Notas del corazón [outbreak libro #1]

CAPÍTULO IV

CAPÍTULO IV

Mia.

Me remuevo en la cama tratando de dormirme, pero es realmente imposible, suspiro y termino sentándome en la cama.

Paso una mano por mi cara y me levanto, me pongo unos tenis y salgo de mi habitación.

Paso con cuidado por el pasillo tratando de no hacer mucho ruido para despertar a Alice, agarro las llaves del apartamento y salgo.

Subo al ascensor y bajo al lobby, el recepcionista esta completamente dormido, así que no me preocupo por nada. Salgo del edificio dejando que la brisa de New York me abrace, meto mis manos en los bolsillos de mi sudadera mientras empiezo a caminar.

Realmente no me preocupo mucho por las personas que me pueda encontrar, porque son las 4:30 de la mañana y nadie sale a caminar a esta hora, a menos que seas alguien centrado en su cuerpo, ahí si sales a caminar a esta hora, y luego estoy yo, que estoy saliendo a caminar a esta hora porque literalmente no me puedo dormir.

No me alejo mucho del edificio, porque no conozco mucho la cuidad y no me quiero perder.

Me siento en el mismo lugar en el que me vengo sentando desde que vinimos.

Desde que vinimos de Londres no puedo dormir, supongo que el cambio de horario me ha afectado, ya que en Londres dormía mucho. En estos momentos tienen que ser las 9:30 o 10:00 en Londres.

Suspiro, me levanto cuando veo que ya esta empezando a amanecer.

Empiezo a caminar de vuelta al edificio antes de que alguien me vea por aquí y descubra donde vivimos.

Entro al edificio y el recepcionista sigue dormido, decido tocar la campanita y salir corriendo hacia el ascensor para llegar al apartamento que comparto con Alice.

Abro la puerta con cuidado, me doy la vuelta y la cierro igualmente con cuidado.

—¿En donde andabas? —escucho la voz de mi hermana, me sobresalto y me doy la vuelta.

—Joder, Alice, deja de hacer eso —respondo mirándola.

—Deja de salir a caminar en la madrugada, te puede pasar algo —contesta llevando una taza a su boca.

—¿Qué haces despierta a esta hora? —le pregunto, me acerco a ella y le doy un beso en la cabeza para sentarme a la par de ella.

—Pelusa me despertó cuando te fuiste, ella se volvió a dormir cuando cumplió su misión.

Pelusa es la gata de Alice, la adopto antes de venirnos a Nueva York. Sinceramente a mí no me gustan mucho los gatos, pero si a ella le gustan yo estoy bien con ello, que tenga todos los que quiera.

Rio, juego con las llaves que tengo en las manos.

—¿Por qué no puedes dormir, Mia?, cuando estábamos en Londres dormías y nadie te podía despertar. Desde que llegamos a Nueva York casi ni duermes.

Resoplo—. Es el cambio de horario, ya me acostumbrare al horario de acá.

—Más te vale que lo hagas porque creo que nos quedaremos un buen tiempo aquí.

Antes de que le pueda contestar se levanta del taburete y se va a su habitación. Hago una mueca mientras sigo jugando con las llaves.

Bendito seas, Nueva York.

𝄞  ♪

—¡Mia!, ¡una foto, por favor! —me gritan cuando salgo del estudio de grabación.

Hago una mueca, agarro de la mano a Alice para que no se separe de mi mientras caminamos hacia los coches que nos esperan.

Tony nos trata de proteger a toda costa, siempre que siento que me voy a caer por los empujones que me dan, me sujeto de los brazos de él. Él siempre trata de cuidarnos a nosotras, mientras que los demás se encargan de los demás.

Entramos al ban esperando a que los chicos entres, ellos vienen entre risas y empujones. Los espositos entran primero, Emily y Michael llevan casados desde ya hace 6 años, durante ese transcurso ellos han tenido una niña llamada Melanie, la niña apenas tiene 5 años, así que todos suponemos que la procrearon cuando apenas estábamos empezando.

El siguiente en entrar es Jackson, Jackson es de los únicos al cual nunca le hemos conocida ni una novia, él dice que prefiere mantenerlo en privado porque así no se va la magia.

Y las ultimas en subir son las mejores amigas, Chiara y Alessia, ellas son las menores junto a Alice.

Y luego estamos nosotras, las hermanas Scott.

Y todos nosotros conformamos Outbreak.

Emily y Michael siendo los mayores con 25 y 26 años, luego le sigue Jackson con 24, luego voy yo con la misma edad que Jackson, y por último van Chiara, Alessia y Alice. Chiara con 23 años, Alessia con 22, y Alice con 19.

Todos nos queremos, aunque a veces no nos soportemos.

—¿Ahora por qué se ríen? —pregunta Alice cuando la ban arranca.

—Es que Jackson casi se cae —contesta Chiara entre risas.

Sonrió —. ¿Eso es algo nuevo de Jack o qué?

—Ja, ja, que chistosita te despertaste el día de hoy, Mia —contesta él, rueda los ojos y empieza a revisar su celular.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.