Desde hace tiempo, la serpiente les condujo.
A la libertad, la libertad de poder pensar.
Pecadores son porque dios les llamó de brujos.
Y reflejan su propio criterio e identidad.
Él los conoce y quiere manipular.
Quiere que vuelvan a preguntar y volver a ignorar
Rezar ángeles para que maten por Dios.
Tu fe está sirviendo a un gran mal.
Que no vas a poder solucionar con tu perdón.
Te rebelas ante él, y morirás.
Cuando tu mente se dé cuenta, será demasiado tarde.
Los ángeles comerán tus sesos y tu carne.
Como te atrevas a rebelarte, al instante.
Matarán a todos, antes de que empieces a revelarte.
En esta historia, la gloria no morirá
En el nombre de la victoria habrá que ganar.
De los triunfos y derrotas aprenderás que duelen.
Y surgirá el Rugido del Héroe.
Desde lo más brutal, de esa apoteosis celestial.
La muerte sigue en su mente, estrés y ansiedad.
El nefilim tiene pesadillas mentales por el pasado.
Con una violencia en su cerebro cansado.
Deberá volar, por su libertad...
Quieren asesinarle y exterminar a su raza.
Que queden menos pues son una amenaza.
Libres quieren ser y volar con sus alas.
Hacia su propio cielo y no temer por sus almas.
El cielo está rojo y su vida por acabar
Cuando tu mente se dé cuenta, será demasiado tarde.
Los ángeles comerán tus sesos y tu carne.
Como te atrevas a rebelarte, al instante.
Matarán a todos, antes de que empieces a revelarte.
En esta historia, la gloria no morirá
En el nombre de la victoria habrá que ganar.
De los triunfos y derrotas aprenderás que duelen.
Y surgirá el Rugido del Héroe.
...
El humano que anduvo por las tierras perdidas
Encontró a alguien que le sorprendió.
Sus alas de color blanco brillaban todo el lugar.
Sorprendido, sabiendo lo que pudiera llegar a ser, se escondió.
El nefilim se acercó y el humano comenzó a atacarle.
Éste se defendió por reflejo propio, y antes de arrebatarle la vida
Se dio cuenta que no era un ángel y le explicó.
Su vida llevaba una venganza y tenía que comenzar.
El ser que estaba en el suelo, le ayudó.
Su historia comienza ahora, una venganza.
Una meta, y sangre les había convertido en amigos.
Ahora estaban dispuestos a luchar contra Dios.
Derrotarle, o incluso estaban dispuestos a razonar.
No esperaban mucho, pero debían dar esa oportunidad.
De todas formas, se pusieron a entrenar.
Por si algo de todo su plan, salía mal...
Cuando tu mente se dé cuenta, será demasiado tarde.
Los ángeles comerán tus sesos y tu carne.
Como te atrevas a rebelarte, al instante.
Matarán a todos, antes de que empieces a revelarte.
En esta historia, la gloria no morirá
En el nombre de la victoria habrá que ganar.
De los triunfos y derrotas aprenderás que duelen.
Y surgirá el Rugido del Héroe.