Princesita; has sentido mi mano deslizándose por tu espalda hasta tus bragas, por poco exacto ahí para desnudar tu pelvis con precisión, tiernamente con reverencia la idea que se vino a mi cabeza es que estabas muy quieta como para seguir mi destino, o tal vez robe hasta tu último suspiró, ¿en qué me he convertido? ¡Deseo ser tu dueño, hacerte mía, poseerte, shhh!, guarda silencio esta noche, déjate llevar en mis sueños, los latidos del corazón nop permiten disfrutar de nuestro encuentro mental.
Se van borrando con una sonrisa de los labios tuyos, mi melancolía, esta melancolía que no tiene decencia y nunca la tendrá, un amor que sigue lejano de mi vida, veo tu silueta siempre en mi pensamiento, cada vez que desnuda fuiste mía te lleve más allá que dónde nadie te ha llevado… Solo fui esa estrella fugaz, que pasa sin quedarse…
La biblioteca en Booknet es una lista útil de libros, donde puede:
guardar sus libros favoritos
ver fácilmente las actualizaciones de todos los libros de la biblioteca
estar al tanto de las nuevas reseñas en los libros
Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.