Padre Ó Hijo

Sufrí sin ti ll

Todo se tornaba más blanco sentía un dolor en el vientre, cada vez escuchaba las voces de sus padres, seguía inconciente no quería despertar porque si lo hacía tenía que enfretar sus problemas a su madre, su padre y Dan. Aún lo esperaba, Isabel se hizo un cuento en su pensamiento en el que Dan se enfrentaba a los padre de ella, que aceptaba que la amaba y que no le importaba la opinión de los demás, lo que hizo ella fue por amor y que la iba a aceptarla tal y como era, que al acabar la Universidad harían su familia, tendría su propia casa y todos felices pero no fue así. 

Isabel se despertó después de 2 horas la luz era muy fuerte le lastimaba los ojos. Se fue aclarando de poco a poco al primero que vio fue a su padre con una enfermera. 

- su hija ya despertó._ dijo la enfermera. Su padre levantó la vista, se acercó a su hija y le tomo la mano. La enfermera se fue y su madre entró.
- hola pequeña isa, ¿cómo te sientes?.
Una basura papá cuanto lo siento, no se como me puedes llamar pequeña después de lo que hice.. dijo Isabel entre sus pensamientos. 
- papá yo lo lamento. Nisiquiera merezco tu perdón. No se como sigues aquí después de todo lo que hice._ las lágrimas empezaron a caer su padre tomo su mano y la entrelazo con la de él. 
- no llores hija, después hablaremos de este asunto, no hagas mucha fuerza.
Su madre miraba a lo lejos, Isabel trato de sentarse pero no pudo un dolor punzante se centro en su vientre.
- yo quiero hablar ahora porque no puedo ni mirarlos a la cara de la vergüenza que tengo y se que después la situación se va a tornar peor, creo que no necesitan explicación para saber con detalles los que hice y que todo esto fue por un hombre, un hombre al cual no le importó. 
- tu vida estaba en peligro. Casi mueres en hay adentro._ dijo su madre con una mirada fría. Sus lágrimas de Isabel aumentaron.
- si mamá lo siento mucho, fui una estúpida no pensé en mi. No va a hacer nada fácil para mi, volver a tener su confianza no tengo palabras mamá, papá, la hija única de ambos haciendo esto. Matando a un ser que no tenía la culpa de nada, no era su culpa y ahora se a ido. Me odio a mi misma.
Su padre no dijo nada soltó su mano, su madre fue la primera salir de habitación, su madre no sentía tristeza más es lo que sentía odio a Isabel, si no fuera porque estaba en la camilla ya la hubiera agarrado a golpes hasta que borrará el nombre de Dan, nunca la pegó pero en ese momento quería hacerlo. 
- ya escuché tu versión ahora quiero la de ese muchacho, tu mataste a alguien, cuya personita no tenía la culpa, por amor quiero ver que hace ese muchacho por ti._ su padre salió de habitación sin nada más que decir. Isabel lloró, recordó, hasta quedarse dormida. 

Ya se acercaba la noche otra vez una enfermera entró a revisar a Isabel. Sus padres se marcharon a su casa. Volverían al día siguiente.

- disculpa._ dijo Isabel antes que se retirará la enfermera.
- ¿si?.
- ehm.. bueno no vino nadie preguntando por mi ¿algún muchacho?._ preguntó, no sabía nada de Dan sus padres le habían quitado su celular. 
- si vino un señor, bueno no tanto se veía joven todavía, muy apuesto te ganaste la lotería._ titubeo la enfermera.
¿un señor apuesto? Pensó Isabel. ¿Horacio?
- no llamaría lotería por todo lo que paso. ¿pero ya se fue?.
- si vino mientras estabas en el quirófano, se quedó largo rato hablando con tus padres. 
¿hablaron? Por eso mi madre me odia más. Que le habrán dicho. Hay me odio por esto. 
- bueno gracias._ la enfermera se marchó dejando a Isabel confundida y más apenada.

Al poco rato le trajeron su cena, no comió mucho, estaba sola escuchando el tik tok del reloj. Espero que llegará Dan sin importarle que la hora de visita ya allá acabado. Su noche fue triste mientras que escuchaba algunas voces, ruidos extraños, era un hospital un lugar muy pesado, pero no le importó tampoco tubo miedo su tristeza era más fuerte, lloró hasta ya no poder más. Necesitaba moverse sus necesidades llamaban apenas pudo ella sóla.

- todo fuera más fácil contigo aquí a mi lado.

Alrededor de las 3 de la mañana su sufriento se hizo más grande, la atormento más, se vio obligada a dormirse. 

▪▪

- ¿mamá? Porque me hiciste esto, papá no me quiere. No iba a hacer mucho cargo. Lo siento si fue un estorbo.
- no mi pequeño ángel tu no eras el problema, todo fue mi culpa. 
- ya no llores mami, deja el sufrimiento yo estoy mejor, se que tu no me querías, ahora me siento mejor aqui.
- lo siento amor de mamá, lo siento mucho. 
- déjalo así, ya más dolor, vamos a correr en ese campo de flores. 
Una mano pequeña la tomo vio correr a una niña con cabellos negros, su cabello era lacio no presentaba ondulaciones como el de Dan, era morena como Isabel, sus ojos eran grandes y muy oscuros como el guapuru. Corrían las dos descalzas tomadas de las manos. 
- todavía no llegó mami, los Ángeles me siguen esperando. 
- ¿sigues aquí?.
- me iré cuando tu estés tranquila. 
Acarició su cabello, paso a sus mejillas un poco rojas. 
- estoy bien._ dijo Isabel con tristeza en sus ojos. 
Su angelito tomó una flor y la puso detrás de oreja de su mami. 
- eres muy hermosa, tienes que ser fuerte para lo que te espera. Yo me tomate un descanso pero volveré en tus sueños. 
Vio alejarse y desapareció entre el campo. 

▪▪

Se levantó asustada, su frente sudava frío, el bebé era una niña, una niña muy hermosa. Miró el reloj era las 9 de la mañana todo seguía igual, su desayuno ya había llegado, no había señal de que sus padres hubieran llegado. Trato de calmarse y de converse que su sueño no era una pesadilla. Fue al bañó se hecho agua en la cara para despertar, se aseo, hizo sus necesidades. Trato de cambiarse de ropa pero no pudo por completo sólo sus pantalones y bragas. No podía bañarse necesitaba ayuda.

(...)

Mientras que Dan se levantaba, después de la fiesta que fue el día anterior un reventón sin duda, las resacas cada vez se le presentaba, raro porque antes no era así. Se dio una ducha, mejorando un poco su dolor de cabeza. Bajo ya listo a su cocina para alimentarse, su padre estaba hay tomando su desayuno mientras leía el periódico. 

- buenos días._ saludo mientras tomaba su desayuno para llevarlo a la mesa junto a su padre.
- buenos días Dan. 
- estuvo buena la fiesta de anoche ¿no?._ dijo Horacio sorprendiendo a Dan porque nunca le preguntaba nada. 
- si estuvo bien. 
- y no tienes ninguna responsabilidad. 
- de que hablas yo estoy bien, llevo una buena vida. 
- ¿todo tranquilo entonces?.
- si y si tienes algo para decir es mejor estar sin rodeos. Algo que te estorbe de mi. Aunque no lo tomará en cuenta.
- si tu hijo. 
Dan no se sorprendió estuvo tranquilo porque entre sus pensamiento estaba el efecto de las pastillas.
- ¿cuál yo no tengo? Será tu problema.
- si tienes, bueno tenías eres tan idiota e irresponsable que das a una muchacha pastillas para abortar. Pero sabes todo te salió mal porque ella casi pierde la vida, todo por no hacerte cargo. 
- ¿quién te lo dijo? 
- anoche llamó ahora está en el hospital._ Dan tomo las llaves de su auto y trato de ir al hospital pero su padre le detuvo. 
- y ni se te ocurra ir, ya hiciste suficiente. Agradece que la muchacha te ama demasiado para haber hecho eso, porque si no lo hubiera hecho se te hubiera acabado toda la vida loca que llevas, apesar de todo fuiste astuto. Así que quiero te tomes tus cosas y te vayas donde tu padrino, no te quiero ver aquí. Hasta que pase todo esto y si me llegó a enterar que fuiste a buscarla, o si le dices alguna razón que me incluya a mi, no pagaré a nadie para que se arregle esto. ¿Entendiste? 

Dan le dio una mirada fría pero ganó más la de Horacio que daba más que advertencia. 
Retrocedió los pasos sin miedo y se fue a su habitación donde puso un par de prendas y se marchó. Su padre le dio dinero, el personalmente lo llevo a su nuevo hogar temporáneo. Dan estaba tranquilo porque ya no tenía un hijo, se dio un respiro, la verdad ni había pensado que si las tomo o no, porque estaba convencido de lo enamorada que estaba Isabel de él era más que obvio que se las iba a tomar, pero apesar que sus planes no salió como él quiso y arriesgó dos vidas, igual logró lo que quería. No entendía que le vio o porque se enamoró demasiado de él si le trataba mal, la buscaba cuando él labqueria, era un asco de persona. Incluso cuando ella estaba arriesgando su vida él estaba el una fiesta. 

Después de que Horacio se encargará de su hijo fue a ver a Isabel.

(...)

Isabel mientras tomaba su desayuno fue sorprendida por Horacio que cargaba unas rosas. Tocó la puerta aunque está estaba abierta.

- ¿se puede?._ extendió su cabeza para que lo vea.
- claro pasa._ dijo Isabel no lo esperaba. No a él.
- buenos días, ¿cómo estás?._ dijo mientras le entregaba las rosas.
- gracias no te hubieras molestado. ¿como crees tú?.
- bueno bien, te veo mejor. Con algunas ojeras pero sigues estando hermosa.
Tus halagos no me ayudan en estos momentos pensó Isabel.
- bueno si tu lo dices estoy bien. 
- ¿te duele algo? ¿te están tratando bien?.
- si estoy bien en ese sentido gracias. 
Se hizo un silencio, Isabel sentia más vergüenza. 
- Horacio por lo que paso lo siento no quería arruinar el futuro de Dan. Yo tube todo la culpa, me cree un cuento de hadas en el cuál no era la protagonista. 
- tranquila no es tu culpa. Pero sabes creo que está mejor, ustedes son jóvenes adultos, que podían hacer con un niño._ agachó su cabeza y cayó algunas lágrimas falsas de él.
- yo quiero lo mejor para él, trabajo por él, para que él día de mañana sea un profesional, trabaje tenga su familia estable, yo te quiero y me siento apenado por lo que te hizo hacer. 
- tranquilo yo me siento peor.
- Te a hecho mucho daño y por eso te pido que ya no hables con él, es más le dije sobre lo que te pasó y no quiso venir conmigo. No hables hasta que solucione esto.
Su corazón de Isabel se rompió en mil pedacitos al escuchar que Dan no le importó que ella estuviese hay pero eso no era las que su amor. 
- ¿enserio no te dijo nada?
- no. Pero por parte de él yo me disculpo y no te preocupes por todo yo lo pagaré todo, eso ya hablé con tus padres es lo mínimo que puedo hacer. 
- bueno gracias mi padres no cuentan con dinero. 
- si me lo comentaron, pero no se preocupen ustedes me avisan cuanto es y yo pagaré._ vio la hora, era tarde tenia que encontrarse con Alice. 
- yo me retiró vuelvo en otra ocasión, cualquier cosa que necesites me avisas, mejorate pronto._ trato de robarle un beso pero Isabel se apartó no era el momento tampoco tenía ganas. 
-espera!._ Horacio se detuvo y volvió hacia ella. - le puedes decir a Dan que lo estaré esperando. 
- tranquila yo se lo digo. También que lo quieres mucho.
- si eso también, bueno adiós gracias.
Se marchó Horacio y de vuelta a la soledad.

Su madre llegó en el almuerzo junto con su marido y su hermano. No espero mucho para que su marido echará su veneno hacia Isabel.

- no se como ni te fijaste tu hija, que no te diste cuenta.
- yo nisiquiera sabía que ese muchacho era su enamorado.
- deberíamos demardarlo por lo que hizo a nuestra hija, nisiquiera se a presentado.
¿que?! Hija, primera vez que se preocupa por mi. Piensa Isabel.
- yo ya hablé con su padre.
- pues no es suficiente. 
Su padre llegó al rato uniéndose a su pequeña discusión, Isabel se sentía cansada de todo esto. Su madre no se pudo aguantar la situación y llamó a sus tíos informandole la situación de Isabel. 
Bueno se suponía que nadie debería saber de esto._ pensó Isabel.

Al poco rato llegaron sus tíos más bien era unos de 
sus favoritos de Isabel. Bueno está vez vino su esposa con sus hijas. Su tío no se hacía notar por el trabajo que llevaba. Su habitación estaba repleta y le informaron que si seguía mejorando su estado de Isabel le podían dar de alta para el día siguiente. Escucho a su madre para que demandaran a Dan ella se negó a que hagan eso no quería meterle en problemas a Dan, porque después se lo iba a hechar en cara todo a Isabel, todo va a cambiar en ellos.

(...)

Dan ahora en su nueva casa temporal está más tranquilo, su padrino no paraba en su casa en la tenía sólo para él, invitó a su amigo Alexis.

- porque no fuiste ayer. Estuvo buena la fiesta.
- mis padres se pelearon, tampoco tenía ganas._ tubo que mentir en realidad no fue por que su amigo se estaba enamorando, no le dijo nada a Dan por que lo juzgaria. 
- bueno es lo entiendo. Pero me hubieras avisado tuve que estar con Conor. Y ya sabes como se puso. 
- ¿otra vez de mala copa?
- si le las espanto a toditas. Una como que ya quería, Pero al final se fue y tuve que tomar solo.
- aa y al final que pasó con Amanda.
- ¿qué? No se, por que la mencionas.
- no por nada sólo quisiera saber que paso hay.
- no pasó nada del otro mundo. Creo que está con Eugenio. 
No esperaba esa respuesta Amanda con él, obvio que no encajarían. Cambio de gesto Alexis y Dan lo notó.
- ¿porque eso te importa?
- ¿a mi? No como crees ... me vale ... Sólo preguntaba ... por .... curiosidad. 
- mmm bueno quieres unas gaseosa. 
- si mejor.
No hablaron más vieron una película y pidieron comida. Se fue en la noche Alexis justo cuando se padrino volvía. Dan no tuvo que dar explicaciones porque estaba hay, su padrino ya sabía todo lo que había hecho. 

(...) 

Llego el día en el que le dieron de alta isabel se sintió mas tranquila sólo fueron dos días en ese horrible lugar, sus padres de Isabel se pusieron un acuerdo para Dan y Isabel. Ya no eran unos niños para que sus padres arreglarían sus problemas pero no podía decir nada porque iba a hacer 3 contra una por que Dan nunca apareció. 
Como dijo Horacio pago todo. Era parte de su acuerdo, Dan y Isabel no se hablarían más, ni él la buscaría, ni ella a él. Aunque Isabel no iba a poder hacerlo.
Sus padres la llevaron hasta su cuarto le dijeron que cambiará su puerta que ponga una reja delante por la que tenía era muy insegura, aparte estaba hecha pedazos ya no daba para cambiar su chapa. Le dieron un poco de dinero y eso sólo alcanzaba para su puerta, su padre se encargaría de su reja y tal vez de la instalación. La dejaron en su pequeño cuarto, hacia frío y estaba poniéndose oscuro en ese momento a su cama para ver como estaba. Todo estaba limpio ninguna gota de sangre, la posición de sus muebles y cama habían cambiado. Su teléfono estaba sobre su mesita. No pudo contenerse las ganas y le mando un mensaje a Dan.

Nero
Hola Dan. Ya estoy mejor hoy me dieron de alta, te esperé pero nunca llegaste pero eso no importa. Tranquilo por que no te voy a hacer ningún problema con mis padres. 
Entregado, visto, ignorado. 

(...)

- tu papá vino hoy me dijo que dentro una semana puedes volver a tu casa.
- ¿en que momento vino?
- mientras te tomabas un ducha.
- aa gracias por avisarme.
- la muchacha con la que estás. ¿es la misma del almuerzo?
- si.
Se hizo un silencio, el único sonido era el de la notificación de Dan.
- viste lo que tu madre comentó.
- no, no me importa lo haga esa mujer. 
- no te voy a juzgar esa mujer a sido más cobarde. 
- bueno gracias padrino por la cena estuvo muy deliciosa._ se levantó y se fue a su cuarto, mientras veía el mensaje de Isabel.

- que no me causaste problema, por tu culpa estoy aquí._ dijo Dan respondiendo se al mensaje. 
 




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