II.

Odio los jueves y a las gallinas

-Debes hacer una lista. -Fue lo primero que dijo después de que la familia durará media hora consolandola.

-¿Lista? -Cuestione confundida, nos encontrábamos sentadas en la cama de mi habitación una enfrente de la otra.

-Una lista de cosas por hacer, Li debes pensar en el futuro tu vida ya es muy aburrida, lo más cool que haz hecho sería cuando una gallina te correteo en la granja del tío Phill.

-Nurtia estaba de mal humor por que Phill me pidió sacar  a sus hijos para el almuerzo. -Nurtia era la gallina del tío Phill y no, no vivía en una granja sino en una casa cerca al centro de la ciudad.

Esa vez termine con las piernas picoteadas y ningún huevo por qué la muy loca me los quito.

-Menos mal aún guardo ese video, mi punto es que todos queremos hacer algo antes de morir ¿Tu no?.

Aquellas palabras de Soph me tomaron desprevenida y es que nunca me había detenido a pensar en que quería hacer antes de morir.

-Nunca lo pense. -Respondí simple en tanto ella sacaba un esfero de tinta roja y una hoja blanca de mi escritorio.

-Ten. -Me paso los utensilios.- Hagamosla juntas.

-Esta bien. -Y así se fue mi noche entre risas y una larga lista que debía hacer en compañía de Soph antes de morir.

Tenía una lista de diez cosas, de inicio tenía que adoptar un gato por que mama nunca me a querido dar una mascota, la segunda: era conocer el mar por que en Kansas no había, la tercera: hacerme un tatuaje significativo, cuarto: aprender tango argentino, quinto: conocer las siete maravillas del mundo, sexto: nadar con delfines, séptimo: escribir un libro, octavo: casarme, noveno: sembrar un árbol y tirarme en paracaídas y décimo: conocer al amor de mi vida y ver la aurora boreal con el.

-La lista no es la más cool del mundo, pero viniendo de ti no es tan aburrida.

-Deja de decirme aburrida.

-¿Por que?, si tu sueño a los seis era ser bibliotecaria. -Confesó a la par que le daba un almohadazo y un "buenas noches" nos dormimos con Soph.

Mi mente vagaba en todos los momentos felices que tuve y aunque Soph tenía razón a lo aburrida que podía ser, estaba dispuesta a cambiar y más con la situación en la que me encontraba. Prendí la luz de la lámpara a mi lado y puse una cosa mas en mayúsculas.

-Enamorar a Isaac Lawrence.

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A la mañana siguiente me desperté con la voz angelical (inserte sarcasmo) de mi prima cantando "I kissed Girl" de Katy Perry.

-Déjame dormir. -Espete, pero fue tiempo perdido, mi madre llegaba a traernos el desayuno sonriendo tiernamente.

-Buenos días chicas, ¿Como estas Lizzy?. -Pregunto sentándose en la orilla de la cama, Soph por otro lado se estaba cambiando y maldecí internamente que no me hubiera despertado ya íbamos tarde.

-Muy bien ma. -Respondí comiendo mi desayuno.

-Hoy las llevaré al instituto. -Aquello acaparó mi atención y la de Sophie por lo que pauso su musica.- Necesito hablar con tus profesores sobre ya sabes... Habrán algunos días que tendrás que salir más temprano para la radioterapia.

Suspire. Esta enfermedad me estaba cambiando la vida, ya no podía comer lo mismo, me iba a sentir de lo peor y encima iba a consumir mi tiempo, pero no habia nada mas que hacer mi única opción era aceptarlo y amoldarme a ello.

Mi madre tal y como dijo nos llevó, Soph y yo teníamos la suerte de ir en el mismo curso ya que se dividía en A y B eso y que mi madre y tía hablaron con el director y le trajeron una canasta de jabones y esencias.

A primera hora tenia Francés era mi idioma favorito y del que ya lo sabía casi por completo, mi sueño era conocer la torre Eiffel.

Hoy habíamos visto los verbos, Soph caminaba a mi lado alegando que francés siempre se le complicaba por su pronunciación en tanto seguimos a la clase de historia.

El profesor Morris entró como siempre vistiendo una camisa de botones sin ninguna arruga y unos pantalones caqui, El señor Morris siempre se empeñaba en recordarnos que no era importante saber los nombres de aquellos que fueron parte de ella, sino saber lo que la causó.

"Aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla" era la frase de Napoleón que tenía colgada a un lado del tablero.

-Buenos dias jovenes del mañana comenzaremos la clase en unos minutos, Lizzy necesito hablar un segundo contigo. -Me pare y fui al escritorio donde se encontraba.- Tu madre nos citó a todos los profesores a una junta esta mañana, nos contó acerca de tu estado de salud y de parte de todos esperamos que te recuperes cualquier cosa que necesites solo pidela.

-Muchas gracias señor Morris. -Y esta era la única razón por la que no quiera que nadie supiera de esto. La lastima.

La clase se paso tan lenta que me quede dormida, era la hora del descanso y me encontraba muy feliz por que era la unica vez que podía ver a Isaac sentado en la mesa de los populares.

-Iré a hacer la fila tú ve sentándote. -Ordenó Soph y como buena chica hice caso, la mesa en la que nos sentábamos quedaba a tres mesas de la de Isaac y tenía una buena vista de su lindo perfil, pero no todo era bueno por que a su lado estaba sentada Amber.

Porque yo no podía ser igual de bonita a ella, aunque tenía algunas cosas en su cara como la rinoplastia, botox, levantamiento de párpados, eso no la hacía menos mujer era aún más hermosa de lo que era antes a diferencia de su interior, el cual juraba era puro veneno.

-Otra vez viendo a Isaac, ¿Cuando serás capaz de hablarle?.

-¡Nunca! Y baja la voz te falto gritar. -Sophie volcó los ojos ante mi dramatismo y dejó frente a mi la bandeja de fruta que siempre pedía.

-Hoy no quiero jugar Voleibol. -Dijo ella, el Voleibol era algo que teníamos en común siempre nos había gustado por ello en la última hora de los martes y jueves se hacían las clases extra.