¡otra Vez TÚ!

ESPECIAL DIA DEL PADRE

LUTHER

No puedo creer un día del padre más, antes detestaba este día se me hacía solo una forma de comercializar el amor paterno,

Pero después de la llegada tan inesperada de mi querido Elian mi forma de ver esta celebración cambio totalmente, porque desde que empezó a hablar y caminar ha sido todo un desafío y una experiencia única.

Recuerdo que un día del padre hace 6 años él dijo su primera palabra, y ¿adivinen cual fue?, ¡PAPA!, por dio en ese momento el mundo se detuvo y mi corazón se quiso salir de mi pecho.

Y justo en ese momento me di cuenta que tenerlo a mi lado ha sido lo mejor del mundo.

Ya que aún es muy pequeño, todavía aprecia la sencillez de la vida y para él, esos pequeños detalles son lo mejor que me puede regalar en un día como este.

Para el, el DIA DEL PADRE es prácticamente igual o más importante que Navidad o su Cumpleaños.

Y me fascina verlo a si de entusiasmado.

Totalmente lo contrario al Día de las Madres, esa para él es una fecha muy delicada ya que no podemos tener a su madre presente y aún es muy pequeño para entender las razones de por qué son, así las cosas.

Me pueden decir padre baboso, encimoso o como quieran, pero cada carta o regalo por más pequeño que allá sido desde el primero hasta el último lo tengo pegado en una de las paredes de mi estudio, una que tengo dedicada solo para él.

Con fotos de los dos, sus cartas, dibujos y demás cosas que me ha regalado, y es algo que tanto a él como a mí nos emociona demasiado es una pequeña muestra del vínculo que hemos forjado al pasar de los años.

--PAPA—escucho su grito desde el pasillo como cada año, me hago el dormido para que despierte con sus besos y abrazos como siempre. —PAPA, PAPA, DESPIERTA MILA LO QUE TE HIZE, DESPIELTA, DESPIELTA, FELIZ DIA DEL PADLE, PAAAAAAAAAAAAAAAAA—me grita tan fuerte en el oído que me hace levantar de un brinco, aunque ya estuviera despierto.

--Ya, ya, campeón ya me levanté—digo entre rizas, para caer otra vez en la cama de forma dramática.

--Papa ¿Te sientes bien? —me pregunta preocupado poniendo su pequeña manito en mi frente para revisar mi temperatura, es demasiado tierno para ser verdad que la vida me lo haya dado, siendo una completa mierda como lo he sido antes de su llegada.

 

Rio en mis adentros al verlo tan preocupado por saber que tengo.

--Es que no me puedo levantar sin no me dan mis besitos de buenos días y hoy me merezco el doble—rueda los ojos en un gesto de fingido enfado y se sube encima mío para empezar a llenar mi cara de besos, que hacen que me derrita totalmente.

--Listo ya te puedes levantal te he dado una lación pala todo el día, así que no me vallas a pedil más—me guiña un ojo y sale corriendo de la habitación.

 

Me levanto con una sonrisa de oreja a oreja, jamás en mi vida me había sentido tan feliz como lo hago desde que ese terremoto esta en mi vida, le doy gracias a mi dios y a la vida por dármelo de esa forma tan inesperada que me lo ha dado eso ha ayudado a que valore mucho más el tiempo a su lado.

Cuando voy bajando las escaleras escucho un grito de Mafe su nana, y corro a la cocina, nadie mejor que yo sabe lo que insoportable y travieso que puede llegar a ser Elian y con su nana es aún mucho peor.

--Lo tienes demasiado consentido Nana, por eso es tan travieso—le doy un beso en la mejilla, y veo a Elian salir de su escondite con la cara llena de chocolate.

--Pero que te paso campeón hace menos de media hora no estabas así—le pregunto y la nana empieza a negar con una sonrisa divertida en su rostro, ¿Qué se traen estos dos entre mano?

--Papi, ciela tus ojos papi – me habla con esa vocecita suya, aunque ya sabe hablar demasiado bien, incluso llega a sorprenderme a veces con sus ocurrencias se le ha dificultado la pronunciación de la “R” por eso pienso llevarlo a terapia de lenguaje tan pronto cumpla 8 años.

Hago lo que me dice y cierro los ojos.

Siento que me toca las manos para que las extienda, cuando lo hago siento como pone algo húmedo y pegajoso en ellas.

--Listo papi ablelos—cuando lo hago lo primero que logro enfocar es su hermosa sonrisa.

--Ohh, pero mira que rico ¿me preparaste un ponqué? —le pregunto al dejar la mini torta toda desvalijada en el plato.

--SI PAPI YO SOLITO—contesta con esa cara de ángel que pone solo cuando dice mentiras o ha hecho alguna travesura, lo miro con una ceja alzada en el mismo instante que nana se aclara la garganta.

--Bueno no solito, nana me ayudo, pero yo lo decore ¿te gusta? —me pregunta con esa emoción tan característica de un niño cuando hacen algo para sus seres queridos—Esta delicioso es de chocolate con maní y flesas como tanto te gusta—me habla mientras se lame los dedos llenos de lo que espero sea chocolate.

Me llevo una cucharada a la boca y valla que esta delicioso, no podría esperar más de nana ella es una excelente repostera además de que adora a Elian como su hijo y todos estos años ha sido mi gran apoyo.



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En el texto hay: niños, amor, humor y amistad

Editado: 29.03.2022

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