Extra: Helado del perdón
ASHER MOONCHLID
Enero, 2019
Carraspeo sintiéndome un poco incómodo, veo como mi hermana dice y dice, pero realmente no entiendo ni mierda. Llevo por lo menos así quince minutos y sigo sin entender que es lo que dice, según lo que entiendo paso algo con papá y ella esta alterada.
—Joder Clara, cálmate porque no te estoy entendiendo nada —la callo agarrándola de los hombros, hace una mueca de disgusto mientras se aparta bruscamente de mi agarre.
—¿No has escuchado nada de lo que te he dicho, Sebastián? —ella y mamá me dicen Sebastián. Que manía me tienen —. No me jodas niño, llevo casi media hora hablando como una idiota para que vengas y me digas que no has escuchado nada.
—Pues no, si vas a decirme algo envíame un mensaje, estoy ocupado.
—Me cago en la madre que te pario, de verdad.
—Compartimos mamá, idiota.
—Estoy hablando de una mamá imaginaria, tarado.
Bufo, paso una mano por mi cabello.
—¿En serio no...? —
—Ya te dije que no, así que vete, y no lo voy a volver a repetir —la interrumpo, nuevamente paso una mano por mi cabello ya que estoy enojado por todo esto del problema con papá.
—Hola bestia —escucho la voz de Hayley, llega a mi lado. Veo con curiosidad la caja que lleva entre sus pequeñas manos—. ¿Todo bien? —pregunta, agacho la cabeza y asiento, la agarró del mentón y le doy un beso corto.
Mierda, me encanta sus labios.
Podría pasar mi vida entera besándola.
—Todo bien Hays, nada de qué preocuparse. Asuntos familiares.
De verdad que esta mujer es tarada, a veces me cuesta entender porque es mi hermana.
Hayley me voltea a ver con confusión.
Suspiro—. Clara es mi hermana —le digo un poco cansado.
Ella asiente con la cabeza quedándonos en un silencio realmente tenso, veo como Hayley le echa una de esas miradas a las cuales yo llamo "vete antes de que sea grosera y te desee hasta la muerte". Por lo menos Clara es capaz de entender la indirecta de mi novia y se van sin antes lanzarme una mirada.
Se parece tanto a mamá que me da un poco de miedo.
Suspiro y paso una mano por mi cara.
—¿Estás bien...? —
—¿Qué necesitas? —le pregunto con un tono demasiado hostil para mi gusto.
Frunce el ceño disgustada—. Bueno, pues se supone que hoy es tu cumpleaños y vengo a dejarte un regalo —señala la caja—, pero si no estas de humos mejor me retiro.
¿Hoy es mi cumpleaños? ¿Qué cojones?
Me cuesta un poco procesar todo, la agarró del codo para que se detenga. Hayley me mira de una manera tenebrosa, así que la suelto rápidamente.
—Perdóname dulzura, no debí tratarte así.
Asiente con la cabeza y presiona sus labios haciendo una línea fina.
Agarro la caja y me quedo confundido.
¿No se quedará conmigo? Quiero estar con ella.
—¿No te quedas? —pregunto haciendo que se detenga.
Suspira—. No me siento cómoda si estas así Asher, prefiero que te calmes para poder estar contigo, ¿okay? —asiento con la cabeza tratando de no hacer una mueca, ella se acerca a mí y me da un beso en la mejilla—. Disfruta la caja, me tarde mucho haciéndola.
Dicho eso ella se empieza a alejar, cuando ya no es parte de campo de visión hago una mueca y suelto un quejido. Como puedo abro la puerta de mi habitación, la cierro de un portazo ocasionando que las cosas que están cerca tiemblen.
Dejo la caja en mi escritorio, estoy a punto de abrirla cuando una notificación de mi teléfono me detiene. Suspiro y saco mi teléfono.
Mamá
¿QUIEN ESTA CUMPLIENDO AÑITOS HOY?
Respuesta rápida y sencilla: MI BEBÉ HERMOSO.
Hemos venido con tu padre para que salgamos cariño, ve a por tu hermana y salen.
Y no acepto un no como respuesta.
Suspiro, presiento que nuevamente peleare con mi progenitor.
Busco una gorra y la pongo en mi cabeza ya que no quiero peinarme, agarro las llaves y salgo nuevamente de la habitación. Meto las manos en los bolsillos delanteros de mi pantalón y empiezo a caminar hacia la habitación de Clara. Muerdo mis labios un poco nervioso por el que vaya a pasar a donde sea que vamos.
Toco la puerta de Clara un par de veces para que salga, espero impacientemente porque quiero acabar con esto cuanto antes. Finalmente, la loca sale con una sonrisita de idiota en su cara.
—¿Tú qué? ¿Qué haces aquí? —pregunta frunciendo el ceño.
—Meredith me escribió, están afuera.