Situaciónes extrañas

"Escribir este tipo de cosas me recuerda a las películas de Disney. Por lo cual, me inspiré un poco en el polvo de hadas que era de Campanilla, el mismo que utilizó Peter Pan para Wendy y sus hermanitos.

Durante los últimos días, se habían estado viendo muchas situaciones extrañas debido a que ese polvo seguía apareciendo y yo no sabía por qué. Había buscado para ver si se trataba de algún animal, y no, lo único que me conseguí fue que mi afeitadora comenzara a flotar. Esto definitivamente es hechicería, o que haya fantasmas en casa. Pero verdaderamente, no puedo quedarme aquí. ¿De repente aparece un polvo y hasta tus cosas flotan? Sabía que no era nada bueno.

Enui estaba decidido a mudarse de ese departamento, cuando le cayó un poco de polvo de ese en la nariz. Miró hacia el techo que estaba cubierto con ese polvo molesto, agarró una escoba y comenzó a limpiarlo. Después de que lo quitó todo, la escoba comenzó a volar. ¿Qué? Jajajaja.

Enui, ¿qué? ¿Quién está allí? Enui se fue corriendo de allí, prácticamente cayéndose por las escaleras. Se levantó rápidamente y, para no bajar todo, se subió al ascensor para quedar en el último piso. Al correr, sintió como una fuerza lo detenía, como si él también estuviera flotando. Se limpió las manos que todavía estaban llenas de ese polvo y salió corriendo.

Cuándo llegó a una parte alejada de la ciudad, sintió un ligero empujón. ¿Ahora qué está pasando? Se levantó, mirando a unas criaturas que brillaban encima de él. Eran muchas, pero eran muy pequeñas. ¿Cómo habían logrado empujarlo?

¿Por qué no crees en nosotras, Enui?

Ok, esto se pone cada vez más
extraño, pensó él con la vista nublada por el golpe que se había dado.

¿No vas a responder? Tal vez debamos llevarlo con el hada madre.

¿Hada madre? Pero está re gordo. ¿Cómo lo vamos a levantar?

¡No lo vamos a levantar, tonta! Vamos a utilizar el polvo.

Ohhh... ¡Entiendo! ¿Cómo no había pensado en eso?

Quédate quieto, humano, seguramente vas a estornudar.

¿Qué hacen? ¿Estoy soñando? ¿Son grillos o qué?

¡Claro que no! Somos hadas.

Las hadas no existen, esto debe ser una especie de broma.

¡Por esa razón hemos dejado el polvo en tu casa, no crees en las hadas y nos duele que no creas en nosotras!

Sí, definitivamente estoy soñando, decía Enui una y otra vez.