Capítulo 25:Puedo tener este baile?

La ceremonia salió tal y como se había planeado. Y no faltó nada. Los votos de los dos fueron realmente emotivos y las anécdotas que contaron sacaron más de una risa a todos los que estaban presentes.

Y la comida fue tal cuál la personalidad de los novios. Descontracturada y con mucha personalidad, tanto como ellos.

Había de todo lo se podría imaginar en el paraíso. Nada de comida elegante que tenían nombres impronunciables y terminabas dejando la mitad en tu plato porque siempre tenían o demasiado condimento o algún ingrediente raro que a nadie le gustaba.

Pero mi parte favorita fue la del pastel. Un pastel de 4 pisos, lleno de cuentas y detalles rosas.Perfecto a la vista y digno de estar en cualquier revista profesional, de esas que una miraba con admiración y soñaba con tener algún día uno como esos en tu propia boda.

Nada de eso duró mucho, porque la ropa de los novios quedó cubierto con el luego de que cortaran el primer paso.

Sentada en mi silla,los admiraba desde lejos. Amaba la complicidad que compartían, los sueños, la manera en la que se aceptaban con sus defectos y virtudes.

Quería para mí eso, en algún momento de mi vida.

El maestro de ceremonias se subió al escenario para anunciar el primer baile de la famosa y tan aplaudida pareja de recién casados.

-Todas las parejas que quieran unirse a los tortolitos, son más que bienvenidos-agregó con un tono demasiado alegre para mi gusto.

De a poco la pista se fue llenando de personas, que querían demostrar su amor bailando un vals, y otros lo hacían solo por diversión. Mirando a los padres de la novia esperaba que su matrimonio fuera tan largo y feliz como el de ella. Tal vez en unos años , habrían niños rubios y con grandes ojos azules corriendo por todos lados.

Reclamaría mi puesto como madrina de por lo menos dos de ellos.

Dos pequeños niños intentando seguir el ritmo de la música sin pisarse sus pequeños pies.

Estaba tan metida en esa escena que no percaté que alguien se acercaba a mi lado y me extendía la mano.

-Me permites este baile?

-Claro padrino de la boda.

Me tomó la mano y me llevó al centro de la pista.

-Debo confesarte algo-dijo nervioso.

-Que será?

-No soy bueno bailando el vals.

-No te preocupes , yo te guiaré-le guiñe el ojo.

Me sonrió mientras colocaba una mano en mi baja espalda.

El simple tacto de su mano allí provocó varias sensaciones distintas en mi cuerpo.

Excitación.

Emoción.

Ganas de huir alguno de los baños y encerrarme con él durante horas.

Después de todo no creo que alguien nos extrañaría si desaparecíamos por media hora o menos.

Mucho menos Maddie. Ella estaría orgullosa de mi al saber que había cumplido una de sus fantasías al encerrarme en un baño con un chico guapo .

No estaba segura en que momento había empezado a sentir esto por Will. No había nunca sopesado la posibilidad de acostarme con él desde aquella noche.

Y había cambiado mucho en mí desde ese momento, sabía que quería estar junto a este hombre .

Pero también sabía que mucho más cambiaría luego de esa primer noche juntos donde nos conoceríamos más íntimamente.

Estaría él dispuesto a dar aquel paso?

Lo estaría yo?