Capítulo 85. George.

El significado de lo dicho me fue comprendiendo poco a poco, demasiado lentamente. Algo andaba mal en este esbelto esquema de Lister. Faltaba algo muy importante. ¿Qué exactamente? No podía concentrarme, mis pensamientos vagaban en diferentes direcciones... ¿Por qué Nice se casó con un hombre gay? ¿Por el dinero de la vieja marquesa? ¿Dónde está mamá? ¿Qué pasa con ella? ¿Y la niña? ¿De verdad le dieron pastillas para dormir? ¿Eso es muy peligroso? ¿Pueden dárselas a los niños? ¿Cuántas personas hay en la casa? ¿Con qué están armados?

Fingiendo que estaba estirando mi cuello rígido, miré de reojo hacia la terraza. No había nadie ahí y lo más importante, la puerta estaba abierta. “¿Podemos escapar por allí? Si consideramos que no hay nadie más además de Lister, Albina y los dos hombres que me trajeron, entonces tengo una oportunidad, si consigo el cuchillo. ¿Pero cómo llegar a él? ¿Qué pasa si tienen pistolas o algo más genial? " - Me preguntaba.

- Está bien, te lo diré, literalmente, en pocas palabras. - Sonó la voz de Lister y me concentré. - Este es el plan. La insidiosa marquesa italiana lleva a la quiebra a la empresa constructora, desacredita a su propietario y sobre él se cierne la amenaza de acusaciones de casi matar a Rick.

Se acercó a mí de nuevo, justo cuando soltaba la cuerda de mis manos. Ya pensé que se daría cuenta de esto, pero aparentemente este idiota se dejó llevar tanto por su victoria y genio que no notó nada y, agitando teatralmente las manos, continuó:

- Usted, señor Celan, está furioso, por lo que decide vengarse y devolver lo perdido. Secuestra a una niña inocente, lo escondes en su casa de campo vacía y lo atraes hasta allí a Berenice Della Altavilla. Naturalmente, de acuerdo con la ley del género, ella le transfiere retroactivamente su fondo “V&A”, pero en ese momento aparece la niña y, sorprendido, le dispara a la niña. La madre está tratando de proteger a su hija y se produce una pelea entre vosotros. Bang-bang y Berenice muere, más tarde usted se da cuenta del terrible crimen que cometió y, en un ataque de remordimiento, se quita la vida. Su todavía esposa, Albina, se convierte en la única heredera.

- ¡Pues eres un bastardo! - No pude soportarlo. - ¿Qué pasa con mi madre? Ella también es heredera.

- No te preocupes, querido, tu madre no sobrevivirá a un segundo derrame cerebral, después de ver una imagen dramática. Yo me ocuparé de eso. - respondió Albina. - Lo sé, querido, sé que me ofreciste dinero y bienes para el divorcio, pero esto no es suficiente para los seis años de humillación que sentí por tu parte. Convertirme en una mujer divorciada y regresar a la casa de mi padre como un perro apaleado, sería humillante. Si no pude conseguirte, al menos quiero conseguir todo lo que te pertenece. Y el papel de una viuda inconsolable es mucho mejor que el de una divorciada.

- Peter... – de repente gruñó Nice.

– ¿Estoy escuchando, mi bella dama? - Se acercó a su silla y se sentó en el reposabrazos. - Estoy prestando atención.

Liberado de su atención, comencé a mover las piernas para despegar la cinta, que puse para disimular mis ataduras. Estaba listo a luchar, pero aún era temprano.

– ¿Qué pasará con mi hija? – preguntó Nice. Yo ya sabía la respuesta, pero ella todavía seguía teniendo esperanzas.

- Lo siento, - Lister se encogió de hombros con indiferencia, - la niña también tendrá que ser eliminada.

- ¡No! ¡No hay necesidad! ¡Te lo ruego! ¡Es una niña! ¡Ella no tiene absolutamente nada que ver con eso! - suplicó Nice.

- ¿Cómo qué no tiene que ver con esto? – objetó Peter. - ¡¿Cómo es que no lo entiendes?! Ella también puede convertirse en heredera. Aunque estas a punto de divorciarte, Fran, en interés de su hija puede exigir una revisión del caso sobre la transferencia del fondo en nombre de George Celan, contratará a abogados, expertos, detectives para realizar más investigaciones para conseguir la verdad sobre la muerte de su madre. No, no necesito eso. Pero conociendo a Fran, tras la noticia de la muerte de su mujer y su hija, simplemente se encerrará en algún agujero, llorando, culpándose que te dejo y dibujará algo apocalíptico.

- ¡Te daré todo! Te transferiré toda la propiedad, todos los valores, ¡pero no toques a Erika! -  gritó Nice desesperada.

- Como ser humano, te entiendo. - Lister meneó la cabeza. - El instinto maternal y todo eso... Pero tú también nos entiendes. ¿Por qué deberíamos correr riesgos, si todo se puede hacer de la mejor manera posible?

- Nada saldrá bien en tu plan, hay un punto débil. - de repente dijo ella con confianza.

- ¿Cual?

- Gor nunca le haría daño a Erika. – su voz era apenas audible.

– ¿Por qué es esto? ¿Puedo preguntar?

- Porque es su padre... La pequeña aventura terminó con mi embarazo. Erica nació exactamente siete meses después de que rompí con George Celan. La niña es el motivo de nuestra enemistad. ¡Quería quitármela!

Nice estaba tratando de convencer a los secuestradores de que yo sabía de la existencia de mi hija. Estaba claro, que quería salvar a la niña. Una cosa no me quedó clara: ¿estaba diciendo la verdad? ¿Erika es realmente mi hija? “Si se quedó embarazada, entonces entiendo porque se casó tan rápidamente con un gay. ¡Detente! Ahora no puedes pensar en eso. Ahora debes pensar en cómo salvar a tu... familia". - Me ordené mentalmente, pero mirando el cuchillo, sonreí. - "Cuando termine esta pesadilla, si termina, me casaré con Nice. Aunque tenga que arrastrarla hasta el altar por el pelo. La niña necesita un padre, y yo necesito una familia..."

-Es ciertamente muy interesante, - dijo Lister pensativamente, levantándose del pasamanos de la silla de Nice, - pero en general nada ha cambiado. Digamos que tu ex amante no quería matar a la niña. Supongamos que hubo un accidente, que se disparó el arma, cuando vosotros discutían y la bala alcanzó a la niña. ¿Eh? ¿Qué te parece esta versión? En mi opinión, esta es aún mejor. El desafortunado padre tiene un incentivo adicional para quitarse la vida. - se rio y puso en la mesa algunos documentos. – Firma. Y te prometo, que tu niña no sufrirá mucho, habrá un ángel más en el cielo.