EXTRA

Dime... ¿te gusta lo que hago?

Si... más despacio, te lo ruego.

¿Esto es lo que en realidad quieres?

Entonces hazme suplicar.

Haa~... siento mi rostro enrojecer.

¿Realmente estoy loca?

Te quiero en mí, haciendo mis ojos en blanco.

¿Por qué sonríes? Acaso te parezco graciosa?

¿Entonces porque mejor no te hago gemir?

Yo también quiero jugar...

Estás igual de retorcido que yo.

Sonríes como un tonto, sin importar que tus mejillas están llenas de sangre.

Lames de la comisura de mis labios aquella gota que resbala por ellos.

Se que te encanta esto.

Soy algo retorcida y lo sé pero no puedo parar.

¿Qué te parece si te hago sentir mejor?

La adrenalina que la sangre de este pobre joven me ha hecho sentir totalmente drogada.

Y también tu lo estás.

Oh mi Mike, tu y yo no somos uno mismo.

Pero esto nos une.

Sé que deseas matarme de la misma manera y por eso duermo con un ojo abierto.

Lo esperas con ansias y lo sé.

Esperas ese día en el que finalmente te deleitas con mi cuerpo frío, mis ojos apagados y mi sangre caliente vistiendo tu cuerpo mientras estás en mí.

Solo una última vez te miraré antes de marcharme.

No puedo dejar que me mates.

No aún.

Aún necesito vengarme.

Pero si te prometo que mi cuerpo abierto, sera lo ultimo que verás.

Te destruire. Se qué lo hare, soy inevitable.

Creés que eres el León cuando en realidad eres la presa, mis agarras te atraparan.

No prometo salir ilesa, pero si prometo destruirte y llevarte al infierno conmigo.

Porque ambos somos inevitables.

Uno será la destrucción del otro.

Mis carcajadas salen siniestras y tu que estas menos cuerdo que yo las sigues.

Ambos reímos como locos.

Nuestras manos están igual de manchadas de sangre.

Yo nunca fui la buena.

Nunca lo fui.

THE LAST.