Capítulo 29

- tenia miedo- confieso mientras me abraza contra su pecho y me acaricia los hombros

Y es verdad, tenía miedo a renunciar a él, a que no volviera, pero mas miedo me daba el rumbo que tomarían nuestras vidas sin él.

Y no me refiero a lo económico, tengo lo de la venta de las acciones de la aerolínea, es por lo que le tendría que inventar a las niñas sobre la ausencia de su padre, de axel, porque a dan en estos meses le han tomado cariño como tal, pese a que aún no le dicen papá.

Tenía miedo de que al final cayera ante esa tipa y tener que verlo con otra, decirle a otra que la ama, ver como la besa o la toma de la mano, imaginar que estas noches estuvo haciendo...

Alto ahí!

Me acomodo lejos de él, parece confundido por mi reacción repentina.

- sucede algo amor?- pregunta.

Inahlo y exhalo profundo.

- cuantas veces?- pregunto 

Se levanta y se sienta en la cama sin cambiar su expresión, intenta tomar mi mano pero la aparto.

- cuantas que?- 

Se acerca y me intenta besar, pongo la mejilla, suspira y coloca sus manos en mi pancita que de ita no tiene nada, los mellizos al sentir a su padre nuevamente comienzan con sus incesantes acrobacias.

Hago una pequeña mueca al sentir lo fuerte que están pateando, ellos tambien lo extrañaron, de nuevo se aproxima hasta mis labios, pero sigo molesta.

- cuantas veces estuviste con ella?- pongo mi mano en su pecho tomando distancia

- nunca- responde tranquilo - como ves que no me provocaba nada, y cuando estaba a punto te imaginaba a ti -

baja a saludar a los inquietos de abajo que apenas los acaricia se vuelven locos, les reparte besos y lo dejo, está saludando a sus hijos, o eso creo hasta que comienza a subir hacia mis senos.

- no te pases de listo park - lo detengo - no utilices a nuestros hijos para contentarme - 

Ignora por completo mis palabras.

- están mas grandes cielo- dice viendo mis senos.

- si, ya tienen siete meses amor, gracias por preguntar- digo sarcástica.

Se aleja y me ve con su natural expresión de " siempre arruinas mis momentos dulces "

- cielo, es verdad, o porque crees que te miraba tanto?- 

Ahora resulta?

- me dijiste que mi presencia te perturbaba!- sonríe

Amo esa sonrisa, pero dada la situación no es el momento para sonreír.

Que no me toma enserio?

- me perturbas de muchas maneras, pero todas buenas -  dice entre risas, lo veo seria, esas palabras me dolieron, por eso le dejé vía libre con la tarántula esa - acabo de recordar a lo mas valioso que tengo cielo, podemos dejar de discutir- hace un puchero, lo que inmediatamente me saca una sonrisa.

- mas te vale que no me mientas park, aun no me has dicho quien es esa mujer y porqué nunca me hablaste de ella. -

Se acuesta y me atrae hacia él.

- salí un par de meses con ella, pero no hubo amor, solo...

Le dirijo una mirada asesina , lo que lo hace callar .

Así está mejor!

- te extrañamos- digo antes de cerrar los ojos.

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Despierto en los brazos de mi esposo, sonriendo como idiota.

Que bueno que volvió.

Pero...

Daniel.

Él se ha portado conmigo como todo un ángel, y aunque fue sin intención, sé que de alguna manera lo dañaré.

Y me dolería hacerlo.

- mami iremos a ver a...

Cindy se detiene al ver al hombre a mi lado.

<<papi?>>- pregunta al borde del llanto.

- hola pulga, me extrañaste?- asiente y se lanza sobre la cama a abrazarlo, me hago a un lado para que los mas pequeños no salgan lastimados.

- no te volverás a ir?, no nos volverás a olvidar?- pregunta mi prodigio mayor.

- jamás, lo prometo- resuelve y la abraza.

Me levanto rápidamente hacia el baño, quien se ha convertido en un aliado, ya que a cada momento del dia voy a visitarlo.

Eso sin contar el indescriptible sueño que me da de la nada, y los dolores de espalda.

Gracias al cielo las náuseas han desparecido, al igual que los cam...nah, los cambios de humor son los mas usuales.

Al igual que los antojos.

Era horrible cuando me despertaba a media noche a comer zanahoria, o helado de chocolate para luego no poder dormir debido a los hiperactivos pedacitos luchadores.

Para solucionarlo me tocaba llenar el refrigerador de todo lo que por costumbre o maña, ya sabía que ellos pedirían.

Marina y lili me ayudaban aveces a sobrellevar el embarazo, daniel era mi pilar para los momentos duros y will era mi consejero, psicólogo y aveces saco de papas en quien me desquitaba los cambios de humor.

La tía nat me ayudaba con las niñas y sára hacia su parte, al no tener a nadie con quien hablar, miraba su foto y charlaba con ella.

Ella fue mi gasolina para seguir adelante siempre, y aun después de cuatro largos años de su ausencia lo sigue siendo.

Salgo del baño y veo la hora, debo tomar el  ácido folico y luego alistarme para las clases prenatales.

Busco las pastillas en la gaveta del botiquín del baño, mientras escucho a mi otra pulga reír y llorar a la vez, de la alegría de tener de regreso a su padre.

Pero al ver mas allá de las pastillas encuentro un folder negro.