Preludio al desastre

********

Desde el fondo veo caminar a los hombres que siempre acompañan a la princesa, y ocultándose atrás del zorro, está Thorat mirándome con culpa. Activo Tentación, ocasionando que sus bellos ojos cambien de color y camina hacia mí para abrazarme sintiéndose atraído. Noto la sorpresa en todos los presentes, pero no me importa, yo solo quiero recompensar a mí cliente favorito por hacer un buen trabajo, en mi contra, pero lo hizo bien. Pongo mi mano en su pecho para que caiga en un sueño profundo mientras que con mis sombras lo dejo en una habitación del piso superior del bar.

—¿Qué le hiciste? —Pregunta Genevive con curiosidad, mientras se asegura de que él está bien mientras se está alejando.

—Solo lo puse a dormir. —Sonrío de forma ladina —. Tendrá el sueño más feliz a cambio de darme un poco de… ¿su esencia? —Digo dudosa ganándome la mirada alarmada de los tres —. Tranquilos, no lo mataré, no soy una súcubo. Es solo un poco de alimento para mi marca como familiar de Julia, la Reina Demonio de la Lujuria.

—Ah… ¿es que tienes marcas de todos? —Pregunta Jurat, teniendo una extraña expresión seria.

—Como primogénita de los herederos, me toco llevar las marcas de todos hasta que nazcan sus herederos. Es una responsabilidad difícil. —Respondo tranquila mientras me siento en una mesa cercana y tomo un poco de bebida caliente que deja Golda para nosotros—. Pero no vinieron a preguntar sobre mí, así que… —Señalo las otras sillas vacías en una invitación muda a sentarse.

Genevive se sienta a mi lado con total tranquilidad, pero no me pasa desapercibido que su novio me ve con desconfianza y un poco de recelo mientras se sienta al otro lado de ella. Jurat toma la silla a mi otro lado, supongo que para mantenerme vigilada y que no vuelva a pasar lo de la última vez. Tranquila tomo un poco de maní y me quedo viendo a la princesa.

—¿Por qué tanta insistencia? —Pregunto con seriedad.

—Porque eres quién necesito a mi lado. —Responde Genevive, dejándome sorprendida —. No solo fuiste capaz de ver en que fallé, sino que tambien conseguiste encaminarme.

—No fue algo que hice a propósito. —Tomo otro trago de mi bebida —. ¿Qué más?

—Tienes talento, pero no lo puedes explotar como tal sino lo usas con cuidado debido a que te falta una joya, misma, que te puedo proporcionar yo. —Dice segura, y la verdad es que tiene un punto, pero no se lo hago saber —. Además, aunque no es un método que me gusta usar; a cambio de trabajar para mí tiempo completo, me aseguraré de proporcionarte un pago que cubra el doble de lo que ganas actualmente en todos tus trabajos.

Toso ahogada por la propuesta que ha dicho, pues ha despertado en mí el instinto de mi marca de Avaricia. Pues, aunque hago mucho con todo lo que hago, si tengo la facilidad de seguir haciendo el doble de la ganancia con uno solo, tendré más tiempo del esperado para triplicarlo por mi cuenta y ganar más de lo que ella me ofrece.

—Ahora si hablas mi idioma. —Sonrío después de pasar el mal trago —. Si hubieras venido a mí con ese método no te hubiera tratado tan mal. —Suspiro y bebo otro trago para vaciar mi vaso —. Pero siento que no es…

—Fuiste elegida. —Interrumpe de forma abrupta —. El cetro señala quien gobierna, pero también quien lo hace a su lado. —Dictamina dejando el objeto sobre la mesa, y este rueda hacia mí como si me estuviera señalando —. Ya tengo a mi Beta y su mate, ya tengo a mi Alfa, —toma la mano del lobo —, incluso a mi guardia personal enviado por los dioses para estar a mi lado; pero me falta alguien que sea capaz de trabajar en las sombras y al mismo tiempo en la luz. Alguien con la capacidad exacta para desenvolverse en público y pasar desapercibida. Alguien que sepa el equilibrio entre la noche y el día. —Ve fijamente mis ojos —. No creo que exista alguien que represente lo que acabo de decir mejor que tú, no solo tienes un equilibrio casi perfecto, sino que sabes servir a un propósito mayor.

—¿Qué te hace pensar eso? —Pregunto suspicaz.

—Cuando viste un conato de guerra no te echaste para atrás, intentaste evitarlo. Además, eres descendiente de la heroína, por lo que salvar vidas está en tus venas. —Habla con un toque irónico que me causa gracia, pero tiene razón en una pequeña parte —. ¿Qué dices? Te prometo que si vienes conmigo no te arrepentirás.

—Después de prometer un sueldo tan alto, no lo creo. —Contesto divertida mientras como más maní, y una idea me llega a la cabeza —. Si te soy sincera, todavía te falta mucha malicia para intentar si quiera convencerme, pero aprecio que lo intentaras con un mejor enfoque y esta vez investigando mejor a tu rival, así que te propongo esto. —Me acerco a ella para verla a los ojos con seriedad —. Ya estoy en la edad de buscar a mi pareja destinada, así que tarde o temprano tendría que ir Clerum por el festival de la luna roja. Pero ya que estás tan desesperada para tenerme en tu equipo, puedo adelantar mi viaje un mes antes y asistirte. Será algo así como un periodo de pruebas.

—Está bien, me parece correcto. —Acepta con facilidad, notándose más tranquila de lo que estaba al principio —. Lo importante es que vas a venir y eso es suficiente por ahora. —Sonríe con tranquilidad, pero se extraña al ver que sirvo dos vasos con el líquido que he estado bebiendo.

—Normalmente, cuando se cierra un trato, me gusta brindar. —Le acerco un vaso a ella y lo toma con curiosidad —. Por una asociación que saque beneficio para las dos, y por un futuro estable. —Alzo mi vaso instándola a que choque el suyo con el mío.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.