Once upon a time in a cafe (libro #1))

Capítulo 34: Un golpe de la realidad

El fin de semana pasó más rápido de lo que a mi me gustara que pasara.Si me hubiesen concedido un deseo lo único que hubiese pedido era detener el tiempo en aquel lugar para siempre.

Porque fue perfecto.

No le faltó nada.Esquíamos,comimos,tomamos chocolate caliente y litros litros de café.Y también hubo sexo, mucho sexo.Había algo mágico en descubrirnos de una nueva manera.Sobretodo en aquella.

Con una taza de café en las manos y Parker durmiendo a mis pies miraba por el gran ventanal,mientras disfrutaba los pocos momentos que nos quedaban dentro.

-No te pongas nostágica-dijo Will detrás de mí mientras besaba mi cuello-Volveremos pronto.

-Lo prometes?

-Lo prometo.Pero ahora es momento de que tomes a esa bola de pelos y termines tu café mientras llevo las cosas al auto.Nos vemos abajo en 5 minutos.El vuelo sale en casi 3 horas.

-Nos dará tiempo de comer algo antes de subir?Sabes que me mareo en el avión si no como.

-Si, seguro que sí.Después de todo tendremos que hacer tiempo.

-Está bien.En un momento bajo.

No sé si mis ganas por quedarme en ese lugar eran más grandes que mis ganas de vivir pero no disfruté tanto del viaje de vuelta como el de ida.

Cuando aterrizamos en lo único que pensaba era que todo volvería a la normalidad. Will volvería a sus horas en el trabajo.Y yo trabajaría doble turno en la cafetería , además tendría que empezar a armar mi negocio y los únicos momentos en los que podría verlo sería en los fines de semana.

-En qué piensas?-me miró intrigado.

-En que cuando nos bajemos de este auto todo volverá a la normalidad.Tú volverás a tu trabajo, yo tendré que trabajar doble turno y el poco tiempo libre que tenga lo tendré que invertir en mi café.

-Podré ir a ayudarte.

-Lo harías?

-Claro, estamos en esto juntos.Después de todo fue lo que te puso en mi camino.

Lo besé.

-Bien,pero por lo pronto quieres quedarte en casa?Puedo prepárarte unos spaguettis si quieres.

-Suena como una invitación perfecta.

-Entonces dobla por aquí, asi para ir a casa.

-Piensa dormir todo el camino?-dijo mirándolo a Parker mirándo a mi falda.

-Parece que sí.

-Quien pudiera?

-Nosotros luego de la cena.

-Quieres que pasemos por el supermercado para comprar una botella de vino?

-Suena genial.También podríamos ver una película en Netflix.

Lo miré con una sonrisa en el rostro.

-Netflix?

-Solo Netflix.Mañana debo volver al trabajo cariño-dijo tomando mi mano y dándole un pequeño apretón.

Estaciono a unos metros para comprar el alcohol y unas papas.Era la despedida perfecta para un fin de semana perfecto.

-Papas,chocolates y vino-miré dentro de la bolsa-Quieres que muera?

-No , por favor.

-Lo decía metafóricamente no literalmente.

-Quiero consentirte.Amo consentirte

-Y yo amo que lo hagas.

-Vamos a casa ,esos spaguettis no se harán solos.

Todo salió como lo habíamos planeado, Will se enamoró de los spaguettis y elegimos una comedia de Ryan Reynolds para el momento en que nos fuimos a la cama.

A la mañana siguiente , me desperté y él ya no estaba allí.Una nota estaba en cambio en su lugar de la cama.

-Tuve que salir antes.Problemas en la oficina.Te lo recompensaré pronto.Te llamo esta noche.Te amo.Will.

Una sensación de angustia aprisionó mi pecho cuando la realidad golpeó de nuevo.El fin de semana había acabado.

 

Debí hacerme a la idea de que en algún momento volvería a su tarea.

Era un hombre adulto que aún tenía que pagar sus deudas.

Comprar la comida.

Y pagar los impuestos.

Y yo no era nadie para retenerlo aquí e impedir aquello, es por eso que decidí que dejaría que esa horrible sensación se fuera de mi mente y me enfoqué en algo más.

Me puse a pensar en que pensaría la yo de hace unos años atrás al verme así.

Enamorada.

Volviendo a empezar.

Me había jurado a mi misma que no caería en ninguna trampa de algún hombre de nuevo.

Y aquí estaba.

Sufriendo porque el hombre que amaba había salido al trabajo y no estaba a mi lado cuando había abierto los ojos.

Me sentía patética.

Pero patéticamente enamorada.

Y se sentía increíblemente bien.

Envié un mensaje a Maddie.

-Por qué no me dijiste que se sentía tan bien estar enamorada?

Su respuesta llegó al instante.

-Te lo quise hacer ver pero tu no me dejabas. Disfruta.

 

 

 

 

 

 



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En el texto hay: diversion, romance, amor

Editado: 23.05.2020

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