Ruptura

Despierto con el alba, me quedo unos minutos sin saber porque estoy en un bosque, veo el sol aparecer mientras proceso los sucesos de las ultimas horas, aun no sé que tanto es un sueño y que es realidad.

Me levanto y camino hacia la cueva, mis piernas tiemblan porque no sé si encontrare a alguien, tal vez durante la noche Hawkins tomo a Edgar y salió huyendo lejos de mí, tal vez ellos no existan y todo es parte de mi imaginación y yo me encuentro en el bosque del pueblo, tal vez todos estos meses han sido solo una alucinación y nada es como creo.

Tal vez.

Pero al asomarme veo a Edgar dormido en una esquina y al lado contrario a Hawkins dormido igual, ambos con la ropa hecha jirones y unos golpes cada vez más notorios, el pómulo de Tim esta casi negro y ni se diga de los brazos de Edgar, que parecía habían sido golpeados con un látigo o algo por el estilo.

Y mi mayor problema era que mi cabello estaba todo enredado.

Camino por los alrededores, no recuerdo la ultima vez que pude dormir, tal vez fuera mi manera de recuperarme después de haber sido golpeada y regenerada tantas veces, me siento vulnerable y frustrada, estoy enojada con Hawkins y con Edgar por traerme aquí, con Persuasión y Control por encontrarme, conmigo misma por haberme ganado el desagrado de mis compañeros, aunque uno todavía no supiera lo que ocurría.

A pesar de no sentir frio, me abrazo a mi misma como si lo tuviera o lo sintiera, tal vez tratando así de sentirme más humana.

Más viva.

De pronto siento alguien colocándome una chamarra sobre los hombros, al girarme veo a Hawkins, aun mirándome con desprecio.

No, desprecio no, decepción.

- No estamos para que alguien más enferme – dice secamente – aunque no estoy seguro si puedes enfermar.

- Tampoco yo – contesto desviando la mirada – espera, ¿alguien más?

- Edgar tiene fiebre – dice – parece que ayer fue su primera vez usando sus poderes a su mayor capacidad, ya le di algo que le puede servir, pero debemos buscar agua y alimento para seguir nuestro viaje.

Asiento sin mirarlo aún, apenas y nos conocimos y ya pasamos de incomodidad a compañerismo y de nuevo a incomodidad uno con el otro.

- Ten – continúa pasándome la mochila y apuntando hacia el horizonte – adentro hay varios termos, en aquella dirección hay un rio, llénalos todos donde el agua este corriendo, yo buscare algún tipo de alimento fresco, los enlatados serán para cuando no encontremos un lugar con comida.

Aliviada por no tener que seguir a su lado, me dirijo hacia el lugar que me indicó, a pesar de ser muy mala con las direcciones, solo debo caminar un poco antes de escuchar el sonido del rio, me dirijo hacia el lugar y tranquilamente, tomo asiento en la orilla mientras lleno los botes, todo lo hago a mano, sin necesitar de mis poderes, desde que Hawkins me presiono para hablarle sobre ellos, algo dentro de mi se niega a hacer uso de ellos.

Vuelvo un rato mas tarde cargando el agua, en la cueva se encuentra Hawkins tratando de alimentar a Edgar con moras, pero este sigue inconsciente y bañado en sudor, me acerco sacando un termo, Tim me lo arrebata y moja la frente del chico, se ve muy mal.

- ¿Estará bien?

- Casi siempre les pasa a quienes ponen a prueba sus poderes como lo hizo él, si no estas acostumbrado, enfermas, pero esto, esta mas grave de lo que creía – moja los restos partidos de una camisa en dos y los coloca sobre su frente y sobre su pecho – no tenemos medicina suficiente para tratarlo.

Intentamos hacer que tome un poco de agua, no hace por tragarla ni por alejarse, parece no tener fuerzas ni siquiera para tragar.

- ¿A todos les pasa eso? - pregunto.

- Generalmente, es una reacción normal, ¿a ti no te ocurrió? – niego con la cabeza, él suelta una especie de carcajada – ¿Qué? ¿Vas a decirme que desde el principio has sido una maldita Mary Sue?

- ¿Una qué?

- Olvídalo, ¿de verdad nunca te paso nada cuando comenzaste a usar tus poderes?

Lo considero un momento.

- Quedé en coma varias veces, durante días o semanas a veces.

- Eso es raro – dice genuinamente impresionado – aunque bueno, toda tú eres rara, así que tal vez está dentro del espectro normal de Arantxa.

Me trago mis comentarios, simplemente continuamos atendiendo nuestro compañero como podemos, pero el tiempo pasa y el estado de Edgar parece no mejorar, puedo notar a Hawkins cada vez más preocupado.

- ¿Cuánto tiempo tarda en recuperarse? – pregunto arrinconada en el otro extremo de la cueva mientras abrazo mis piernas.

- Ya debería estar mejorando – Hawkins se levanta, vacía la mochila, solo deja dentro un termo con agua y una lata de comida – no podemos seguir esperando.

Sin decir nada más, sale de la cueva, en cuanto mi mente procesa la escena, me levanto y voy tras él, sin importarme dejar a Edgar en tan mal estado.

- ¡Espera! – le grito – ¿Qué crees que haces?

- Escúchame – dice girándose y por primera vez desde ayer mirándome a los ojos – ya no confió en ti, pero, aun así, las probabilidades de sobrevivir son mas altas si nos quedamos como aliados – trato de decir algo, pero no me lo permite – pero si él muere, nuestras posibilidades disminuyen, al este hay un pueblo, iré a conseguir medicina o algo que nos ayude, tratare de volver al anochecer.