Pinceladas De Una Profecía

Señorita Andrómeda... (Martha Patiño)

Madre Bella, hoy quisiera que el tiempo se detuviera en un eterno presente, hermosa invasión de tu amor en mi interior, cada vez que tu reflejo pasa por mi mente, ingresa a tu mundo haciendo el mío uno mismo, en Medellín hace un día gris; hay demasiado frío, la lluvia refleja tu recuerdo en la ventana agitando tu mano para despedirme, mientras yop marchaba a trabajar, mujercita frágil eres como un sueño, me descubría en tip recorriendo cada espacio de tu ser, momentos de tan volátil diferencia, quiero ver que me llevas donde vos estás, sujeta mi mano y guíame por donde caminar, quiero disfrutar tenerte una vez más, quedate en mí para siempre!, ¡qué complicado es extrañar a quien ya nop está, recuerdo aquella ocasión que desde el Metrocable a la estación hospital me dirigía a verte, hay tan solo minutos para percibir y estallar de latidos mi corazón, tenerte cerca hacía eterno mi llegar, porque contigo siempre deseo estar, el cansancio físico agota mi bondad mientras el delirio agota tu pensar, soñaba llevarte donde la casita amarilla tengo mi morar, el tiempo invención humana jamás estuvo de mi lado, llegué tarde a mi cita con el destino, el tic toc del segundero mi principal enemigo, me dio potestad de mover las montañas, cambiaría ese poder por darte un aliento de vida que restablezca mi fe, verte caminar, sonreír una vez más, pero ese soplo de vida solo El Creador puede dar, yop nop tengo esa potestad.

¡Nop puedo evitar mi alma llena de angustia, escucharte hablar incoherencias, como cuando el efecto nocivo de las drogas contaminaba mi ser, siento rabia y rencor!, mis nervios explotan, esto es solo una excusa, hay dios mío como duele, nop pude ayudarte, la realidad llega con el mensajero de tu destino final, atormenta tus sueños, tu paz. Conozco bien el infierno, entraba y salía diariamente de él, mi último deseo es que me lleves contigo, que lejos de tip nop quiero estar, verte sufrir me hace agonizar, ¿de qué sirvió tanto estudio, sip el talento, la inteligencia no pudieron ayudar? La manifestación líquida de mis cristales nop puedo ocultar, mis lágrimas queman como un fuego intenso, me di cuenta de que tenías razón, que si hiciera lo imposible; regresar a la vida, a quien con la muerte ha partido, nunca me perdonarías por elegirte. Martha Patiño, tengo que dejarte ir, yop debo seguir adelante con mi vida, para hacerlo debo saber que tu alma ha encontrado la paz, moriste con el corazón roto, por bondad y por amor, por mi causa. Algo que ninguna Madre debería hacer, trataré redimir todos mis pecados que trajeron tanto dolor, destruyeron nuestra familia. En lugar de satisfacer mis deseos ambiciosos.

Honraré tu último deseo, Hoy, la vida de tu hijo está restaurada, hoy, Kmilin Van Gogh vuelve a florecer… ¡Te Amo!, y Moriré Amándote…




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