Soy Matías Montes Flores, médico profesional, de unos 25 años de edad… y también soy un viajero del tiempo…
Todo comenzó en un 11 de junio del 2020 cuando una extraña mujer llamada Yesenia me ofreció la oportunidad de viajar en el tiempo, al pasado, para resolver un problema de maltrato o abuso que haya tenido. En principio no le creí, pero le respondí muy escépticamente que sí ¿Quién iba a pensar que serían posibles los viajes en el tiempo?
Al día siguiente… (Bueno, eso fue lo que creí), fui transportado al 11 de junio del 2010 sin saberlo, Lo creía como una broma hasta que lo corroboré en el bar de Cox, mi antiguo empleador. La noche de ese día me encontré con el antiguo abusador de mi escuela: Claude Holande. Nos enfrentamos en un duelo en un callejón y le terminé ganando gracias a mi experiencia futura de las artes marciales y boxeo universitario. Después de esa acción, recapacité y quise pedirle disculpas en el hospital, pero fue todo inútil. Volví al 12 de junio del 2020, ahora como un prófugo de la justicia. Debido a esa alteración temporal mi pasado dio un giro para mal.
Estaba lejos de casa, sin amigos, sin apoyo, así que volví a Citytroy para ubicar a Yesenia y pedirle que me devuelva al pasado y así enmendar el error. Ella accedió con la condición de que me casase a la vuelta… no me quedó otra que decirle que sí. Tuve que esperar un poco para que los poderes de Yesenia se recuperaran y mientras tanto huimos. Entre tanto trajín me encontré con “mi otro yo del futuro” que me dio una severa advertencia “No te fíes de esa bruja” y luego me enfrenté con el oficial Claude Holande, sujeto que me guardó rencor desde aquella paliza.
Regresé al 11 de junio y seguí las indicaciones de Yesenia de no interferir en el pasado ya que estaba la teoría de que, si volvía a la fecha específica de mi viaje a través del tiempo, mi otro (viajero del tiempo) desaparecería.
Me oculté en los cerros, pero fue en vano, porque fui sorprendo por Stella y Sofía, compañeras de curso del liceo. Conversamos y comimos un poco. Eso hizo que ocurriera otro cambio a través del tiempo: el inicio de una relación amorosa a futuro entre Stella y yo. Sí a eso le agregamos que ellas fueron testigos de la pelea en el callejón y me defendieron en el pasado eso provocó que no fuera más un malhechor.
Y de vuelta al 2020 todo apuntaba a que se retomó la normalidad. Pero esta vez la sorpresa fue que en algún punto del pasado me casé con Stella y posteriormente tuvimos dos hijos. La bruja Yesenia me dijo que tenía que volver al pasado y resolver esta situación, pero luego me rehusé por su incapacidad de resolver enigmas a través del tiempo y, además, ya me estaba gustando la idea de tener una esposa e hijos. Yesenia, triste por la noticia, prometió volver.
Estuve una semana con mi familia y los fui conociendo y descubrí otras cosas como los nombres de mis hijos (Ignacio y Aída), Pedro y Sofía emparejados y un misterioso relato de Cox del 6 de junio del 2010 (fundamental para más adelante).
Yesenia reapareció y me advirtió que si seguía aquí pasivamente podía morir a causa de otro viajero en el tiempo: asesinaría a mis otras versiones y con ellos a mí, provocando una grieta destructiva del espacio-tiempo, al menos que yo fuera personalmente al pasado y acabase con ellos. No me quedó otra que asumir esa última versión cuando divisé aquella grieta en el cielo.
Stella se me acercó y hablamos un poco acerca de nosotros. Eso hizo que desistiera de mi decisión. Fui al pillaje de Yesenia, pero ya había sido transportado al 2010. Reflexionando y reflexionando volví a darme un giro y casi asesiné a mi otro yo gracias a que otra entidad proveniente del año 2051 lo impidió, era “yo mismo”. Él me llevó al presente y me contó que Yesenia viajó al 15 de junio del 2010 y asesinó a Stella, además reveló la identidad de Yesenia: María José Lee. Luego me entregó un aparato llamado Temporium, que sirve para viajar en el tiempo sin complicaciones.
Y volví al 12 de junio del 2010 para que me diera tiempo para advertir a Stella y conseguir ayuda. A ella le revelé toda la verdad y fue así que entre tanta conversa Stella me recomendó seguir la pista de un misterioso sujeto llamado Oscar Kly, una entidad vigilante del tiempo.
Lo encontré y hablamos acerca de los viajes en el tiempo y que era necesario que recordara todas las cosas vividas en mi pasado para poder iniciar un camino de poder. Recordé toda mi infancia y todos los acontecimientos que tenía bloqueado de la muerte de mis padres en un fatal accidente provocado sutilmente por Iván Carter. Luego tuve una experiencia mística con mis padres atrapados en el “semi-evo”, lugar donde las almas quedan atrapadas cuando se les borra del espacio-tiempo. Me había jurado atrapar a Carter cuando terminase de salvar a Stella.
Kly me derivó donde Enrrico Paulus, otro viajero del tiempo que tenía la misión de impedir que Carter viajase de su máquina del tiempo del 2010 al 2035 pero alguien se lo impidió y fracasó. Enrrico prometió ayudarme en detener a Yesenia y salvar a Stella. Fuimos inmediatamente al 15 de junio del 2010, y después de muchos incidentes de camino al edificio “Rotterdam”, nos enfrentamos en el último piso contra Yesenia. La batalla provocó mi supuesta muerte y que Yesenia/Cote también cayera en el acto.
Después de entregar mi vida por Stella en el pasado, regresé al 2020 como si nada hubiese cambiado. Traté de buscar algunas respuestas en el camino y me enteré de la boca de Sofía que Stella había sido asesinada. Más tarde volví a mi casa y el mundo se estaba cayendo a pedazos y fui transportado a una base especial del semi-evo.
#810 en Ciencia ficción
#6098 en Otros
#746 en Aventura
viajes en el tiempo y dimensiones, historias cotidianas de gente cotidiana, viajes en el tiempo misterios secretos
Editado: 28.06.2024