Consejos.
—Debes darle espacio, o te dejara.— Chesse me aconsejaba mientras nos cambiábamos en los vestidores del equipo.—Ya sabes, te dejara en un abrir y cerrar de ojos si estas detrás de ella como un perrito faldero siempre. Así que deja de estar tan apegado a ella o termina solo, triste y deprimido sin tener a quien darle amor —dijo terminando de colocarse la remera.
—Pero, si ya estoy con ella ¿No debería aprovechar y darle todo mi amor ahora?— El resoplo y tomo su bolso deportivo.
—Nos vemos, amigo.— dijo cansado y saliendo de los vestidores.
—¡Oye, espera! ¡Ayúdame, dime que tengo que hacer!— Ya era muy tarde, se había ido. Fui yo el que resoplo esta vez, quitando la toalla de alrededor de mi cuello y dejándola en uno de los asientos del vestuario.
Estaba muy estresado para tomar una decisión de sobre como debería tratar a mi novia ahora que la veo muy aburrida últimamente. No se que mas hacer para que vuelva a gustar de mi con la misma intensidad de antes. Se que siempre dice que me ama, pero ya no parece hacerlo como en un principio. Aunque... yo tampoco me siento como cuando empezamos.
Quizás Chesse tiene razón, debería darle un poco de espacio para que así ella me extrañe y yo extrañarla a ella y así disfrutar mucho mas cuando estemos juntos. Si... debería hacer eso.
. . .
—Adiós nena, te amo— digo antes de alcanzar a los chicos y volver a reintegrarme en el grupo.
—idiis nini, ti imi— me imitan todos y yo empujo a los dos que tengo a mis lados sonriendo divertido.
—Eres tan empalagoso con ella.— dice uno.
—Si, es verdad. No entiendo como pueden soportarlo.
—Como puede soportarlo ella, mejor dicho.— corrige un tercero.
—No se de que hablan.— suelto divertido, pero sin entender mucho.
—De eso— me señalan.— Ni siquiera te das cuenta de lo cursi que eres, ella se cansara de ti si abre sus ojos y ve lo que nosotros. Vamos amigo, no queremos que te quedes sin novia. Se un poco mas independiente, apenas y juegas con nosotros.— me explica el primero.
Camino entre ellos preguntándome porque hoy todos me decían lo mismo, aun sonriéndoles para que no crean que me lo tomo a mal y cuestionándome si estoy haciendo un buen trabajo como novio o me estoy esforzando en exceso. Quizás Amanda se esta cansando de mi y por eso anda mas seria de lo normal cuando estamos juntos.
—¡Ya se! ¿Por que no entras al equipo deportivo con nosotros? Eres bueno jugando, así se emociona al verte jugar ya que estarás ocupado en los entrenamientos. Debes hacer que ella te extrañe. De lo contrario— todos hicieron una línea horizontal en su cuello con el pulgar, terminando la oración con esa seña y dejándome con miles de dudas el resto del día.
¿Qué era lo que debía hacer?