Camino al campo con una mano temblorosa en la búsqueda del viento, apaga la lluvia el alma de mi cuerpo. Me pregunto si dejaran de hundirme mis pasos, si de ti me encuentro más lejos. Te busco en el clima, la brisa fría, las ramas torcidas, las hojas dobladas, la ropa sucia. Una galería de miradas curiosas, en mi ahogado aliento por breves momentos te veo, inseguro de tener los ojos abiertos silba el viento diciendo que no vendrá.