Nuestra Segunda Oportunidad. Saga: Nyc N° 3

Capítulo 50

"Todo resuelto. Ahora depende de ti"

Ehan había leído el mensaje de su padre unas cuarenta veces.

Cuando lo leyó por primera vez, sintió como un enorme peso era retirado de sus hombros, pero la ansiedad por ver a Hanna no se apartaba de su cuerpo.

Esa noche nada podía salir mal. Iba a recuperar a su mujer.

Se encontraba de camino al evento con su smoking como compañero esa noche. Estaba feliz por toda la ayuda que le brindaron sus padres; jamás espero que su padre le ayudará a recuperar a Hanna. A pesar de todos los problemas que había causado Giselle con esa estúpida publicación, debía reconocer que gracias a eso, su padre había abierto sus ojos en lo referente a su cuñada.

Llegó al hotel y el valet se llevó su vehículo mientras una serie de periodistas que no habían sido invitados lo esperaban afuera del edificio.

— Señor Hilton. ¿Son ciertos los rumores sobre su compromiso?

— ¿Esta la señorita James embarazada?

— ¿Qué planes tienen como pareja?

Ehan los observo molestó. Odiaba hablar de su vida personal y era peor aún hablar sobre las mentiras dichas por su cuñada.

— La señorita James y yo. No estamos comprometidos. Lamentablemente la persona que dio esa información estaba muy mal informada. Salimos un par de veces pero jamás llegamos a ser una pareja — dijo con el rostro serio — De momento me encuentro en una relación sentimental con mi ex-prometida. La señorita Hanna Kelly.

Unas vez las palabras salieron de su boca ya no había vuelta atrás. Pero se arrepintió unos momentos después por que... ¿Qué sucedería si Hanna lo rechazaba de nuevo? ¿Y si no conseguía su perdón?

— Se dice que la información fue dada por una persona cercana a usted y su círculo. ¿Existe la posibilidad que en el tema del embarazo se ha mencionado debido a la señorita Kelly?— pregunto un periodista.

— No lo sabemos todavía pero nos gustaría tener más hijos. Ahora, si me disculpan, debo entrar a la velada. Buenas noches.

— ¿Mas hijos Señor...?

—Señor Hilton. Una pregunta más.

— Señor...

Todos los entrevistadores comenzaron a llamarlo al percatarse de un pequeño detalle en la frase "nos gustaría tener más hijos" pero Ehan no giro a verlos en ningún momento.

Entro al hotel y observo a todos los presentes. Debía reconocer que la temática Black and White le daba un toque muy moderno a esa gala.

Ehan comenzó a saludar a todas las personas y empleados que se encontraban ahí, se están comportando como todo un anfitrión hasta que una voz lo llamo por atrás.

—Buenas noches señor— lo saludo Carly con una sonrisa. Ehan le regreso el saludo con una sonrisa pero esa sonrisa desapareció cuando vio a Sarah a un lado del salón.

Se disculpó con Carly y camino directamente hacia Sarah. ¿Qué hacia ella ahí? ¿Acaso no le había quedado claro que estaba despedida?

—Buenas noches señor Hilton— Saludo Sarah con miedo y alegría una vez que Ehan llego hasta donde ella. Sentía miedo por la reacción que él podía tener al verla ahí pero estaba feliz porque Ehan no había llegado con nadie, muchas de sus compañeras ya le habían comentado que Ehan había llegado solo y eso le evitaba la molestia de tener que competir contra la otra chica.

—Dejemos las formalidades de lado. Hasta donde recuerdo, tú, ya no formas parte de la planilla de empleados de la empresa, por lo tanto no tienes ningún motivo, razón o circunstancia para estar aquí.

—Yo...sé que no debería estar aquí— dijo en voz baja evitando que alguien la escuchara— pero quería decirte que no tuve nada que ver con lo que salió en el periódico está mañana— dijo sin sentirlo realmente. Ella creía que había sido exactamente esa noticia la que había hecho que la novia del jefe no llegará junto con el esa noche y le daba la oportunidad de recuperar su trabajo y al mismo tiempo...a Ehan.

Muchos de sus compañeros le habían preguntado si era cierto lo de su embarazo y ella sólo había dicho que era un tema privado y que no quería hablar de eso.

Obviamente todos creían que era cierto y que ella llevaba en su vientre al próximo heredero de los Hilton. Tal vez de momento era una mentira pero no lo sería por mucho si su plan salía bien. Su vestido era muy llamativo y muchos de sus compañeros no dejaban de verla.



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En el texto hay: hijos, celos, amor

Editado: 07.02.2019

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