Capítulo 7

Evander

Yo el Laird Evander Mcneil, conocido por mis enemigos y aliados como el lobo negro estoy apunto de casarme con la sobrina del hombre que mato a mi padre, a unirme a una mujer de un clan que ha sido enemigo del mío durante décadas , mis ancestros deben estar revolcándose en sus tumbas, lo único que me alivia es que el calvario será corto.

- ¿Todo preparado para las llegadas de esas sabandijas ? - le pregunto a Damian

-Si Laird, todo esta dispuesto para que lleguen mañana por la tarde.

Mi sobrina entra al castillo con los sirvientes detrás cargando pieles

-¿ Que es esto Lorna? , ¿ no tienes suficientes matas ?-pregunto con preocupación, pues en cuanto mi sobrina esta expuesta al frío cae enferma- si pasas frío puedo mandar a los sirvientes a que ...

- no es para mi - me corta - es para tu futura esposa , he visto la habitación donde quieres que se quede, es la peor del castillo- su enfado está patente en su voz - está llena de humedades , cuando llueve se llena de goteras y una de las ventanas no cierra , hay rumores de que la pobre es una mujer que se a pasado la vida enferma, ¿quieres ser viudo antes de que el matrimonio termine?

Me cruzo de brazos y digo con indiferencia:

-Me podría importar menos las condiciones en las que viva esa mujer, a la que no quiero que vuelvas a a referirte como mi esposa , porque no lo es y no lo será, por mi puede morirse mañana- una sonrisa lobuna aparece en mi rostro y con total sinceridad prosigo - mejor para mi, un McQueen menos que matar.

Ella abre los ojos con sorpresa y entra enfadada al castillo, supongo que para terminar de acondicionar la dichosa alcoba, en realidad no la he elegido por ser la peor del castillo, sino porque es la más alejada de mi alcoba, esta en la otra punta del castillo, en un ala al que apenas nadie va, lleva abandonado desde hace años, allí no molestara a nadie y si en verdad la alcoba esta mal y muere abre echo un favor al reino quitando una rata McQueen de en medio.

-No me mires así -le digo a mi mano derecha - tú mejor que nadie sabes lo que me ha hecho esa gente, mucho es que no la voy a matar mientras este en mis tierras.

Damian se cruza de brazos y frunce el ceño - al rey no le gustará si a ella le pasa algo ,deberías pensar en tratar bien a la mujer.

-Al rey le da igual lo que le pase o le deje de pasar a la McQueen, es más el trato seguro que lo propuso el lame culos que tiene como consejero, que a pesar de estar deseando que los McQueen -escupo tras decir el apellido- y McNeil nos matemos, le puede mas la avaricia.-destilo ira por cada poro de mi piel al pensar en esa rata , como me gustaría tenerlo delante para retorcerle el pescuezo.

-Oye lobo negro - dice Lester uno de mis hombres pasando una mano por mi hombro - dejemos de pensar en McQueen y pensemos en como celebrar tu última noche de soltero , vayamos a la taberna de Rosalin a tomar unos tragos, tu también gruñón- le dice a Damian que aun esta parado frente a la entrada- desde que llego la maldita carta con la orden del rey el castillo has estado demasiado tenso, vamos a divertirnos un poco ya ya veremos que pasa más adelante.

Suspiro y paso el brazo por los hombros a Damian , unos tragos no me vendrán mal, ya mañana afrontaré mi tortuoso destino de un año, aunque pido a los cielos que la McQueen no dure tanto.