Hay días como hoy en q me afeito, me perfumo, me aplicó esa loción VIP, me rasuro a lo soldado allí abajo, me pongo mi bóxer de Calvin Klein, me sintonizo con el dance y el beat me invita a un trance que me convierte en algo más que un simple mortal, entonces salgo a la calle y de repente me tomo una fótico en el centro comercial La Central y la cámara refleja de mí, una mentira que parece que fuera realidad, el príncipe del lado oscuro de la luna nop debería publicar su verdadera identidad.
A veces simplemente me dejó llevar por la razón de mi último deseo, me imagino vestido de blanco para impresionar una vez más, de barba rasurado como soldado japonés, sumado a la dedicación narcisista de horas frente al espejo, que dejan como resultado un chico Puppy (aparentemente), quizás un tanto simpático, que a pesar de la decadencia que con el abuso causaron los desenfrenos, y un par de golpes que de blanco mi cabello tiñeron, está noche podría decirte que mi presencia reflejaba la sombra de lo que fui alguna vez, (un ser alado) al llegar con respeto los chicos me saludaron "caballero buenas noches" de manera elegante me atendieron con uno de uva en mano, al final me decidí por el de lulo, recordé nuestros recorridos juntos por la 33 y lamente que ya no estabas…