Y claro que después de una boda debía venir la fiesta, la celebración para agasajar a los invitados y a la feliz pareja que se elegía por primera vez o que como esta se volvía a elegir a pesar de los errores, los aciertos, los defectos y las virtudes.
Estaba de espaldas a la gente , mirando el mar cuando Will se acercó a mí y me ofreció un pedazo de pastel.
-Un centavo por tus pensamientos-dijo levantando una moneda imaginaria.
-Tendrás que ofrecerme algo más que un centavo imaginario para hacerme hablar.
-Está bien.Y si te soborno con alcohol?Hay barra libre y mi primo es muy bueno preparando tragos.
-Tal vez que caiga en tu trampa si me ofreces un mojito.
-Ya vuelvo-dijo levantando un dedo-Tu cierra tus ojos y cuenta hasta 10.
Le hice caso y conté hasta diez,pero no cerré mis ojos , era un pecado hacerlo teniendo semejante vista delante de mí.
Volvió corriendo hacia mí con dos tragos en la mano.
-Hiciste trampa.
-Lo siento no pude contenerme.
-Ahora estoy enojado.
Lo besé .
-Toma, desenojate.
-Mala mujer , usas tus poderes para el mal.
-Y espera a ver que otros poderes puedo usar para hacer cosas mil veces peores.
-Eres icorregible.Y yo que pensé que eras tímida y recatada.
-Las apariencias engañan.
-Eso es lo de menos. Tú tampoco me hubieses tomado por un ladrón.
Lo miré sin entender lo que decía.
-Que quieres decir?
Se movió un poco la solapa de su traje para mostrarme una botella de vodka que se escondía detrás de él.
-Te espero en un rato en mi habitación.Podremos jugar un rato.
-Okay, estoy en shock y sorprendida.
-No pierdas de vista tu celular, te mandaré un mensaje para que puedas subir.
-Está bien.
-Yo ya vengo, mi tía me debe un baile.Si no te molesta-dijo alejándose de mi.
-Claro, ve tranquilo.Nos vemos luego.
-Estarás bien.
-Por supuesto.Te amo.
-Y yo a ti-tiró un beso en mi dirección mientras se iba.
Mi momento de soledad no duró demasiado ya que dos de sus primas vinieron en mi dirección y comenzaron con el típico interrogatorio.Cómo se conocieron? Quien dio el primer paso? Se piensan casar? Quien besó a quien?
En un momento me sentí mareada entre tantas preguntas y agradecí que mi telefóno sonara para sacarme de aquel emborrollo.
-Sube.
-Disculpenme chicas pero William me busca.
-Claro, ve con él.Luego nos gustaría seguir hablando contigo.Eres una chica muy linda.Nada que ver con las locas de sus ex-dijo Emma.
-No escuches a mi hermana, tiende a hablar de más , pero esta vez tiene razón.Tiene suerte de haberte encontrado-agregó Mackensie.
Subí las escaleras siguiendo las instrucciones de Will , rogando con no encontrarme con más parientes que me separaran de mi objetivo final.
Cuando llegué a su puerta di tres pequeños golpes.
-Pase.
Abrí la puerta sigilosamente.Y lo ví sobre su cama con la botella y dos pequeños vasos.
-Que me tienes preparado?
-Un pequeño juego que me gusta llamar –hizo una pausa dramática- Yo, nunca nunca.
-Quieres ver arder las cosas verdad?
-Solamente quiero conocerte a fondo.
-Creo que ya lo haces.Ya cruzamos esa barrera hace mucho.
-Quiero conocer tus peores secretos.
-Bien ,juguemos-dije atando mi cabello con una bandita.
-Esa es mi chica.
Luego de media hora y más shots de los que pude contar , descubrí que robó un auto con sus amigos en el último año de la secundaria pero sus consciencias los traicionó y lo dejaron abandonado dos kilómetros más allá del lugar de donde lo tomaron.
También me enteré que le hacia los trabajos de la escuela a las personas que eran más populares a cambio de dinero para poder conseguir cosas para armar su propio laboratorio.
Y él se enteró de que me gustaba meterme a escondidas al cine sin pagar y que había copiado en varios exámenes. Mis crímenes a diferencias de los de él habían sido más leves.
Para cuando llegó el momento en que mi cabeza comenzó a dar vueltas y vueltas y la habitación se veía borrosa me recosté sobre su pecho y me dejé ir, sabiendo que había tomado la decisión correcta al haber venido aquí.
En este momento de mi vida me atrevía a decir que había encontrado la felicidad.
La autentica felicidad.
Esa de la que uno sentía envidia.
Como cuando veían una pareja feliz caminando por la calle y querían lo que ellos tenían.
O esas fotos que aparecían en las revistas de familias felices.
Con una vida resuelta, sin problemas . Sin nada de que preocuparse solo verse bellos y plenos.
Will me daba todo aquello.
Es todo lo que había estado esperando pero no sabía que quería.
Es por eso que lo apreciaba aún más.
Era como un tesoro, un verdadero tesoro.
Uno que quería ocultar de todas las personas.
Para que nadie más lo pudiera ver, tener o tocar.
Y ahí salía mi parte egoísta de nuevo.
Pero no podía evitarlo.
Es que necesitaba tenerlo solamente para mí y estar con su lado para siempre.
Para poder sentirme completa y feliz.
Para ser una Olivia, realizada , plena y llena de felicidad como esas personas que veía en las revistas y en las películas de Hollywood.