amiga, eso me dolía.

Según Axel, ella un día se le declaró en una fiesta diciendo lo mucho que le gustaba y usando la información que yo había obtenido logró manipularlo, terminaron durmiendo juntos y cayendo en este círculo tóxico y vicioso que ellos llaman relación.

Con el tiempo comprendí que el hecho de que ella esté bien me bastaba y si eran felices lo comprendía, acepté su relación sin más, pero la revelación de esa nueva información me hace replantearme muchas cosas.

Me había hecho a la idea de que él no gustaba, ni gustaría de mí, nunca, pensé que se quedaría solo en eso, en lo platónico, me resigné a verlo como el chico que ahora salía con mi amiga.

Estas vacaciones mientras hacía mi servicio en el centro comunitario, el hermano mayor de Axel lo trajo a la fuerza obligándolo a entrar, nosotros ya nos conocíamos por Inés, cuando el supervisor nos presentó hicimos como que no nos conocíamos aunque ambos moriamos de risa por vergonzosa situación en la que ambos nos encontrábamos; ambos nos encontrábamos cumpliendo con un servicio comunitario por haber roto las leyes de tránsito.