capitulo 3 - "El origen del pixel"

El Cazador avanzó, cada pisada quebrando el techo como si fuera cristal. Lucas retrocedió, pero Lira no se movió.

—Escúchame, Pixel. Tú no eres de “allá afuera”. Naciste en este mundo.
—¡Eso es imposible! Yo tengo una familia, un colegio… una vida.
—Falsa. Implantada en tu memoria para que no recordaras lo que eras: el último Arquitecto del Código.

Las palabras golpearon a Lucas más fuerte que cualquier sombra. El cubo metálico en su mano comenzó a desarmarse en piezas flotantes que giraban a su alrededor, formando un guante brillante que se acopló a su brazo derecho.

—Tú creaste la Puerta de Medianoche —continuó Lira—. Y solo tú puedes cerrarla.

El Cazador rugió, lanzándose sobre ellos. Instintivamente, Lucas extendió su mano y un torrente de luz azul salió disparado, fragmentando parte de la sombra en miles de líneas de código que se evaporaron en el aire.

—¡Sí! —gritó Lira—. Usa el código contra él.

Pero el enemigo se regeneró, más rápido que antes. El contador marcaba 19:42.

En ese momento, Lucas entendió algo: no bastaba con cerrar la puerta. Si no borraba el núcleo de corrupción que alimentaba al Cazador, todo volvería a empezar.

—Lira… voy a entrar a la grieta —dijo con voz firme.
—Eso es suicidio.
—O es la única forma.

Corrió hacia el borde del edificio, esquivando un zarpazo que casi lo parte en dos. Saltó. El vacío lo envolvió, pero antes de tocar el suelo, el mundo se distorsionó y la grieta oscura lo absorbió por completo.

Dentro no había ciudad, ni cielo, ni suelo… solo un espacio infinito hecho de líneas de código rojas, y en el centro, un trono de sombra donde una figura esperaba.

Era él.
O una versión corrupta de sí mismo.

—Bienvenido, Pixel —dijo su doble con una sonrisa siniestra—. ¿Listo para destruirte a ti mismo?

El contador bajaba a 14:00.