Quiero comenzar por Jenny Schwarzkopf, mi madre, luchadora incansable y apoyo incondicional, gracias por esas charlas y por enseñarme «Qué no hacer en caso de amor». También quiero agradecer a mi hermano, Diego, porque gracias a él soy quien soy, y a mis abuelos, Héctor y Nora, por tenerme tan mimada y por su amor.
A Adriana y Nicolás, mis tíos padrinos, por el cariño y apoyo que siempre han tenido hacia mí. Y a Julio, por esos paseos inolvidables en moto acuática.
A esos amigos que han pasado y se han ido, a los nuevos y los viejos, pero en especial a Pamela González, Alexis Arriola y Lautaro Arbelo, porque siguen conmigo a pesar de mí.
Un agradecimiento especial al Squad de la Facultad, porque estoy «Casi segura» de que todo tiene sentido.
También un agradecimiento impresionante a Nova Casa, por confiar en mí y en las locuras de mi mente. A todo el equipo.
Un gracias totales a Nadín Velázquez por la portada y a Aldo Accinelli por los mejores consejos de edición (espero haberlo hecho aunque sea un poco mejor).
También a la música, por inspirarme en momentos de sequía mental, nada mejor que escribir al ritmo de Panic! at the disco, Green Day, One Direction, Simple Plan, entre otras. Gracias por existir.
También tengo mucho que agradecerle a Dios, él sabe por qué.
Y, por último, y más importante, a ustedes, lectores. A aquellos que conocieron esta historia en Wattpad, aquellos que amaron la portada, aquellos que necesitaban saber más luego de la sinopsis. Todos ustedes que se dedicaron a leer, gracias.