No lo puedo creer ya es Lunes y estoy a solo dos horas de sentarme en mi tan soñada oficina, en la gran editorial twelfthplanetpres, aún no lo puedo creer, esto es por lo que siempre he trabajado, aunque cuando recuerdo que mi hermoso sueño esta infestado de demonios corriendo, ensuciando, gritando y llorando por todos lados, una sensación de fastidio y repulsión recorre mi cuerpo es que desde cuando me llego el correo lo único que puedo pensar es en ¿Qué rayos está pensando el estúpido presidente de mi tan amada twelfthplanetpres para permitir que esos demonios horribles y llorones invadan un espacio como sus oficinas?, definitivamente ay gente loca y este hombre, pero ni modos lo único que puedo hacer es poner mi más falsa sonrisa y hacer como que esos desagradables chiquillos no están y concentrarme en mi trabajo y punto.
Además, que no estoy sola en esto, tengo a mi aliado perfecto en toda esta horrible batalla, pero sé que con su ayuda vamos a “Exorcizar a todos esos demonios”, palabras de él no mías, pero ningún otra describe nuestra misión en la editorial.
Como me conozco perfectamente desde ayer escogí tres opciones de outfits, para hoy así no voy estar corriendo como loca y escarbando mi armario buscando que ponerme y que nada me guste hasta terminar tirando todo como, loca y corriendo por las tiendas comprando algo que me guste, para el final llegar tarde como siempre.
¡Entonces!, para evitarme eso, arregle todo con anticipación, desde la ropa interior combinada con cada outfits hasta el maquillaje para los tres.
Ya con todo lo más estresante arreglado me prepare un gran desayuno, para poder recopilar energías, sé que las voy a necesitar para soportar el primer día, ¡Ay santa pacha bendita ayúdame por favor, hazme el milagrito de la paciencia ya que sabes que con esa fue con la que menos me favoreciste y hoy más que nada la voy a necesitar!
Me di una larga ducha para calmar todos mis nervio y relajarme y para lo peor ¿Qué es?, elegir lo que me voy a poner y ¡OHH POR DIOS! Ya solo falta 40 minutos para que Alex llegue por mí.
Soy un desastre en este momento ya me medí los tres atuendos y ninguno me gusta, el primero muy soso, el segundo muy perra, y el tercero muy de fiesta.
--¡Ahhh esto no me puede estar pasando a mi ¿Por qué? ¿Por qué? —Miro al cielo totalmente frustrada, mientras me doy golpes contra la pared.
Cuando de repente una idea cruza por mi mente, lo único que me salvaría será mi vieja confiable, mi outfit más versátil, pero no sé, aun no me decido creo que es muy informal y lo que menos quiero que piensen de mi sea que soy una persona poco seria y peor si me asignan un equipo, no quisiera que me vieran como poco profesional.
Cuando escucho el timbre, salgo de mi debate interno y aun en bata voy a abrir, del otro lado de la puerta esta Alex viéndose totalmente apetecible con ese traje gris que se ciñe a su cuerpo en los lugares adecuado y vaya que tiene demasiados lugares adecuados.
Un carraspeo me hace despertar de mi festín visual para centrarme en Alex un poco incómodo por cómo me lo estaba comiendo con la mirada-
--¿Qué?, estas demasiado comestible en ese traje, no es mi culpa—me encojo de hombros—además acostúmbrate querido Alex, hoy podre ser la primera pero no la única, hoy en la oficina vas a ser las medias nueves visuales de todas, créeme cuando te digo que hasta vas a revolucionar hormonas adolecentes—le doy un beso en la mejilla y salgo corriendo para alistarme y que no lleguemos tardes.
--Viveka, no puedo creer que aún no estés lista, por favor date prisa no queremos llegar tarde en nuestro primer día—escucho que grita desde el pasillo.
Como ya no tengo tiempo para escoger el atuendo perfecto, al fin me decidí por mi vieja confiable, que es: una falda negra hasta mis tobillos suelta con un saco negro igual de cuello tortuga, chaqueta de cuero con detalles plateados muy bonitos y botines negros.
Me maquillo sencilla y me hago un recogido en el cabello muy sencillo pero elegante como está haciendo un lindo día cojo mis lentes y mi bolso y vualá, quede perfecta, me doy la última mirada al espejo y salgo justo cuando escucho a Alex gritar que vamos a llegar tarde.
--Ya, ya tranquilo Ponquesito, ya estoy lista ¿Qué tal me veo? ¿Si parezco la EDITORA EN JEFE DE TEXTO Y CONTENIDO DE LA EDITORIAL—esto último lo digo casi gritando de la emoción que traigo conmigo, cuando veo a Alex el muy pendejo está prácticamente devorándome con la mirada sin ser nada discreto como yo hace unos momentos?
Me quedo mirándolo a ver si, caía en cuanta de que ya había notado su mirada, pero nada y sé que el muy idiota solo lo está haciendo para vengarse de mí, pero eso no impide que se me coloreen las mejillas.
--IDIOTA—grito ya cansada de que me mire así y lo empujo para por fin salir del apartamento, cuando le doy la espalda escucho una carcajada de su parte ¡UYY DEFINITIVAMENTE TENGO AL AMIGO MAS IDIOTA DEL MUNDO!, respiro profundo para voltear y enfrentarlo y no golpearlo.
--Haber cuéntame el chiste porque creo, que me lo perdí—zapateo el piso cruzada de brazos mientras lo fulmino con la mirada por ser tan IDIOTA.
--Ay caramelito, pero si estas demasiado comestible vestida así, no es mi culpa—se encoje de hombre y empieza a caminar para salir del apartamento y to aun proceso lo que acaba de pasar.