Capítulo 50

Con mis párpados cerrados y apretados, esperé que el sonido característico de una pistola sonara y luego sentir el impacto de la bala sobre mi cuerpo, daba igual, estaba resignada... Y si me mataba estaría mas que feliz de saber que me reuniría con mis hijos, quizá el único pesar de mi alma sería axel...y sí, daniel también, aunque sé que estaría bien, dana lo haría feliz, eso se nota.

Sin embargo el impacto nunca llegó y el sonido emitido por el disparo tampoco se escuchó, pese a que la loca nefasta de Jessica parecía estar decidida a matarme.

Hasta que una voz la interrumpió con total autoridad

Y podría con firmeza inminente asegurar de que había escuchado antes esa voz, pero tendría que estar loca, dormida o en coma para que esa voz perteneciera a la persona que se proyectó en mi mente al instante.

- DEBO MATARLA!...ella es la culpable de todo...debe morir y así nuestros problemas se solucionarían... Dejame matarla- escuche como Jessica casi imploraba a...esa otra mujer dejarla matarme, como si se tratara de una cosa sin sentido, con la misma importancia como si de elegir de que ingredientes quieren su pizza.

Mis ojos siguen cerrados, pero es mas bien porque no quiero abrirlos y confirmar que la persona que acaba de llegar y que me está haciendo mierda la vida no es otra que ella...

Hanna.

- aun no, recuerda que aún le tenemos una sorpresa-

No puede ser! No...no! Ella...ella no lo haría...

Abro mis ojos con lentitud, decepcionandome al instante por no haberme equivocado.

-¿ tú?...- arquea una ceja y sonríe con burla - ¿porqué?- 

Se acerca caminando con seguridad y de forma triunfante hasta llegar a mi lado.

Y como si la otra desquiciada no lo hubiera hecho repetidas veces ya, toma mi cabello y acerca su boca a mi oído.

-¿ porqué?...¿porqué no, mas bien?- tira de mi cabello con fuerza hacia atrás, haciendo que me golpee con la pequeña pared tras de mi.

- piensalo...eras la niña popularidad en la escuela..." mi papi tiene dinero...es dueño de una aerolínea "...papi aqui, papi allá"- finge una voz aguda- eras en extremo irritante.

- hanna...- intento hablar en un hilo de voz y aguantando el dolor que me provoca su agarre.

- marta!- exclama- marta freeman...la hija del hombre que tú y ese maldito abogado mandaron a matar- 

Muevo mi vista hacia la loca de Jessica, quien está sonriendo satisfecha por lo que ve.

- yo no...mande a matar a nadie...

- CALLATE! MATASTE A MI PADRE!!!-  grita Jessica, su sonrisa de triunfo ha desaparecido y ahora solo muestra odio en su expresión.

- era una niña...el iba a matar a daniel- 

El agarre de hanna en mi cabello, bueno Marta...como carajo se llame, se afloja un poco al mencionar a dan - él merecía morir, no mi padre...él era el que debería estar muerto!- espeta una agitada Jessica mientras toca su rostro con desesperación, moviéndose a los lados y con su mirada pérdida.

- todos esos Malnacidos, todos esos estúpidos que te encubrieron... Todos pagarán, otros ya lo hicieron...como tú querida sára- comienza a reír de nuevo

Aveces las emociones fuertes no son tan malas si te dan la fuerza que necesitas.

Para hablar al menos.

- que tiene que ver sára en ésto?- mi voz parece volver por un segundo, ya que hasta ellas parecen sorprendidas por mi arranque de valor y mi tono de voz.

- pues...solo esa estúpida era un enorme estorbo, fue todo un placer contratar a esa...esa loca que se moría por christian, una tal perez, para que terminara con ella...pobre mi amado axel, no pudo salvar al amor de su vida!- dice con falso pesar mientras hace pucheros.

- enfermas...son unas malditas locas de mierda!- 

La loca perez? Esa mujer nunca me inspiró confianza.

Se lanzan a reír como si lo que les acabo de decir  fuera el mas gracioso de los chistes.

- oye, pero hay que aceptar que no hizo nada mal el trabajo, recuerdas cuando fui al hospital " a hablar de mi abuela"- pregunta entre risas hanna a Jessica, haciendo con su mano libre comillas al mencionar a su abuela, abuela que ahora dudo mucho que exista.

- cuenta de nuevo como era la cara que tenía está idiota cuando entraste, seguramente le estaban dando la mala noticia de que " no estaba embarazada "- 

Mi mente viaja a ese día... Culpé tantas veces a mamá... Y siempre fueron ellas...Jessica, hanna y la perra perez.

- no seas pendeja, la cara no cambia tarada!- digo entre risas débiles.

Mi sonrisa se ensancha al ver que mis palabras causaron molestia en ellas, pienso que me golpearan, sin embargo solo sonríen.

- te crees tan hilarante? Veamos si sigues igual de animada luego de la sorpresa que te tenemos.-

Cortan el lazo que ataba mis pies y me levantan... y casi a rastras me sacan de aquel encerrado y asqueroso lugar.

Apenas la luz golpea en mi rostro hago una mueca, tanto tiempo en la oscuridad me está pasando factura justo ahora.

Intento adaptarme a la claridad mientras casi a empujones me dirigen a lo que logro distinguir como una cabaña abandonada.

Adonde se supone que estoy? Esto no es una bodega ni nada que se le parezca.

Hanna me apunta con el arma al momento que le da la orden a Jessica de soltarme de las muñecas.